Video: el auto de Tesla lanzado al espacio podría estrellarse con la Tierra
Fue el pasado 6 de febrero cuando Elon Musk no sólo logró con éxito la primera prueba de vuelo del cohete más grande que ha construido su firma espacial SpaceX, el Falcon Heavy, sino también aprovechó la oportunidad para enviar al espacio su vehículo eléctrico.
Se trata se un descapotable de uso personal que tiene un valor de u$s200.000 y que recién estará a la venta en 2020.
En general, advierten que fue un magnífico truco de comunicación, ya que el Tesla Roadster no posee ningún instrumento científico a bordo. Por lo tanto, es similar a cualquier asteroide que viaja por el espacio.
Por ese motivo, está clasificado como un objeto cercano a la Tierra (NEO), lo que significa que está catalogado y siendo rastreado por el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA junto con otros objetos que podrían colisionar contra nuestro suelo.
Sin embargo, algunos analistas salieron al cruce de esta acción con buen efecto publicitario y sostienen que la órbita podría traerlo de regreso a la Tierra en los próximos mil años.
Según Hanno Rein, de la Universidad de Toronto, quien junto a sus colegas estudió la trayectoria del vehículo en el futuro, con lo que determinó que existe un 6% de probabilidades de que el Tesla colisione con la Tierra, mientras que esta opción se reduce a un 2,5% para el caso de un impacto con Venus.
Entre los cálculos, Rein destaca que para el año 2091, el automóvil de Elon Musk se acercará al planeta Tierra a una distancia similar de la Luna, sin embargo, para la colisión se deberán esperar muchos años más.
Claro está que, para esa fecha, puede que poco o nada quede del Roadster ya que en su viaje por el espacio puede encontrarse con otros pedazos de basura espacial, además de tener que ganar una batalla contra la radiación que probablemente destruya gran parte de su estructura, por cierto todas las partes orgánicas.

El deportivo eléctrico que fue al espacio cuenta con un cartel que dice "Don't panic" en el parabrisas, el maniquí de Starman al volante, el hit Space Oddity de Bowie sonando en continuado y la trilogía Fundación, de Isaac Asimov, en un pendrive.
El plan inicial era colocar el vehículo en una órbita elíptica alrededor del Sol. Pero algo se modificó en su curso y Musk anunció que el auto había sobrepasado un poco su trayectoria original y que ahora se encaminaba al cinturón de asteroides ubicado entre Marte y Júpiter.
cional. Dependiendo de los detalles de estos encuentros, el Tesla puede ser impulsado a una órbita más amplia o más pequeña. Con el tiempo, la órbita se someterá a lo que se llama una caminata aleatoria, similar a las fluctuaciones que vemos en el mercado bursátil, que le permitirá vagar por el sistema solar interior", explica el investigador Dan Tamayo, coautor del estudio.
Una vez transcurrido el plazo originario de un millón de años, cada vez que el coche pase cerca, sus probabilidades de colisionar con algún planeta del vecindario solar aumentan, según Rein. De manera que existe una posibilidad del 11% de que choque contra la Tierra en tres millones de años.