La reunión convocada por el Ministerio de Trabajo de la Nación, a pedido de la Asociación Bancaria, con las cámaras empresariales se llevó adelante este martes y, en este marco, los gremialistas plantearon  la "urgente" apertura de negociaciones paritarias correspondientes a este año, teniendo en cuenta entre algunos puntos, "el respeto estricto por parte de las entidades bancarias del protocolo sanitario firmado para nuestra actividad".

Además, solicitaron "continuar con la regulación de la Ley de Teletrabajo, a los efectos de arribar a un acuerdo sobre la implementación de la misma; terminar con las tercerizaciones del trabajo bancario, y el correcto encuadramiento de las compañeras y compañeros que realizan tareas bancarias".

Por otra parte, denunciaron a los bancos que presentan pedidos de cierre de sucursales ante el Banco Central, "así como el achique de estructuras y la reducción de los puestos de seguridad", señalaron desde el gremio.

Luego de conseguir un incremento del 51% en el 2021, el titular de la Asociación Bancaria y diputado nacional bonaerense por el Frente de Todos, Sergio Palazzo, ya había comenzado días atrás a acelerar las gestiones para dar inicio de la negociación paritaria 2022 del sector.

Palazzo realizó una presentación formal ante el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, a quien le pidió que convoque de manera "inmediata" a una mesa de discusión salarial entre el gremio y las cámaras empresarias. El último acuerdo venció el 31 de diciembre.

"El acuerdo salarial bancario venció el 31 de diciembre último, por lo que el gremio solicita de manera formal la apertura de la paritaria de 2022 para analizar la situación de los haberes y otros temas propios de la actividad", señaló Palazzo y su secretario gremial Gustavo Díaz.

Pedido de apertura paritarias 2022. pic.twitter.com/kGaA8ouPds — Sergio Omar Palazzo (@SergioOPalazzo) January 19, 2022

Sostener el poder adquisitivo

En la nota a Moroni, Palazzo y Díaz afirmaron que hubo "muy pocos sectores que lograron obtener ganancias en el contexto de la pandemia de coronavirus que ha tocado y toca vivir y, uno de ellos, es el de la actividad financiera", aseguraron.

"No es posible permitir que los trabajadores bancarios pierdan poder adquisitivo salarial. Ante la difícil coyuntura económica, la Bancaria solicita una urgente audiencia en Trabajo con las cámaras empresarias del sector Abbapra, ABA, ABE y Adeba y el Banco Central (BCRA)", concluyeron Palazzo y Díaz en el escrito.

Comercio, Bancarios, Petroleros, Estatales y Docentes, las paritarias que marcarán el primer mojón de 2022

Según trascendió, el gremio buscará un entendimiento a través del pago de una suma fija hasta marzo próximo a los fines de evaluar los niveles inflacionarios del primer trimestre y luego encarar la negociación porcentual para los meses subsiguientes.

El año pasado, La Bancaria abrochó un incremento anual del 51%. La última actualización paritaria la selló en diciembre pasado tras negociación con las cuatro cámaras empresarias.

En esa ocasión establecieron adicionar un 8% para cerrar el año, elevando el sueldo inicial a 122.304 pesos.

Perspectivas inflacionarias

Mientras tanto la percepción de consultoras, universidades y sindicatos de la pauta salarial 2022 se traza sobre una franja que va desde el 45 al 50 por ciento, siempre en rigor del incremento sostenido de precios.

Más allá de las condiciones singulares del convenio de salarios de la AB, el resto de los gremios también presta atención a la mesa de discusión que tendrá por un lado a la dirigencia que encabeza el referente sindical y también diputado del FdT, Sergio Palazzo, y a los ejecutivos de ABAPPRA, ADEBA, ABA y ABE.

Distinto esquema

Según adelantó iProfesional desde el Ejecutivo descartan que este año tendrán que permitir un esquema de negociación parecido al del 2021: "Siempre las paritarias van a tener cláusulas de revisión porque son un reaseguro para trabajadores y empleadores", confirmaron fuentes de la cartera laboral.

Además confirmaron que "la idea para 2022 es recuperar salario, como este año. El objetivo sigue siendo que los salarios le ganen a la inflación".

Otros que movieron sus fichas para apurar a los empresarios fueron los petroleros. Empujados por la unidad que lograron los gremios de la Patagonia, los más poderosos del país, acordaron que el 25 de este mes retornarán a las charlas paritarias.

En ese marco buscarán revisar lo firmado en 2020, sellar un bono en concepto de gratificación y adelantar la paritaria 2022. Un combo explosivo y con final incierto.

Más previsible, pero con un impacto mucho más potente en el mercado de trabajo es lo que ocurrirá con la Federación Argentina de Empleados de Comercios y Servicios (FAECyS) que comanda Armando Cavalieri. Es que tanto el gremio como los empleadores ya habían fijado una revisión salarial para enero.

Según trascendió en las últimas horas Cavalieri elevó su pretensión de obtener un 15% adicional para los trabajadores del sector. La intención es terminar el año paritario con un incremento que supere el 50%. Se espera que se aceleren los contactos en la segunda mitad del mes.

En el sector público el panorama es bastante similar. Los estatales, representados por UPCN y ATE, tienen que volver a debatir sus haberes este mes, luego del bono de fin de año de 20 mil pesos que sellaron en diciembre.

desde el Ejecutivo descartan que este año tendrán que permitir un esquema de negociación parecido al del 2021

Los trabajadores de la administración pública nacional y de los organismos descentralizados del Estado vienen pactando paritarias cortas y la intención es que se cumpla la promesa del Gobierno: "Que los salarios le ganen a la inflación".

A la espera, como todos los eneros, también están los docentes. Los gremios pretenden que en el transcurso del mes haya novedades de la paritaria nacional para que ello sea una referencia en las posteriores discusiones salariales con cada una de las provincias.

La intención es debatir salarios con tiempo y no llegar al cierre paritario con la espada de Damocles del inicio de las clases, que suele presentar ser un problema adicional.