Al terminar el partido contra Países Bajos, el capitán de la Selección argentina, Lionel Messi, sorprendió a todos, incluso al periodista que lo entrevistaba, porque de repente gritó: "¡¿Qué mirás bobo?!" y lo repitió. ¡Andá pa'allá, bobo!".

Según informó posteriormente el diario Olé, la persona a la que dirigió ese mensaje fue Wout Weghorst, el delantero holandés, que ingresó en el segundo tiempo y anotó los dos goles que alargaron la definición a los penales.

La frase rápidamente se transformó tendencia en las redes sociales y los emprendedores no perdieron tiempo. Ya se empezaron a vender todo tipo de productos con la frase.

Por ejemplo, hay gorras a $3.900 que se venden en Mercado Libre con la frase que dijo Messi, tazas de $ 1.200, remeras de $ 8.000, etc.

 

Messi se descargó contra Van Gaal: "Vende que juega al fútbol y mete pelotazos"

Lio Messi, el capitán de la Selección Argentina, apuntó contra el DT de Países Bajos, Louis van Gaal, quien lo había criticado en la semana.

"El técnico de ellos no fue respetuoso con nosotros", explicó Messi una vez finalizado el encuentro. 

"Messi no juega mucho con el rival cuando tiene la posesión del balón", había dicho Van Gaal del capitán de la Selección.

Tras el encuentro, Messi se acercó a los suplentes de Países Bajos y se lo vio discutiendo con Van Gaal y sus ayudantes.

En ese sentido, Lionel Scaloni salió a respaldar a su jugador. En la conferencia de prensa post-partido, el técnico argentino destacó: "No jugamos con uno menos cuando no teníamos la pelota. Yo creo que Leo se sintió un poco tocado y demostró que es el mejor de todos los tiempos".

"Leo demostró que es el mejor de todos los tiempos, cuando defendimos con 11", dijo Scaloni. "Messi se sintió tocado con los dichos de (Louis) Van Gaal".

"Argentina tiene espíritu de afrontar en todo momento las situaciones. No merecimos llegar a los penales pero siempre dimos la cara. En este Mundial dimos sobradas muestras de carácter, este equipo muestra facetas según lo que pide el partido, siempre sabe lo que tiene que hacer", argumentó Scaloni.

"Es verdad que jugaron de una manera que no esperábamos, cada entrenador elige cómo jugar y cómo atacar. Ellos plantearon un partido muy cortado, en el segundo tiempo se nos hizo difícil. En los últimos 15 minutos ellos empezaron a tirarle pelotazos a los delanteros", destacó.

"Teníamos el partido controlado, pero el fútbol tiene esto, aún cuando creés que todo está terminado. Este equipo tiene juventud y orgullo. Es fundamental para no darse nunca por vencido", concluyó Scaloni.