En un movimiento que podría marcar un hito en la industria automotriz argentina, la renombrada firma de vehículos eléctricos, Tesla, se encuentra al borde de una oportunidad sin precedentes en el país. En un mercado donde escasean las marcas dispuestas a apostar por modelos impulsados al 100% por energía eléctrica, y donde apenas algunos fabricantes locales se dedican exclusivamente a los motores eléctricos, la llegada de Tesla podría abrir un nuevo capítulo en la historia automovilística nacional.

Según fuentes cercanas al asunto, el anticipado desembarco de Tesla en Argentina se estima para el año 2024. Sin embargo, este ingreso no sería llevado a cabo directamente por la compañía, sino a través de un importador, siguiendo la estrategia implementada en otros países de la región.

Cabe destacar que hasta el momento, la presencia oficial de Tesla en América Latina se limita únicamente a México.

No obstante, diversas naciones de la región están siendo exploradas por importadores privados que buscan acercar la visión de movilidad sostenible de Tesla a nuevos territorios. En este contexto, la destacada figura de Argentesla emerge como pionera en la misión de introducir este innovador modelo comercial en Argentina.

La apuesta de Argentesla

La apuesta inicial de Argentesla recae en la importación por encargo, permitiendo a los clientes solicitar vehículos según sus preferencias. La compañía ya ha avanzado en los trámites de homologación de tres modelos de Tesla: el Model 3, el Model X y el Model Y, junto con sus respectivos sistemas de carga. Aunque no se descarta la inclusión del prestigioso Model S en etapas posteriores, la empresa ha decidido emprender este proceso utilizando sus propios recursos en dólares, una estrategia que evita depender de divisas del Banco Central, conocida coloquialmente como el "Dólar Frank Sinatra".

En lo que respecta a la comercialización, Argentesla optará por un enfoque bajo pedido, acompañado de un showroom donde los modelos estarán disponibles para su visualización. Si bien los precios aún están pendientes de definición para el año 2024, se espera que superen los 60.000 dólares, posicionando a estos vehículos en la categoría premium del mercado.

Tesla a punto de desembarcar en Argentina: Un paso histórico hacia la electrificación del mercado automotriz

La compañía no solo tiene en cuenta la importación y venta de los vehículos, sino que también está dando pasos firmes para abordar el aspecto del servicio postventa. Para ello, está capacitando a mecánicos locales en Estados Unidos, con la ambición de brindar un soporte completo y de alta calidad en Argentina.

Tesla con nueva planta en México

En el contexto más amplio de la región, si bien no se han anunciado planes concretos para un ingreso oficial de Tesla en América Latina, una noticia alentadora llegó con el anuncio de Elon Musk sobre la construcción de una planta en México. Diversos factores respaldan esta decisión estratégica:

1. Ventajas de los tratados de libre comercio de México: La presencia de tratados de libre comercio sólidos en México ofrece a Tesla una posición favorable. Esto cobra relevancia ya que la compañía tiene planes de exportar vehículos tanto a Europa como a Latinoamérica. Martha Delgado, subsecretaria de Relaciones Exteriores, destacó la importancia de contar con un país que posea esta red de acuerdos comerciales.
2. Proximidad a la planta de Austin: Con una capacidad de producción de aproximadamente dos millones de automóviles anuales en fábricas distribuidas en California, China, Texas y Alemania, la cercanía de la nueva planta en México a la instalación de Austin brinda dinamismo a la cadena de valor de Tesla.
3. Oferta de profesionales capacitados: México se distingue por su oferta de ingenieros altamente capacitados, muchos de los cuales ya forman parte de la plantilla de Tesla alrededor del mundo. Esto facilita la construcción de vehículos eléctricos y la formación inmediata de mano de obra especializada.

Con la mira en el futuro, Tesla ha establecido la ambiciosa meta de fabricar 20 millones de vehículos anualmente, superando con creces los 1,3 millones entregados en 2022. Martha Delgado, subsecretaria de Relaciones Exteriores, sugiere que la nueva planta en México podría ser solo el primer paso de una inversión más amplia de Elon Musk en el país, vislumbrando posibles acuerdos relacionados con el desarrollo de parques industriales para la fabricación de baterías eléctricas.

En este sentido, Tesla no solo se posiciona como una marca automotriz, sino como un catalizador de transformación en la industria y la movilidad a nivel mundial. A medida que la conciencia sobre la necesidad de la electrificación y la sostenibilidad continúa creciendo, la incursión de Tesla en Argentina y los movimientos estratégicos en la región se erigen como un testimonio vivo de un futuro automotriz más limpio y eficiente.