La gira internacional de María Eugenia Vidal junto a Hernán Lacunza, el referente económico que comparte con Horacio Rodríguez Larreta, dejó unas cuantas perlitas en las reuniones que mantuvieron con varios inversores y fondos de Nueva York.

Dejaron un crudo diagnóstico de la economía para los próximos años, quizás pensando en la hipotética "herencia" que recibirán de Alberto Fernández en 2023, y escucharon críticas por parte de la comunidad financiera internacional que otrora apostaron por Cambiemos y se vieron defraudados. Hubo espacio, incluso, para cierta autocrítica y promesas de -ahora sí- formar un frente que no excluya al peronismo desencantado. 

Según supo iProfesional, Vidal y Lacunza se juntaron con más de 60 fondos de inversión. Cada cónclave juntaba no menos de 12 o 15 personas en distintos desayunos, almuerzos y cenas.

Claro que la agenda del ex ministro de Economía fue netamente con personalidades del mercado mientras que Vidal tuvo la propia con gente de la política. De hecho, escucharon a varios argentinos que se desempeñaban en compañías en Nueva York quienes le brindaron la visión que se tiene sobre el país. 

Hernán Lacunza, el referente económico de Vidal y Rodríguez Larreta, estuvo en Nueva York

La agenda económica, comprometida

Lo que buscaron, principalmente, fue dar un mensaje hacia delante. Si bien hablaron del "aprendizaje" que dejó la gestión pasada de Cambiemos, sobre la consistencia de un programa económico "y apertura política", fueron categóricos con respecto a lo que vendrá para la economía albertista. 

"Notamos mucho desencanto de los inversores con la Argentina, algo que demuestra por qué no estamos en el radar de nadie. Es unánime la falta de interés", comentaron los enviados de Cambiemos a Nueva York luego de las reuniones. 

Acto seguido, los enviados de María Eugenia Vidal le dijeron a los inversores que la herencia que se está gestando a partir del 2021 es peor que la que dejaron ellos en el 2019 en términos de bienestar y PBI. De hecho, creen que en los próximos años (hasta el 2023) se acortarán los márgenes de acción para el que venga (o el que siga). Hablaron de índices de pobreza elevados, inflación que no cederá, desempleo galopante y problemas para controlar el déficit fiscal. 

"Tienen expectativas de que las cosas seguirán empeorando de acá al 2023 a pesar de tener precios elevados de materias primas", reflexionó ante iProfesional un asistente a los reuniones. 

Los ejecutivos de los fondos de Wall Street se llevaron la sensación de que el que venga luego de las elecciones del 2023, tendrá menos herramientas de política económica que ahora. "Plantearon un escenario negativo, con la incertidumbre incluso para las legislativas de este año", agregó otra persona que estuvo reunida con la delegación de Vidal. "No quedó claro si ella (Vidal) jugará en la Provincia o no", agregó. 

Los ejecutivos de Wall Street se llevaron un lapidario diagnóstico hacia adelante

Los ecenarios electorales para noviembre

Según plantearon en charlas informales, ya casi como consultores políticas y no tanto como técnicos, los enviados de la ex gobernadora de la Provincia de Buenos Aires reflexionaron sobre lo siguiente. "Dicen que el único escenario de cierta tranquilidad es un empate en las legislativas entre ellos y el oficialismo. Porque si gana el kirchnerismo por más de 5 puntos se van a radicalizar, así como si pierden por 5 puntos porque le van a echar la culpa a Alberto Fernández por la derrota. En cualquiera de esos caso, van a acelerar la radicalización", comentó otra fuente presente en las reuniones. 

La duda que se llevan en esta oportunidad los ejecutivos de Wall Street es quien liderará el "ala" moderada de Cambiemos. Vidal no fue por cuenta propia sino que en estas reuniones tenía el aval de Rodríguez Larreta. ¿Quién será el líder en esta oposición "moderada"? ¿Cuál será el rol de Mauricio Macri? Todas preguntas sin respuestas a, todavía, mucho tiempo para pensar en quién jugará la carrera presidencial.