Víctimas del cepo a los autos: estas son las marcas que acusan los peores derrumbes por el freno a los 0km importados
Durante buena parte del año, los 0Km lograron posicionarse como una atractiva alternativa de inversión para miles de particulares que, al no encontrar otras formas de canalizar el dinero para pelearle a la inflación, optaron por esta reserva de valor "relativa".
Sin embargo, y tal como consignara iProfesional.com, el fuerte derrumbe que sufrieron los patentamientos el mes pasado marcó un punto de inflexión en un sector que, hasta ahora, se había mantenido relativamente "inmune" frente a la coyuntura económica.
No es para menos: según datos que difundió la Asociación de Concesionarios de la República Argentina (ACARA), en septiembre el nivel de ventas se desplomó casi 24% respecto al mismo mes del año pasado.
El dato clave es que se trató de la baja más pronunciada de los últimos 40 meses, dado que hay que retrotraerse hasta mayo de 2009 para encontrar una caída superior.
En este contexto, el economista Tomás Bulat aseguró que, en gran medida, esta contracción obedece a que el mercado está ingresando a una fase de "saturación", de modo que "el nivel de ventas, de ahora en más, irá decreciendo paulatinamente".
Sin embargo, el experto agregó que el hecho de que la comercialización durante los primeros nueves meses del año esté por debajo del mismo período de 2011, "también responde a que hubo una clara contracción de la oferta, por el cierre a las importaciones".
Sucede que, si bien cada una de las terminales e importadoras hicieron sus deberes y en 2011 presentaron sus planes de compensación de importaciones, lo cierto es que no todas corrieron con igual suerte.
De hecho, semanas atrás, se conoció que hay unos 17.000 vehículos varados en la terminal de Zárate -puerto de entrada utilizado por la mayoría de las automotrices-, los cuales no pueden ser nacionalizados hasta tanto el Gobierno no les dé luz verde.
Guillermo Dietrich, titular del concesionario que lleva su nombre, confirmó a este medio que "el stock de vehículos varados en esa terminal es constante", al tiempo que aseguró que "en el mercado todavía hay demoras en las entregas, principalmente en el caso de modelos importados específicos. Algunos compradores tienen que armarse de paciencia".
Frente a este escenario, los autos nacionales comenzaron recuperar parte del terreno perdido entre las preferencias de los consumidores argentinos.
En efecto, tras un largo período en retroceso, los 0Km con sello albiceleste pasaron a representar el 41% de los patentamientos totales -frente al 59% en manos de importados-, lo que implica unos 4 puntos por encima del nivel vigente en 2011.
Así, el hecho de que el Gobierno esté con la lupa en la mano, monitoreando marca por marca y modelo por modelo, generó que haya muchos "perdedores", pocos "ganadores" y algunos jugadores que salieron "hechos".
En efecto, según un relevamiento realizado por Marketing Research & Technology -en exclusiva para iProfesional.com-, a lo largo de los primeros seis meses del año, de las 25 principales marcas instaladas en la Argentina, 15 se vieron obligadas a importar menos que el año pasado, con caídas que resultan, en algunos casos, dramáticas, tal como se puede observar en la siguiente infografía:
El podio de las compañías más castigadas por el "cerrojo" lo lidera Smart, la marca de vehículos para dos pasajeros que es comercializada en la Argentina por Mercedes-Benz, con un desplome del 84%.
Según datos de Marketing Research & Technology, entre enero y junio la compañía pudo ingresar únicamente 65 vehículos, una cifra muy magra frente a las 413 unidades alcanzadas en el mismo período de 2011.
Esta caída tuvo su correlato en sus "necesidades" de dólares, dado que de "aspirar" casi u$s4 millones el año pasado, en el actual período las importaciones de Smart apenas demandaron u$s770.000, es decir, una contracción del 80%.
En la misma línea, su performance en el mercado interno tampoco fue alentadora: hasta septiembre se habían patentado poco más de 200 unidades, con una caída superior al 36%.
El segundo puesto, en cuanto a derrumbes, correspondió a Nissan que, de importar más de 7.000 unidades por casi u$s100 millones en el primer semestre de 2011, concluyó la primera parte de este año con apenas 1.855 vehículos por un monto cercano a los u$s24 millones, es decir, desplomes del 74% y 76%, respectivamente.
Cabe recordar que la licencia de esta compañía, de origen japonés, dejó de estar bajo el ala de Renault, para quedar bajo el manejo del empresario Manuel Antelo, titular de Car One. El problema es que, a poco tiempo de anunciar el plan de negocios, el Gobierno dio de baja el acuerdo de ventajas arancelarias con México, su principal mercado proveedor.
Así, los autos que antes ingresaban con tasas del 0%, desde hace un par de meses están pagando un 35% extra de arancel, lo que implicó un duro golpe a la hora de poner estos vehículos en las concesionarias.
En diálogo con iProfesional.com, Maximiliano Scarlan, economista de Abeceb, aseguró que "sin dudas, el fin del pacto con México perjudicó más seriamente a Nissan, que basa gran parte de su portfolio en vehículos de ese origen".
En este contexto, la compañía tuvo que rediseñar su estrategia comercial para seguir operando: redujo el ingreso de su clásico Sentra (-83%), de su "caballito de batalla" Tiida (-80%) y de su prestigiosa Frontier (-75%) para tener algo de cupo e ingresar el nuevo March, el "chico" de la marca, que fue lanzado en mayo de este año y es una de las grandes apuestas de Nissan.
El podio se completó con Subaru, que está bajo el ala de la compañía Indumotora, que posee su casa matriz en Chile.
Pese a que la firma había acordado con el Gobierno realizar un aporte de capital de u$s1,1 millón y a exportar maíz a Chile y autopartes "made in Córdoba"para su equipo oficial de rally a Japón, sus importaciones se desplomaron un 72%.
Según Marketing Research & Technology, durante el primer semestre ni siquiera pudieron llegar a ingresar al país 100 vehículos, frente a los más de 340 del mismo período del 2011.
A excepción de la 4x4 Forester, que exhibió una tasa de variación positiva -si bien con volúmenes muy bajos-, el resto de los modelos cayó estrepitosamente. El más perjudicado fue el popular Impreza, vehículo del cual se habían importado más de 160 unidades el año pasado, mientras que en la actualidad ninguno logró cruzar la frontera.
Este derrumbe implicó que perdiera varias posiciones en el mercado local, dado que, hasta agosto, sólo habían logrado patentar 194 vehículos, lo que implicó una caída interanual de casi 60 por ciento.
Otra de las marcas que no logró escapar al cerrojo fue Mitsubishi. Los licenciatarios en la Argentina se habían comprometido a compensar los dólares con ventas al mundo de alimento balanceado para animales, maní y hasta agua mineral envasada.
Sin embargo, el ritmo de importaciones no detuvo su caída: en el primer semestre se derrumbó un 56%, tras haber podido traer apenas 254 unidades.
Así, salvo por el fuerte crecimiento de la relanzada Outlander -que tuvo un repunte del 150%-, el resto de los modelos sufrieron fuertes descensos, con la L200 y el clásico Lancer a la cabeza, que padecieron bajas del 70% y 78%, respectivamente.
Esto implicó que en el mercado interno perdiera mucho terreno: hasta septiembre, la marca había logrado patentar menos de 490 vehículos, casi la mitad que en el mismo período de 2011.
Otro caso para mencionar es el de Alfa Romeo, que concluyó el período enero-junio con una contracción del 7%.
A la marca todavía le cuesta hacer pie en el mercado argentino dado que de sus tres principales modelos comercializados sólo se destacó la Giulietta, en tanto que el Mito y el 159 experimentaron fuertes derrumbes del 28% y 97%, respectivamente.
En el plano doméstico, esto quedó plasmado en su flojo desempeño, con un desplome en el nivel de patentamientos del orden de casi el 40 por ciento.
Las que más terreno ganaronEl podio de las diez compañías que lograron crecer respecto al año anterior lo lideró Mini Cooper, que se encuentra bajo el paraguas de BMW Group y que logró un fuerte avance del 275%, con cerca de 400 vehículos importados, por un valor de casi u$s7 millones, tal como se puede ver en la siguiente infografía:
Esta buena performance se reflejó en el nivel de patentamientos en el mercado interno, con un alza del 77%.
Luego, le siguió BMW, que logró nacionalizar un 173% más de vehículos en relación al primer semestre del año pasado. Los modelos que más terreno ganaron fueron el 118 -al pasar de 28 unidades a cerca de 230- y la SUV X118, con 125 autos ingresados al país, frente a los 18 del 2011.
Cabe destacar que esta elevada tasa de variación se debe, principalmente, a que las empresas del grupo BMW fueron de las últimas en alcanzar un acuerdo con el Gobierno, de modo que los niveles de importaciones de este año se están comparando con la pobre performance lograda en el período pasado.
El podio se completó con la marca de origen británico Land Rover, cuyas importaciones se dispararon un 142%, luego de un 2011 para el olvido.
La licencia la tiene la compañía Ditecar, que también comercializa en la Argentina Volvo y Jaguar.
De los cuatro modelos de Land Rover sólo uno se destacó: la nueva Range Rover, una SUV que fue lanzada en diciembre y de la cual la compañía espera comercializar unas 200 unidades en 2012.
Cabe destacar que Ditecar es una firma de capitales chilenos y que, para lograr cupo para poder importar, acordó con el Gobierno realizar exportaciones de productos agrícolas al país trasandino.
El pacto con el Ministerio de Industria rindió sus frutos dado que Volvo, otra de las marcas que representa, se coló en el puesto número 5 entre las que más incrementaron su ritmo de importaciones, con una tasa positiva del 62%.
Por su parte, Chery fue la cuarta marca con mejor performance. La licencia para comercializar estos vehículos con diseño chino está bajo poder del grupo Socma, empresa que está cumpliendo con el acuerdo para compensar importaciones con ventas al mundo de frutas y autopartes, y que se firmara allá por marzo de 2011.
La compañía logró ingresar 2.259 vehículos en el primer semestre, casi 100% más que en el mismo período del año previo, por un valor cercano a los u$s16 millones.
Este mayor stock repercutió positivamente en el ritmo de ventas en el mercado interno, dado que logró comercializar casi 40% más de unidades que en el mismo lapso de 2011 y así pasar del puesto 16 al número 12 entre las más exitosas de la Argentina, en un lapso de 12 meses.
Sin embargo, de cara a los próximos meses, los empresarios del sector prevén un mercado cada vez más duro.
En diálogo con iProfesional.com, el titular de una reconocida agencia oficial Ford, aseguró que "yo hablo todos los días con los agencieros, con las terminales y con los consumidores. Y lo cierto es que el temor en el mercado laboral es lo que más nos está afectando. Hay muchos que tienen miedo de perder el trabajo y por eso sería ilógico esperar que se sigan batiendo récords".