Para la Argentina, poder ser anfitrión del G20 tal como está sucediendo por estos días es, sin dudas, un hecho histórico y trascendental en términos diplomáticos.

Que a lo largo de dos jornadas coincidan los líderes de un grupo de países que equivalen al 85% del PBI mundial o que explican 7,5 de cada 10 dólares que se comercian en el mundo, son algunas de las razones por las cuales la Argentina es hoy la gran vidriera internacional.

Así, para Macri, tener en un mismo plano a todos los mandatarios e, incluso, poder mantener reuniones bilaterales con muchos de ellos, se presenta como una oportunidad única para el Gobierno.

Y lo de oportunidad única no es una cuestión especulativa: la realidad es que para la Argentina es trascendental poder reunir a todas estas naciones que la superan ampliamente en poderío económico.

Cuestión de peso

El G-20, grupo de los 20, está formado por 19 países y la Unión Europea, entre los que se encuentran los países que forman el G8.

En conjunto, sus miembros en conjunto explican un PBI que equivale a u$s69,2 billones. ¿Y qué peso concreto tiene la Argentina en este grupo? Algunas comparaciones sirven para graficarlo y ponerlo en contexto:

-Argentina explica apenas el 0,8% del PBI de todo este grupo de países.

-Además, se ubica en el anteúltimo escalón, superando únicamente a Sudáfrica.

-Países como Indonesia tienen una economía un 60% superior a la de Argentina.

-Australia, en tanto, equivale a dos veces el PBI nacional.

-¿Y respecto de Estados Unidos? Para equiparar a la nación que comanda Donald Trump se necesitaría replicar 30 veces el poderío económico de la Argentina.

-Y Rusia, ¿es tan poderoso en el contexto global? Si se mide solo en términos de PBI, tiene un peso relativo: supera en 21% al de Australia, es muy similar al de Corea del Sur, pero es superado unas 12 veces por la economía de los Estados Unidos.

 

¿Cuándo se estableció el G20?

El G20 se creó en 1999, con el fin de tratar temas relevantes de la economía mundial. es un foro de ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales de veinte economías importantes, que no cuenta con sede ni personal permanente.

La primera versión del G20, creada en 1999, se limitaba a reunir a presidentes de Bancos Centrales y ministros de Economía y Finanzas.

"En aquel contexto, la Argentina era un emergente en términos financieros más que por su potencia económica propiamente dicha", explicó a BBC Mundo el analista Juan Gabriel Tokatlián.

Pero además, el sistema cambiario instalado por el gobierno de Carlos Menem, que anclaba el peso argentino al dólar, daba la impresión de que la economía argentina era sólida. Así, la convertibilidad puso al PIB argentino entre los 20 más grandes del mundo, pero cuando ese esquema se derrumbó, la economía volvió a caer.

El G20 como hoy se conoce nace en el marco de las crisis de 2008 y "sacar a un miembro del Sur por su volatilidad hubiera sido incomprensible", concluyó Tokatlián.