REPORTE DE CACE Y KANTAR

El comercio electrónico creció 76% en 2019 y es el único rubro de la economía que le gana a la inflación

Aunque turismo continúa siendo la categoría que aporta la mayor facturación, alimentos, cosmética y accesorios para autos y motos son los que más crecen
ECONOMÍA - 05 de Marzo, 2020

A contramano de las variables que presenta el consumo masivo, el comercio electrónico continúa con buena salud en la Argentina. Las ventas crecieron un 76% en 2019 frente a 2018 y le ganaron a la inflación oficial de 53,8% que se anotó en este período, y superaron los $403 millones.

Así lo confirmó el estudio anual que realiza la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE) de la mano de Kantar Insights. Las categorías que más crecieron fueron cosmética y perfumería (118%), accesorios para vehículos (112%), y alimentos y bebidas (111%).

Estas cifras contrastan con las que muestra el consumo masivo que en 2019 cayó 7,3% y sumó el cuarto año consecutivo de retroceso. De ahí que cada vez más empresas y negocios optan por la vertiente del e-commerce como alternativa para despabilar ventas que no se concretan por los canales tradicionales.

De ahí que en 2019 se hayan sumado más categorías con buenos comportamientos de ventas, como las de alimentos y bebidas y la de niños y videojuegos. A tal punto fue el buen desempeño que la primera pasó del puesto 10 al sexto entre 2018 y 2019, y la segunda se coló ya en el top ten de los rubros más vendidos.

A esto se sumó que, en 2019 se subieron más de 828.000 nuevos compradores lo que llevó esa cifra hasta los 17,8 millones de compradores on line, sobre un total de casi 21,1 millones de argentinos de 18 a 65 años con acceso a internet.

¿A qué se deben las buenas cifras del e-commerce en la Argentina? En primer lugar, se trata de una actividad que tiene mucho para crecer aún. Los consumidores confían cada vez más en el sistema y como la crisis los hace buscar las mejores alternativas de precios y financiación ya no dudan cuando tienen que cerrar una compra por la vía on line.

En cifras, los números de 2019 del comercio electrónico argentino quedaron así:

1. Pasajes y turismo: $ 87.069 millones ( 44% vs 2018)

2. TV, equipos de audio, consolas, TI y telefonía: $ 46.200 millones ( 70% vs 2018)

3. Alimentos, bebidas y artículos de limpieza: $ 41.591 millones ( 111% vs 2018)

4. Artículos para el hogar (muebles y decoración):$ 38.921 millones ( 91% vs 2018)

5. Electrodomésticos (línea blanca y marrón): $ 26.506 millones ( 96% vs 2018)

 

Pasajes y turismo tiene menores niveles de crecimiento en comparación con el resto de las categorías pero esto se debe a la madurez que ya está alcanzando ese segmento. Se estima que continuará siendo el principal rubro de facturación, tal como sucede en los países donde el comercio electrónico está más desarrollado.

De hecho, la composición de los rubros más vendidos que presenta la venta on line argentina es similar a la que sucede en los países más desarrollados.

Mayor sofisticación

Los compradores son cada vez más sofisticados, por la sencilla razón de que defienden su bolsillo a ultranza. Y no importa a qué segmento socioeconómico pertenezcan pues la búsqueda del precio es tan común entre los pertenecientes a los targets más altos como a los más bajos.

La experiencia de compra de estos consumidores es cada vez más omnicanal. ¿Qué quiere decir? Que buscan precio e información de producto por la vía on line, y cada vez más por el teléfono móvil. Cuatro de cada 10 personas buscó datos sobre el artículo o servicio de interés sólo por su teléfono móvil.

La frecuencia compra es ya idéntica a la que realiza por la vía off line. Un 66% de los usuarios de internet efectúan al menos una compra por mes por internet, en un promedio similar al que se realiza en una tienda física.

El ticket promedio de la compra on line se ubicó en los $4.500, un 55% más alto que el registrado en 2018. Si bien la comparación no es totalmente lineal, logró imponerse algo más de un punto por encima de la inflación.

"El canal on line tiene cada vez más peso en el off line en general. En tiempos de crisis el consumidor se vuelve más racional, y la electrónica le aporta mucho en ese momento", dijo en conferencia de prensa, Gustavo Sambucetti, director de la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE).

Y si el móvil se utiliza cada vez más como dispositivo para consultar precios y características de un artículo, también se está transformando en una verdadera herramienta de compra, puesto que los usuarios tienen cada vez menos dudas de hacerlo desde ese aparato.

En este último reporte también quedó evidenciado que el consumidor es cada vez más sofisticado. No sólo porque incorpora a la tecnología como parte habitual de una decisión de compra sino porque buscan cada vez más especificidad en distintos conceptos antes de cerrar la operación.

Así, un 66% averigua qué precios y promociones están vigentes, un 60% solicita información puntual, y un 42% indaga sobre la disponibilidad del producto. Luego, un 35% pide información sobre el producto en cuestión y un 37% se interesa por la tienda que vende de manera específica. No sólo busca en dónde está sino también si hay un teléfono de contacto.

Estos comportamientos se advierten más en categorías como pasajes y turismo, artículos para el cuidado personal, herramientas, alimentos y accesorios para mascotas, o para motos y autos. Se trata de las categorías más importantes del comercio electrónico argentino y también de las que vienen experimentando los mayores niveles de crecimiento.

"La confianza en el sistema es lo que explica el crecimiento. Y si bien fue significativo el avance de las categorías que experimentaron alzas por encima del 100%, solo representan el 20% del total de la facturación del comercio electrónico. Lo que en verdad sucede es que crecen todas las categorías en distintos niveles", apuntó, por su parte, Alberto Calvo, presidente de la CACE.

El ojo en la financiación

La tarjeta de crédito continúa siendo el medio de pago preferido por los usuarios. Como contrapartida la tarjeta de débito no crece en participación, y se mantiene estancada en un 6% del total de las compras.

Esto se debe a que el consumidor continúa priorizando aquellas alternativas de cuotas fijas, preferentemente sin interés. De hecho, las seis cuotas son la modalidad de financiación preferida por el 51% de los usuarios. "La gente busca siempre el descuento. Y la decisión de compra es resultado de todo lo que el usuario ve en los distintos canales", apuntó Sambucetti.

En ese sentido, otro fenómeno visible del consumo on line es que el 51% de los vendedores coloca sus productos a través de market places. Si bien el principal market place de venta continúa siendo Mercado Libre, el avance significativo de otras plataformas, como las de Garbarino, Frávega, Falabella y las de los bancos, alienta a los vendedores a usarlas a todas ellas de manera conjunta, como si se tratasen de distintas vidrieras virtuales.

El caso de la venta de paltas de Garbarino a finales del año pasado fue un ejemplo de cómo suman a terceros a sus estrategias comerciales.

Y esto sucede aún cuando los mismos market places, como Frávega, Garbarino o Falabella, poseen sus tiendas oficiales también en Mercado Libre. Para los vendedores, tener participación en estas plataformas por fuera de Mercado Libre les representa un 10% de sus ventas.

Cuando se mira el total de ventas que se concretan por la vía de todos los marketplaces disponibles, esa cifra trepa al 31 por ciento, hecho que evidencia la potencia del canal on line para cualquier estrategia de venta.

Otro fenómeno que se patentizó en 2019 fue el de las apps de delivery. Cada vez más asociadas al comercio en general, hoy canalizan el 8% de la facturación del sector

"Las compras online de productos de consumo cotidiano se vuelven cada vez más habituales. La frecuencia de compra continúa en crecimiento, alcanzando la cifra de 2 de cada 3 consumidores que compran, al menos, una vez al mes, muy por encima de 2018. Observamos también que las apps de delivery comienzan a tener mayor protagonismo, como ha sucedido con el uso de marketplaces, respondiendo a un consumidor cada vez más exigente en tiempos de entrega.", sostuvo Sambucetti.

Todo indica que el comercio electrónico continuará con esta buena salud en 2020, más allá de la coyuntura macroeconómica argentina. Las expectativas de la CACE es que la oferta continuará desarrollándose y si bien no se espera que aparezca alguna categoría que descolle sí que este consumidor sofisticado que quiere comprar mejor motivará a las compañías a desarrollar mejores estrategias comerciales pensando en simultáneo en sus ventanillas físicas y en la variedad de posibilidades que les ofrecen las virtuales por la vía de los market places y hasta de las apps de delivery.

De hecho, la próxima gran promoción on line, el HotSale, que se realizará entre el 11 y el 13 de mayo, y abrió hace una semana la inscripción de empresas, ya superó a la cantidad anotadas en el mismo período en la versión 2019. Lo que anticipa una mayor competencia por las ofertas. Justo justo lo que espera el consumidor.

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