Escándalo HLB Pharma: exempleada reveló que "ANMAT le avisaba a García Furfaro cuándo iban a pasar las inspecciones"
La investigación judicial sobre HLB Pharma, el laboratorio vinculado al lote de fentanilo contaminado que provocó 96 muertes, continúa sumando testimonios y nuevos elementos. Este domingo, una exempleada de la compañía aportó detalles sobre presuntas irregularidades en el funcionamiento interno de la firma y señaló posibles vínculos con autoridades regulatorias.
La mujer, que se desempeñó como analista de microbiología durante casi tres años y pidió preservar su identidad, relató en diálogo con Radio Rivadavia que en la planta se registraban graves deficiencias en los procesos de producción. Según sus declaraciones, gran parte del personal asignado a tareas críticas no contaba con formación adecuada ni con certificaciones profesionales.
"En la línea productiva había empleados sin secundario completo, e incluso algunos que no sabían leer. Sin embargo, estaban a cargo de formulaciones de medicamentos", afirmó. Además, indicó que existían prácticas sistemáticas para evadir los controles de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).
"Sabíamos con anticipación qué lotes iban a ser auditados. Se contrataba personal específicamente para armar planillas y preparar documentación de respaldo. Eso permitía presentar informes que no reflejaban la realidad del proceso productivo", aseguró.
Funcionamiento del laboratorio y controles
De acuerdo con su relato, la compañía producía comprimidos químicos e inyectables que, por normativa, requieren protocolos de seguridad más estrictos. Sin embargo, señaló que las auditorías oficiales no alcanzaban a verificar en profundidad las condiciones del laboratorio.
"Los registros de limpieza y controles ambientales nunca existieron de forma real. Se falseaban manualmente porque la higiene era deficiente. El personal trabajaba en condiciones inadecuadas, incluso en ropa interior durante el verano por falta de climatización", sostuvo.
También explicó que, pese a la detección de resultados positivos de contaminación en algunos análisis, esos datos no fueron informados a las autoridades ni interrumpieron la producción. "La duda siempre recaía sobre los analistas, como si se tratara de errores humanos, cuando en realidad el procedimiento no se llevaba adelante con los protocolos establecidos", afirmó.
El lote de fentanilo contaminado
El caso se originó a partir de la detección de un lote de fentanilo que presentaba contaminación con bacterias. El uso de esas ampollas en pacientes internados en unidades de terapia intensiva derivó en cuadros severos de neumonía, que resultaron fatales en 96 casos.
Durante la última semana, la Justicia Federal confirmó la localización de 232 ampollas faltantes del mismo lote adulterado. Los análisis posteriores verificaron que todas presentaban contaminación con las mismas bacterias que habían sido identificadas en las víctimas.
Investigación judicial en curso
Hasta el momento, la causa no registra detenciones. Sin embargo, las declaraciones de la exempleada suman elementos a la investigación, especialmente en torno a la relación entre la empresa y los organismos de control.
La denunciante afirmó que desde el propio laboratorio se recibían avisos sobre las fechas de inspecciones oficiales, lo que habría permitido a la empresa preparar documentación o modificar temporalmente las condiciones de trabajo para superar las auditorías.
La Justicia Federal busca establecer responsabilidades tanto en la cadena de producción como en los mecanismos de control estatal. El hallazgo de las ampollas faltantes constituye un punto central en la investigación, ya que permite a los peritos contar con muestras directas para avanzar en los peritajes.
Próximos pasos
Los fiscales a cargo del caso esperan los informes técnicos definitivos sobre la contaminación de los lotes y las condiciones en que fueron producidos. A su vez, la instrucción judicial apunta a determinar si existió connivencia entre directivos de HLB Pharma y funcionarios de organismos reguladores.
La exempleada, por su parte, sostuvo que las prácticas denunciadas no eran hechos aislados sino procedimientos habituales dentro de la compañía. En su testimonio, remarcó que los desvíos en controles y registros se mantenían en el tiempo y que el personal conocía las deficiencias estructurales del proceso productivo.
Mientras tanto, las familias de las víctimas aguardan definiciones judiciales y reclaman avances en la causa. El expediente continúa en etapa de recolección de pruebas, con el foco puesto en reconstruir cómo se produjo la contaminación del lote de fentanilo y qué responsabilidades recaen sobre la empresa y sobre los entes encargados de fiscalizarla.