Branding urbano: venden metros cuadrados gracias al "boca en boca" y a los celebrities

El emprendimiento inmobiliario Tronador, que se erige en el barrio de Nuñez sobre la antigua planta de lo que era la fábrica de Nestlé y que después fue un depósito de New San, ya vendió el 40% de las unidades gracias a las recomendaciones y al apoyo del nadador José Meolans. La inversión total asciende a u$s 12 millones y estará terminada al inicio del 2006
Por iProfesional
ACTUALIDAD - 08 de Septiembre, 2004

El tranquilo barrio de Nuñez, apodado al efecto como "Nuevo Nuñez", está viendo nacer un nuevo emprendimiento inmobiliario que surge bajo la consigna de cristalizar la vida del country en la ciudad. El terreno ocupa 15 mil metros cuadrados y la superficie a construida llegará a 32 mil metros cuadrados. Recuperar la historia con nuevo brandingSe trata de construir 200 residencias sobre la base de la antigua fábrica de Nestlé. Como emblema se decidió dejar la antigua chimenea, que ocupará un lugar privilegiado en el parque interno, que recuerda su pasado fabril. Pero en un pasado más próximo este predio, comprendido entre las calles Tronador, Nuñez, Manuela Pedraza y Plaza, era ocupado por un depósito de la empresa New San, los comercializadores de las marcas Sanyo y Aiwa.

En verdad, el complejo "Tronador" surge de la necesidad de reconvertir el predio que hasta hace un año era usado como depósito. El propio presidente de New San, Rubén Cherñajovsky, junto a Rafael Arougetti y Carlos Pacanowski, es uno de los socios de Atrium, la desarrolladora del emprendimiento. Venta sutil y efectivaSin avisos, sin intermediación de inmobiliarias y sin más que dos unidades modelo para mostrar, ya lograron vender un 40% de las unidades. Es que se trata justamente de recuperar los viejos sistemas de venta donde prima el "boca en boca" entre la gente con afinidades. Marí­a Freytes, gerente comercial del nuevo proyecto y ex ejecutiv de Telefé, admitió que solo hicieron algunos "focus group" entre gente conocida y esto fue generando una avidez importante por tener un departamente en este nuevo edificio con aires de country.

La decisión del nadador José Meolans de tener su propia unidad en "Tronador" les viene como anillo al dedo para que los posibles compradores imaginen que podrán contar con el visto bueno del atleta cada vez que intenten un largo en alguna de las dos piscinas que están proyectadas. Meolans aparece en un video promocional de "Tronador" y es utilizado como argumento de venta porque siempre es bueno saber que un "celebrity" hizo punta y confió en el proyecto.

El 22 de septiembre próximo se hará un cóctel donde se mezclarán propietarios con aspirantes. Seguramente se sumarán figuras "notables", "celebrities" y "famosos" que permitirán visualizar que el emprendimiento tiene el visto bueno de gente que se destaca en lo suyo.

La expectativa es que antes de fin de año logren vender la totalidad de las unidades, que van desde los 55 m2 hasta los 280 m2, y no tienen previsto realizar más que algunos avisos gráficos para promocionarlo. Lo fundamental es apostar a las viejas técnicas de la venta donde prima estimular el contacto entre gente conocida. Para instalarse en estas nuevas unidades habrá que esperar a principios del 2006.Hacer puntaLa localización no es un tema menor. Habí­a que jugarse a hacer punta en una zona de la ciudad que todaví­a no fue tocada por la varita mágica del nuevo estilo urbano. El argumento básico es que para cualquiera que se mueve en auto resulta una localización dentro de la ciudad muy bien posicionada para tener acceso a la General Paz, a Lugones y a la Panamericana, incluso la estación de tren es un recurso a favor para los que van a Retiro.

Pero aún hay que generar cierto glamour para seguir convocando adeptos a "Tronador". Entre los interesados aparecen los que ya habí­an optado por los silos de Dorrego, o bien los que se quedan cortos cuando quieren comprar en Puerto Madero (donde los valores llegan al doble). Así­ como Palermo se dividió en innumerables sectores cada uno con su identidad y atractivo cada vez más marcado, este emprendimiento pretende hacer punta en una zona de la ciudad que aún tiene cierta virginidad en el "branding urbano".

La clave pasa por poner un nombre atractivo, sugerente y simbólico y les tocó en suerte la calle Tronador como para que la referencia al cerro no fuera caprichosa. La presencia de los departamentos modelos, decorados y ambientados como si uno transitara por una revista de decoración, son un recurso infaltable como para que los posibles compradores se imaginen vivienda esa vida idí­lica. Serí­a el equivalente de la prueba de producto o la degustación. Uno se puede imaginar en los distintos espacios que están listos para ser habitados. No falta el jabón en los baños ni las velas aromatizadas en el living...

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