Para el gerente general del Banco Galicia, Fabián Kon, para definir el año 2018, hay que dividirlo: "empezó muy bien, terminó normalizándose, pero en el medio hubo una caída importante en el crecimiento de activos financieros", aseguró.

Respecto a los resultados del año pasado, asegura que "fueron muy buenos. Pero, si uno mira la rentabilidad ajustada por inflación, tiende a cero. Esto significa que, en términos nominales, ganaste. Pero, en términos ajustados por inflación, digamos que le empataste a una inflación muy alta".

"Lo bueno es que en la crisis el sistema financiero mantuvo un nivel de liquidez y capitalización muy alto, que son los indicadores principales de solvencia y riesgo", agregó en una entrevista en Forbes Argentina.

Para el ejecutivo, la caída de los créditos afectó en forma generalizada. "En el segmento corporativo, las empresas grandes utilizan financiamiento para realizar inversiones, y la inversión tiene que tener un retorno demasiado alto para pagar una tasa del 70%. La caída de demanda de préstamos anticipó la baja en el nivel de actividad. En hipotecarios, empezamos el año con una demanda altísima y, hacia fin de año, la demanda fue muy, muy baja", sintetizó.

Sobre el posible crecimiento, indica que "si la inflación baja a niveles de menos del 2% mensual, van a volver a crecer. Hay un tema pendiente que es la securitización de hipotecas, un paso que todavía no se creó en Argentina y que es una condición para que el segmento crezca".

Según Kon, el potencial de crecimiento del país "es gigantesco. Argentina tiene el sistema financiero que es el 14% del PBI. En Chile, es más del 90%; en Brasil, el 50%; en Perú y Colombia, están cerca del 60%. El potencial es muy grande porque las empresas argentinas pueden tener un nivel de financiamiento más alto y las personas deberían financiar su vida, vivienda y el ahorro previsional para complemento jubilatorio. Hay muchas cosas que pasarían en una economía estable. Con un Estado sustentable, la moneda argentina fuerte, la gente empezará a tomar deuda y a invertir en el largo plazo", recalca.

En cuanto a las modificaciones que puedan haber en 2019 por ser un año electoral, afirma en Forbes Argentina que no habrá "cambios bruscos en las variables económicas, y yo creo que la actividad va a empezar a crecer en el segundo trimestre, aunque el total del año sea negativo por el arrastre. Los operadores económicos van a estar viendo cuál es el programa económico de la siguiente administración. Hace un año, el mercado descontaba que ganaba Cambiemos. En cambio, hoy, no lo da por descontado, si bien tiene probabilidades".