Jeff Bezos es el hombre más rico de la historia, pero al parecer su éxito se basa en una simple "receta": no gastar en aquello que no importa.

Esta norma del fundador de Amazon vivió su máximo esplendor cuando fue entrevistado por Bob Simon, presentador del programa estadounidense "60 Minutes", en 1999.

Es decir, dos años después de que la firma lanzara su oferta pública de acciones (IPO) en Wall Street, donde levantó u$s54 millones y terminó valuándo a la compañía en u$s438 millones.

Bezos llevó en su auto al conductor del programa en un Honda Accord, un auto económico con el que reemplazó a su anterior Chevrolet Blazer. Simon se sorprendió por el coche, ya que no era propio de un empresario exitoso.

"Es un auto perfectamente adecuado", sintetizó Bezos, quien fue un férreo controlador de los gastos de Amazon durante su época de startup y continuó con esa actitud hasta el día de hoy.

Pero no sólo eso, ese vehículo, para el empresario, tiene otro significado.

"Es un símbolo de gastar dinero sólo en aquellas cosas que le interesan a los clientes", afirmó Bezos en la entrevista.

Pero, además del auto, el conductor del programa se sorprendió con otras muestras de la austeridad de Bezos en la casa central de Amazon en ese entonces: su escritorio estaba construido con una madera que supo ser una puerta y la oficina tenía una alfombra bastante sucia.

 "Transporté los paquetes hasta la oficina del correo yo mismo en mi Chevy Blazer de 1987 y soñaba con el día en que pudiera tener una carretilla elevadora", había indicado Bezos al sitio GeekWire sobre sus primeros días en Amazon.

Siguiendo esta línea de humildad, la compañía le pide a sus empleados: "Logren más con menos. Las restricciones generan ingenio, autosuficiencia e invención. No hay puntos extra por  aumentar la cantidad de empleados, el presupuesto o los gastos fijos".

En la actualidad, Amazon tiene un valor bursátil de u$s600.000 millones y la fortuna personal de Bezos alcanza los u$s109.000 millones, según Bloomberg. Y, probablemente, el empresario siga manejando un Honda. O al menos los hizo hasta 2013, según el libro "The Everything Store" ("La Tienda de Todo"), de Brad Stone.