El empresario Mariano Martínez Rojas tomó ayer el control de la planta transmisora de Radio América, por la fuerza, en Villa Soldati, luego de que fracasaran sus anteriores intentos para hacerse cargo de la emisora que el 22 de enero le compró a Sergio Szpolski.

“La radio es mía, así que vine con gente de seguridad y me hice cargo de la planta transmisora, ya que los estudios desde donde se emitía la programación están usurpados por un grupo de ex trabajadores, que no me dejan entrar”, dijo Martínez Rojas.

Y contó que su plan es, en los próximos 15 ó 20 días, conseguir otros estudios técnicos para emitir una nueva programación, “con los 30 empleados que quedaron en la empresa, ya que el resto fueron despedidos y está todo en la Justicia”. Además, el empresario sostuvo que hay una orden de desalojo judicial de los estudios técnicos del barrio de Belgrano, ya que “están intrusados y hace más de un año que no pagan el alquiler”.

Por el contrario, los delegados gremiales de los trabajadores de Radio América aseguraron que Martínez Rojas nunca pagó los sueldos de los empleados, que en todo el año no cobraron ningún sueldo, ni siquiera el mes de diciembre de 2015 ni el aguinaldo de fin de año.

Y que hace tres meses una jueza laboral dictó un embargo de la publicidad oficial que paga el Gobierno nacional, por un millón de pesos, para que se les pague los sueldos a veinte trabajadores de la radio, que iniciaron un reclamo conjunto contra los dueños de la radio.

El delegado gremial Martín Cangini contó que ayer “apareció a las 12 del mediodía Martínez con dos matones armados. Tomaron la planta y nuestros compañeros trataron de entrar ahí, pero no pudieron”. El delegado gremial aseguró que casi tres horas después el empresario sacó del aire la programación que los empleados estaban pasando desde los estudios del barrio de Belgrano y comenzó a emitir música directamente desde la planta de Soldati.

“Hicimos la denuncia penal por intrusión, daño y corte de transmisión en el juzgado de Ercolini”, contó el delegado. Y agregó: “También hablamos con la ministra Patricia Bullrich, para que lo saquen de ahí, ya que el 23 de mayo Martínez había tratado de entrar por la fuerza, pero no pudo, porque fuimos muchos compañeros a impedirlo, y en esa ocasión Bullrich envió gendarmes y prefectos para custodiar la zona. Pero ahora entró y estamos viendo qué hacemos”, dijo Cangini a Clarín.