Zara es una de las empresas de ropa más grandes y reconocidas del planeta. Tal es así, que tiene presencia en más de 200 países gracias a sus cerca de 6.500 locales y su tienda virtual.

En Argentina, el gigante de la moda abrió su primer negocio en 1998 y recién en mayo de 2020, en plena pandemia, lanzó en el país el formato ecommerce donde ofrece prendas de vestir y accesorios para mujeres, hombres y niños.

Sin embargo, más allá de formar parte de una empresa global, Zara no pudo escapar de la realidad económica local. Es que, de acuerdo a un relevamiento realizado por este medio, los precios de distintas prendas que se venden en Argentina son más caras, si se miden en dólares, que en otros países de la región, Norteamérica y Europa. Un fenómeno que se mantiene, aún luego del salto que evidenciaron los tipos de cambio alternativos en las últimas semanas.

Según explican especialistas, hay una serie de factores que inciden en esta realidad: la elevada carga impositiva y la volatilidad del tipo de cambio, sumado a una serie de restricciones, conforman un combo que, aseguran, empuja los precios al alza.

Índice Zara: Argentina, con los precios de la ropa más caros

Si se toma como referencia el valor de una misma prenda en Argentina y se la compara con otros países del mundo, luego de pasar los precios locales a dólar, se observa que aquí los productos son considerablemente más caros que en los otros lugares relevados.

Por caso, iProfesional comparó los precios de un jean y un blazer para mujer, y en ambos casos se observa esta tendencia: además, mientras que la producción del pantalón (según informan desde la página de Zara) se realiza en Argentina, la segunda prenda es importada.

En Argentina, los precios de la ropa Zara son más caros que en otros países de la región

A modo de ejemplo, un jean de Zara cuesta $27.990 en el sitio online de la marca: es decir, si se toma como referencia el dólar blue, costaría unos u$s61; mientras que saldría unos u$s60 al "contado con liquidación".

Esto es, más caro de lo que sale la misma prenda en países de la región como Chile (u$s42), Uruguay (u$s56) y Brasil (u$s55). En Estados Unidos, en tanto, este jean cuesta u$s49 y en España, tierra de la casa matriz de la marca, sale u$s32.

En tanto, un blazer para mujer cuesta en la tienda online argentina $51.990: es decir, u$s113 al blue y u$s112 al dólar "contado con liquidación". El mismo producto cuesta u$s54 en España. También es más económico en otros países de la región, como Chile (u$s80), Uruguay (u$s92), Brasil (u$s94) y Perú (u$s77).

Este escenario se mantiene pese al salto de los dólares alternativos de las últimas semanas, aunque la brecha de precios se acortó: con la suba del blue y los dólares financieros, medidos en estos tipos de cambio las prendas que se venden en Argentina se "abarataron", ya que su valor en pesos (hasta el momento) se mantuvo sin modificaciones.

Por qué la ropa de Zara es más cara en Argentina

Son diversos los aspectos que pesan para que una misma prenda de la misma marca sea más cara en Argentina que en otros países del mundo. Uno de ellos, según explica un experto en la materia, es el factor impositivo.

"Son muchas las cosas que hay que analizar si se comparan los precios. En España, por ejemplo, no hay aranceles de importación con China. Acá, en Argentina, tenés un 33% de arancel de importación, que es el arancel del Mercosur", analizó a iProfesional una fuente del sector.

"Además, respecto al precio final de venta al público, hay que sumarle el 21% del IVA, el 5% de Ingresos Brutos, el 1,2% del Impuesto al Cheque y 2% de arancel de tarjeta. En muchos casos, además, Zara vende a seis cuotas con el sistema de Ahora 12, que tiene un costo del 15%", detalló.

 

A eso se suma el "factor dólar". "La mercadería que importa, Zara la tiene que pagar a los 180 días, no puede pagarla en menos de ese tiempo. Y es muy difícil determinar de cuánto será el incremento del dólar en ese lapso: suponiendo que sea una suba ‘normal’, vinculada con la inflación, subiría 5 o 6% todos los meses. Entonces, si se proyecta el valor del dólar con el que le van a permitir pagar la mercadería dentro de esos 180 días, se le tiene que agregar al precio", explicó.

Es que, detalló, por la escasez de reservas del BCRA, "Zara (y otras empresas que importan), no pueden pagar las importaciones cuando reciben la mercadería, deben hacerlo recién a los 180 días, se patea todo seis meses para adelante".

En ese escenario, señaló el experto, "comparar precios de Argentina con el resto del mundo es difícil". "Porque atravesamos una situación compleja, por los impuestos, la forma de pago y no sabemos cuánto va a estar el dólar cuando se puedan cancelar las importaciones. La foto de hoy es más complicada de lo que puede ser en otro momento", señaló la fuente, quien concluyó: "A todo esto, se le suma el costo financiero. Que, con una inflación tan alta, también se vuelve muy elevado".

Indumentaria, un rubro que crece por encima de la inflación

Según los datos difundidos por el INDEC, a febrero de este año el rubro "prendas de vestir y calzado" aumentó por encima del nivel general de inflación: 121,7% frente a un 102,5% del IPC.

De todas formas, al analizar estos incrementos, Hernán Letcher, director del CEPA, señaló que "los aumentos de precios no han sido uniformes a lo largo de la cadena de producción y comercialización".

"‘Urdido, tejeduría y tintorería’ han incrementado sus precios entre 65% y 85%, aproximadamente. ‘Confección’ lo hizo a la par de la inflación (100%), al igual que la ropa nacional popular de jean. Los salarios se movieron al 100%, como las fibras de algodón importadas y algo por encima el top acrílico", explicó el economista a iProfesional.

 

"Los incrementos más sensibles se concentran en hilandería, que aumentó precios en el orden de 140% i.a., en hilado poliéster, 120% i.a., en hilado de algodón y 150% en hilados acrílico. A esto se suma el incremento de ropa de jean importada, en el orden de 125%. El caso de hilandería presenta ciertas características distintivas: pocos actores, decisión de dolarización de precios, remarcación arbitraria y beneficios por acceso a dólares oficiales a través de amparos para importar", remarcó el analista.

Según explicó Letcher, "uno de los problemas que atraviesa el sector deriva de que los precios de todos los insumos están atados al dólar".

"Esto se debe a que Argentina perdió la independencia y soberanía sobre los insumos, porque buena parte ya no se hacen más en el país: poliéster (se producía 80% a nivel local y hoy sólo 20%, en muchas empresas cierran en 2018), lycra (dejamos de producir desde que la empresa Dupont se fue), anilinas (ya no se produce en Argentina) y acrílico (hoy sólo se produce 50%, antes 75%). Respecto al algodón, funciona como commodity internacional: el 65% de la fibra se exporta y su precio cotiza en Chicago", concluyó el economista.