Nueva era: municipio aprobó la nueva bajada de la autopista financiada por barrio cerrado
La asunción del nuevo gobierno nacional en Argentina supuso un cambio de paradigma en la gestión de la infraestructura y la obra pública, con una marcada decisión del Estado de reducir drásticamente su participación en la financiación y ejecución de nuevos proyectos. Este repliegue de la inversión nacional ha llevado a las provincias y municipios a buscar alternativas para dar continuidad a obras esenciales, o para concretar aquellas que eran históricamente postergadas. En este nuevo escenario, la búsqueda de financiamiento privado se posiciona como una de las vías alternativas para sostener el desarrollo en casos de marcado interés.
En línea con este cambio de rumbo, y demostrando la capacidad de articulación entre el sector público y el privado, un municipio clave del Conurbano bonaerense ha dado un paso significativo. El Concejo Deliberante de Quilmes convalidó recientemente un acuerdo que permitirá financiar una obra de infraestructura vital con fondos provenientes de un desarrollo inmobiliario. Se trata de la futura bajada de la Autopista Buenos Aires-La Plata en la localidad de Ezpeleta, un proyecto que impulsará la conectividad de la zona.
Este convenio marca un hito en la gestión de obras en la región, ya que constituye el primer aporte de desarrollos privados para costear la bajada de la Autopista. La aprobación de esta iniciativa por parte del Concejo Deliberante de Quilmes sienta un precedente para que otros distritos puedan replicar este modelo de inversión público-privada ante la retracción de la inversión estatal en infraestructura.
Quilmes aprueba la construcción de una bajada de la autopista financiada por un barrio privado
El acuerdo específico fue suscripto entre el Municipio de Quilmes y la empresa DEINGRA SRL, que actúa en su carácter de fiduciaria del fideicomiso Nuevo Quilmes Dos. Este country o barrio cerrado se encuentra estratégicamente ubicado sobre el corredor de la Autopista Buenos Aires-La Plata, siendo uno de los más cercanos a la Ciudad de Buenos Aires y, a la vez, equidistante con la ciudad de La Plata.
La propuesta de Nuevo Quilmes Dos incluye una bajada directa desde la autopista, además de un segundo acceso ubicado a 1000 metros de la Avenida Mitre. Esta doble conectividad convierte al proyecto en un lugar altamente atractivo para quienes buscan seguridad, naturaleza y cercanía a los principales centros urbanos. El acuerdo urbanístico validado por el Concejo asegura que la concreción de la obra beneficie no solo al desarrollo privado, sino también a la infraestructura de toda la comunidad de Ezpeleta, al mejorar el acceso y la fluidez del tránsito en la zona.
La convalidación de este Convenio Específico se convierte en la herramienta legal que permite al Municipio de Quilmes avanzar en la planificación y ejecución de la obra, capitalizando los fondos aportados por el sector privado para concretar un proyecto que era necesario para el ordenamiento territorial y la conectividad del partido.
El futuro de la obra pública bajo financiamiento mixto
La decisión tomada en Quilmes es un claro ejemplo de cómo la administración local se adapta a la nueva realidad de la obra pública nacional. Al correrse el Estado federal de la gran mayoría de las obras, los gobiernos provinciales y municipales se ven obligados a innovar en sus estrategias de financiamiento para no detener el progreso de sus jurisdicciones.
El modelo implementado en Quilmes, donde un desarrollo privado asume el costo de una obra de infraestructura mayor que impacta positivamente en la zona, podría marcar el inicio de una tendencia de financiamiento mixto en el Conurbano bonaerense. Este tipo de convenios urbanísticos permite descargar al erario público de un costo significativo, mientras se garantiza que las nuevas urbanizaciones compensen su impacto territorial con mejoras concretas y beneficios que se extienden más allá de sus límites. La nueva bajada de la autopista en Ezpeleta, financiada por Nuevo Quilmes Dos, se proyecta así como un caso de estudio sobre la viabilidad y la eficacia de la colaboración entre desarrolladores inmobiliarios y el Estado municipal.