El fabricante de automóviles sueco Volvo Cars y el grupo chino Geely Automobile anunciaron este lunes que mantienen conversaciones para encarar una posible fusión que les permita crear una nueva compañía que cotice en bolsa.

"Volvo Cars y Geely Automobile están considerando combinar sus negocios para crear un grupo global fuerte, lo que aceleraría las sinergias financieras y tecnológicas entre las dos compañías", informó la firma sueca en un comunicado conjunto.

En principio, el acceso a los mercados de capitales globales se realizaría a través de la Bolsa de Hong Kong pero también esperan poder cotizar en Estocolmo. Ambas compañías crearán un grupo de trabajo para preparar una propuesta para sus respectivos directivos.

Según el comunicado, la idea es que la nueva empresa pueda mantener la identidad de cada una de sus marcas: Volvo, Geely, Polestar (vehículos eléctricos de alto rendimiento) y la filial conjunta Lynk&Co.

Volvo Cars tuvo en 2019 un beneficio neto de €909 millones, un 1,8 % menos que el año anterior, debido a la competencia en los precios en varios mercados y por el descenso en la venta de licencias, que repercutieron en los ingresos.

El año pasado vendió 705.452 unidades, un 10 % más, superando por primera vez la barrera de los 700.000 coches vendidos en un año.

Zhejiang Geely Holding Group, matriz de Geely Automobile, compró Volvo a Ford Motor en 2010 por €1.640 millones.