Tinamú: la fórmula de un vino ícono que demuestra que no hay fórmulas
Es común que los enólogos afirmen que no se atan a ninguna receta cuando se abocan a la elaboración de un vino, sea del segmento que sea.
En un contexto en el que ha ido ganando cada vez mayor peso el concepto de terroir, los enólogos aseguran que es la vid la que impone las condiciones y no al revés.
En otras palabras, que la calidad de uva que se logre en una cosecha será la variable fundamental que determine a qué calidad de vinos se destinará.
Y será en función de esa calidad y de otros factores (como el nivel de azúcar o la madurez fenólica) que se diseñe el plan de trabajo en bodega y definir si conviene, por ejemplo, realizar maceraciones prefermentativas, o establecer la cantidad de remontajes, el tiempo de permanencia de los hollejos en contacto con el vino o el tipo de barrica y el nivel de tostado a utilizar.
En general, cuanto más se asciende en la alta gama, menos fórmulas >> Seguí leyendo