Fast fashion en Argentina: la expansión de Shein y la respuesta de las marcas locales
El fenómeno Shein se consolidó entre los jóvenes argentinos que buscan moda a precios accesibles y tendencias globales. Usuarios de TikTok, Instagram, YouTube y Facebook publican videos conocidos como "haul", mostrando sus compras y reseñas de cada artículo.
La influencer @cloclomiron2, de alrededor de 20 años, exhibió más de 30 productos de Shein frente a sus 107.000 seguidores, detallando talles, calidad y características de cada prenda. El video superó las 40.000 reproducciones y refleja la tendencia de consumidores que comparten tips sobre envíos, marcas recomendadas y estrategias para recibir sus pedidos a tiempo.
Grupos de Facebook como "Shein Argentina" y "Loc@s por Shein" concentran miles de miembros que preguntan sobre tiempos de entrega, problemas aduaneros y revenden productos por error de talle. Este ecosistema virtual amplifica el fenómeno de la moda rápida y la compra directa desde el exterior.
Cómo funciona Shein: catálogo, precios y promociones
Shein, fundada en 2008 en Nanjing, China, publica alrededor de 7.000 modelos diarios y tiene presencia en más de 160 países. Su modelo de fast fashion ultrarrápido permite a los consumidores acceder a miles de prendas y accesorios, con envíos de menos de 30 días.
En Argentina, la plataforma ofrece descuentos de hasta el 57% y envíos gratuitos por compras superiores a ciertos montos, convirtiéndose en una alternativa atractiva frente a los precios locales. Las medidas gubernamentales recientes ampliaron el límite de compras online a u$s 3.000 por operación, eximiendo de aranceles hasta los u$s 400 y dejando solo el IVA del 21%.
Consultores destacan que el auge responde a la búsqueda de estatus y a la percepción de precios locales "sobrevaluados", luego de años de restricciones comerciales y alta inflación en el sector textil.
Impacto del fast fashion en la industria textil argentina
El crecimiento de Shein representa un desafío para la industria local. La CIAI y la Fundación ProTejer alertan que los productos ingresan sin cumplir los mismos controles que los nacionales, lo que genera competencia desigual.
En el primer semestre de 2025, las importaciones textiles crecieron un 97% en volumen, y los gastos en ropa importada alcanzaron u$s 1.500 millones, un 136% más que el año anterior. Los productores locales enfrentan costos impositivos elevados, logística y financiamiento que encarecen hasta cinco veces el precio de la prenda respecto a su producción.
Para sobrevivir, algunas marcas locales importan parcialmente desde China, ajustan precios o buscan alianzas internacionales, mientras otras deben reinventarse o reducir su producción.
Regulación y propuestas para equilibrar el mercado
Tras las elecciones de 2025, la CIAI impulsa la creación de una ley "Anti-Shein", que propone arancelar en un 35% las compras de fast fashion y aplicar un 3% adicional para financiar un fondo de sostenibilidad textil.
Expertos legales y economistas advierten que la regulación debe considerar comercio global, umbrales de valor y volumen de courier, y que la competencia real también involucra informalidad, escala de producción y costos internos que limitan la competitividad argentina frente a fabricantes internacionales.
Estrategias locales: marcas que importan o reinventan productos
Empresas como Le Utthe, Perramus, Atomik y Etiqueta Negra combinan producción nacional con importaciones desde China para mantener precios competitivos. Algunas reducen costos, otras bajan precios para fidelizar consumidores, y varias ajustan la proporción entre producción local e importada.
La adaptación al mercado implica un cambio en la cadena productiva, alianzas estratégicas y diversificación de productos, buscando ofrecer valor frente a la llegada de marcas extranjeras y el aumento del consumo online.
Shein en América Latina: expansión y estrategia regional
A nivel global, Shein aplica producción bajo demanda, lanzando pequeños lotes y evaluando la respuesta de los consumidores en tiempo real. Su asociación con Sparc Group y la incorporación de Marcelo Claure como vicepresidente para América Latina fortalecen su presencia regional.
En Brasil, la empresa invierte u$s 150 millones para producir localmente y planea que el 85% de las ventas provenga de fabricantes locales a fines de 2026. Argentina aparece como un mercado clave, donde el modelo de fast fashion chino desafía la industria nacional y redefine la experiencia de compra.