La actriz Andrea del Boca fue procesada en julio por el supuesto delito de haber defraudado a la administración pública. Se la acusa de maniobras irregulares en la financiación de la serie televisiva "Mamá corazón", que produjo ella y que recibió dinero del extinto Ministerio de Planificación que conducía Julio De Vido.

"Yo las cosas que hice las hice de buena fe y defendí la producción. Tengo la conciencia tranquila", dijo la actriz en una entrevista con Luis Novaresio.

"No es una producción fantasma, es una serie de 26 capítulos con un capítulo semanal de una hora, HD, con la mejor calidad, hecho en los Estudios Pampa, con un gran elenco que tampoco tenía un corte político", detalló.

Por otra parte, la actriz destacó los valores de la serie: "Se trataban temas de amor, de familia, de las complicaciones de cualquiera de nosotros cuando se enamora y se desenamora a cierta edad".

Una de las críticas que pesó sobre Mamá Corazón es que nunca salió al aire. Ella explicó que el producto fue grabado para el Banco Audiovisual de Contenidos Universales Argentino (BACUA) y que "son ellos los que tienen la decisión de poner el programa al aire, no la productora" y añadió que del BACUA también salieron programas exitosos como El Marginal.

Respecto de su silencio hasta este momento, del Boca aclaró que su abogado le había pedido que no hablara. Y también disparó que toda esta situación fue la que mató a su padre. "No tengo dudas. Esto terminó con su vida. Estaba bien y de pronto lo vi llorar frente al televisor diciendo: 'Es el fin de tu carrera, hija’”.

En referencia a esto último, la actriz añadió que su padre “debe estar celebrando” que ella haya salido a hablar. “Es que yo tengo la verdad”, agregó. 

Cuando se le preguntó si le molestaba ser identificada con el mote de “artista K” respondió: "Me molesta que mezclen las cosas. Yo soy una ciudadana peronista y me banco cualquier archivo".

La causa que la tiene como acusada se inició porque la productora A+a Group, propiedad de del Boca, cobró más de 24 millones de pesos vía una contratación directa del Ministerio de Planificación, triangulando con la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM).