Tras la polémica con el gobierno boliviano, Brasil designó un nuevo canciller
El canciller brasileño Antonio Patriota renunció a su cargo el lunes, tras la polémica que se desató con el gobierno de Bolivia luego de que el senador opositor Roger Pinto Molina fuera sacado clandestinamente de La Paz y llevado a Brasil.
Según la Presidencia brasileña, Patriota será reemplazado por el actual representante de ese país en la Organización de Naciones Unidas (ONU), Luiz Alberto Figueiredo (foto), cuyo cargo será ocupado por el ministro saliente.
El portavoz de la presidenta Dilma Rousseff, Thomas Trautmann, afirmó que la mandataria "aceptó el pedido de renuncia" presentado por Patriota durante una reunión realizada en la sede del gobierno, que se prolongó por unos 50 minutos.
De acuerdo a la agencia DPA, la salida de Patriota, quien comandaba el Ministerio de Relaciones Exteriores desde la investidura de Rousseff, en enero de 2011, se debió a la operación de traslado de Pinto a Brasil, concretado este domingo. La fuga del senador de la opositora Convergencia Nacional fue organizada por el diplomático Eduardo Saboia, el encargado de negocios de la embajada brasileña en La Paz, donde el senador estaba refugiado desde hace 455 días.
Asesores de Rousseff afirmaron que, ante el caso, que generó tensión en las relaciones entre Brasilia y La Paz, la situación de Patriota en el Gobierno se había vuelto "insostenible". Saboia asumió la responsabilidad exclusiva de la decisión de organizar el traslado de Pinto a Brasil, y justificó su actitud afirmando que el legislador boliviano es "un perseguido político, así como lo fue la presidenta Dilma".
Según "O Globo", sin embargo, asesores de Rousseff aseguraron que las explicaciones no convencieron a la mandataria, quien indagó qué cuidados médicos han sido brindados a Pinto tras su llegada a Brasil: "La respuesta fue que él no había sido llevado a ningún hospital ni al médico".
Además, el informe destaca que Rousseff recién se enteró del operativo después de la llegada del senador boliviano a Brasilia, y que consideró la operación como "un desastre".
Para la mandataria, el episodio representó "un quiebre de jerarquía y, principalmente, un quiebre del principio internacional de asilo".
La salida clandestina de Pinto generó enojo en el gobierno boliviano, que envió una nota diplomática a la representación brasileña en La Paz para exigir explicaciones sobre el incidente, que calificó de "grave".
"No puede ser que al amparo de la inmunidad diplomática se trasgredan normas nacionales y normas internacionales, facilitando en este caso la huida, la salida irregular del país del senador Roger Pinto Molina", dijo al respecto el canciller boliviano David Choquehuanca.
"Es grave lo que ha pasado", dijo Choquehuanca, quien advirtió que "amparados en la inmunidad diplomática podemos llevar droga, traficar armamentos, tráfico de personas".
Quién es el nuevo cancillerLuiz Alberto Figueiredo (en foto), nuevo canciller de Brasil, es considerado un hábil negociador internacional, experto en temas de desarrollo y medio ambiente y con una larga carrera diplomática.
Figueiredo, de 58 años, fue negociador jefe de la conferencia de la ONU para el desarrollo sustentable Río 20, que se celebró en Río de Janeiro el año pasado.
Es además un férreo defensor de la reforma del Consejo de Seguridad de ese organismo, y busca que Brasil consiga un escaño permanente en él.
Nacido en Río de Janeiro el 17 de julio de 1955, abogado y diplomático de carrera, ha trabajado en Chile, Canadá, los Estados Unidos y Francia, entre otros países.
Figueiredo, que debe llegar a Brasil este martes, se estrenará en su nuevo cargo el próximo viernes, durante la cumbre de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) en Paramaribo, Surinam. La semana próxima viajará al G-20 en Rusia.