Los trabajadores que no pudieron concurrir a sus trabajos el viernes último o llegaron tarde  como consecuencia del paro de colectivos y del ferrocarril Sarmiento que afectó al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), "conservarán el derecho al goce íntegro de sus ingresos habituales".

Así lo formalizó el Ministerio de Trabajo, por medio de la Resolución 887/2023, publicada este lunes en el Boletín Oficial.

"Establécese que los trabajadores afectados en su movilidad a los fines de la concurrencia a sus puestos de trabajo como consecuencia de las medidas referidas en el considerando, conservarán el derecho al goce íntegro de sus ingresos habituales", según el texto oficial.

La decisión había sido anticipada por la ministra de Trabajo, Raquel "Kelly" Olmos y, ahora se oficializó. La cartera laboral puntualizó además que los trabajadores deberán acreditar ante sus empleadores que el paro los afectó para concurrir a sus lugares de empleo.

Pero aclaró que en caso de "divergencias interpretativas", la situación tendrá que resolverse "por la vía del diálogo social entre empleadores o sus representantes y las organizaciones representativas de trabajadores".

Cómo fue el paro de colectivos y trenes

El viernes 7, el servicio de  transporte automotor de pasajeros para el AMBA fue afectado durante casi todo el día por retención de tareas llevada a cabo por la Uniín Tranviarios Automotor (UTA) "con motivo del incumplimiento de las empleadoras del sector" de los nuevos valores salariales", indicó Trabajo. 

Y sumó a ello el bloqueo del gremio Asociación del Personal de Dirección de los Ferrocarriles Argentinos (APDFA) de los Talleres Castelar del ferrocarril Sarmiento, entre las 03:50 y hasta las 09:30 de ese día, que impidió durante ese período la salida de formaciones de trenes.

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Ante esa situación, el Ministerio consideró que se vio afectada la movilidad diaria de los trabajadores usuarios de los servicios de transporte público de pasajeros, que se vieron  impedidos de trasladarse a sus destinos laborales. Y explicó que entre los factores preponderantes que tienden a justificar las inasistencias del personal existe lo que se denomina "caso fortuito" o "fuerza mayor".

"Una situación de fuerza mayor se configura cuando ese impedimento no ha podido ser evitado y exime de responsabilidad a ambas partes del cumplimiento de sus obligaciones: al trabajador, de poner sus servicios a disposición del empleador y a éste, de dar ocupación, ya que también es ajeno a aquel", puntualizó la Resolución.

Por ese motivo, evaluó que configurándose una situación de fuerza mayor para esos trabajadores, resulta imprescindible garantizar la no afectación del derecho al goce íntegro de sus ingresos habituales.

"El principio de buena fe es la forma en que se debe conducir el empleador como el trabajador, que debe regir desde el inicio hasta la finalización laboral", resaltó Trabajo.

Massa y los "parásitos del Estado"

El mismo viernes, cuando aún se estaba llevando a cabo el paro, el ministro de Economía, Sergio Massa, lo calificó de "extraño" y apuntó contra empresarios del sector, a los que calificó de "parásitos del Estado".

"¿Qué están defendiendo? ¿Qué piden? Acá hay dos grupos empresarios, a uno de los cuales le dicen el amarillo, que pretenden tomar de rehenes a los trabajadores para discutir el sistema de compra de carrocerías, porque fabrican carrocerías; pretenden que el Estado les garantice la rentabilidad. A los que son parásitos del Estado y pretenden extorsionar, no les tenemos miedo, los vamos a enfrentar para defender el derecho de la gente a viajar para ir a trabajar", advirtió el jefe del Palacio de Hacienda.

Más tarde, Massa fue el encargado de anunciar que el paro se levantaba a las 17:30 y que desde este lunes quedaba conformada una mesa de diálogo para encontrar soluciones a los problemas pendientes del sector.