La semana pasada estuvo cargada de violencia y muerte y derivó en la suspensión de los actos de cierre de campaña, al tiempo que se postergó un encuentro definitorio entre la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y el Premetro (AGTSyP) con los representantes de la empresa concesionaria Emova y funcionarios de Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado (SBASE) y el Gobierno porteño por diferentes reclamos laborales y salariales.

Las partes volverán a reunirse este viernes, con el fin de discutir principalmente un plan que termine con la presencia del asbesto en las formaciones y la devolución de los descuentos practicados a los trabajadores y trabajadoras que se adhirieron a los paros en los últimos meses, en el marco de un plan de lucha.

Las fuentes gremiales consultadas por iProfesional indicaron que "no hay una amenaza latente de paralizar el servicio, en caso de no llegar a un acuerdo", aunque admitieron que "todo dependerá del trato y de cómo se desarrollen las negociaciones". Y aclararon: "Una cosa es que se nieguen a todo y otra es que se establezcan canales de diálogo que permitan llegar a un entendimiento".

El gremio reclama la devolución del dinero descontado por paros

En un comunicado firmado por su titular, Roberto Pianelli, y el secretario Adjunto, Néstor Segovia, los Metrodelegados señalaron que los directivos presentaron "un listado con cientos de casos de días a ajustar, porque habían sido descontados de forma ilegal a los trabajadores".

Esto puede ser un principio de solución, aunque el retiro del asbesto es un tema complejo de resolver. De hecho, la línea B sufre demoras casi todos los días por la falta de formaciones, muchas de las cuales están siendo "limpiadas" o detenidas por desperfectos mecánicos.

El pliego de demandas de la AGTSyP se puede resumir en los siguientes puntos:

• Devolución de los salarios "ilegalmente descontados durante las jornadas de lucha".
• Programa de desasbestización integral.
• Control médico para todo el personal en forma periódica.
• Reducción de la jornada laboral. Es decir, pasar de los seis días de trabajo por uno de descanso a cinco días por dos de franco. El propósito es reducir la exposición al asbesto.

El gremio de metrodelegados espera que Emova y los funcionarios acepten su pedido para reducir su jornada laboral.

Campaña de concientización a los pasajeros: el pedido clave del gremio

Asimismo, solicitarán a las autoridades un plan de visualización y concientización del tema para los pasajeros "que también se ven afectados y podrían sufrir problemas de salud", explicaron. Al respecto, el gremio ya presentó diferentes piezas de difusión para que los usuarios puedan estar informados sobre la problemática del asbesto en el subte, como una guía informativa en la que se explica la peligrosidad del material, los lugares en los que está presente, la historia de su prohibición y los fallos judiciales por el conflicto que mantienen con el GCBA y la empresa Emova desde que en 2018 confirmaron la presencia del mineral en sus lugares de trabajo. La guía está disponible en la página web asbestoenelsubte.com.ar.

Los voceros gremiales dejaron en claro que en las últimas reuniones "hubo acercamientos en algunos temas, pero estamos lejos de un acuerdo integral que permita levantar o suspender nuestro plan de lucha".

Los Metrodelgados aseguraron que "claramente quedó demostrada, por escrito y rubricada, la veracidad de nuestra denuncia", ya que "la empresa Emova se comprometió a cumplir con la devolución de los salarios ilegalmente descontados a cientos de trabajadores y trabajadoras en los últimos cuatro meses y a participar de todas las instancias de diálogo en función de la reducción de la jornada laboral".

Emova sostiene que existe un "plan de desasbestización"

Desde Emova, en tanto, detallaron que se comprometieron a "revisar aquellos descuentos en los cuales podría existir alguna eventual inconsistencia salarial siempre que no estén vinculados con las horas no trabajadas por los empleados durante los paros". Además informaron sobre las medidas que se vienen realizando en el "Plan de Desasbestización" -en continuidad con el proceso iniciado hace 5 años- para "llevar tranquilidad al personal".

El gremio apuntó que "la empresa continúa manifestando que la reducción de la jornada semanal de 36 a 30 horas resulta inviable sin afectar la operación de la red de Subte (...)", mientras que la Dirección General de Protección del Trabajo dependiente de la Subsecretaría de Trabajo, Industria y Comercio de la Ciudad de Buenos Aires confirmó que "de acuerdo a las medidas realizadas las condiciones son adecuadas para el desarrollo de la actividad".

En este sentido, Pianelli manifestó: "Vamos a seguir reclamando que retiren todo el asbesto del subte y que cumplan con el fallo de la justicia porteña que obliga a Emova, Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado (SBASE) y el Gobierno de la Ciudad a hacerlo y a poner bajo vigilancia médica a todos los trabajadores".

Los trabajadores del subte aseguran que la presencia de asbesto en las formaciones afecta su salud.

Y advirtió: "En los cuatro meses que llevamos de protesta constante, tratando de afectar en la menor medida a los pasajeros, el gobierno porteño no nos convocó para encontrar una solución a esta problemática que se lleva la vida de los trabajadores y trabajadoras y que también está afectando a los usuarios". A su vez, detalló: "3 trabajadores han fallecido, 87 están afectados, 6 tienen cáncer y 2.150 están bajo vigilancia médica".

Medidas de fuerza contra las empresas, Sbase y el gobierno porteño

Además del levantamiento de molinetes, paros rotativos y huelgas, los Metrodelegados también están llevando adelante una "campaña de difusión", para que los pasajeros comprensa la naturaleza de las protestas. "Queremos un subte libre de asbesto y por la reducción de la semana laboral", explicó Andrea Salmini, secretaria de Prensa de la AGTSyP, quien explicó que "estamos visibilizando nuestra pelea contra el asbesto en el subte".

Pianelli denunció que "las empresas Emova, antes Metrovías, y Sbase, la dueña del subte, ocultaron la presencia de este material, nos enfermaron sin dar la información necesaria para poder cuidar nuestra salud" y recordó: "Desde 2018, venimos denunciando esta situación que vivimos los trabajadores del subte. Nuestro objetivo es que los usuarios sepan que existe este material y los peligros que implican".

Planteó que "el reclamo no es un capricho, porque el asbesto es una cuestión de salud pública, en la que los trabajadores tenemos muchísima más exposición, pero en la que quienes viajan también están expuestos. La gran mayoría de los pasajeros no saben que están expuestos a una composición cancerígena".

Reducción de la jornada laboral para "cuidar nuestra salud"

Entre otro de los pedidos, Pianelli señaló: "Nuestro pedido de reducción de la semana tiene este punto como central: bajar el tiempo de exposición para enfermarnos menos, para cuidar nuestra salud".

Sobre las demandas, Pianelli indicó que se solicitó "la reducción de la semana para cuidar nuestra salud, pero también para regularizar el sistema laboral; es decir, trabajar cinco días con dos de franco en lugar de seis por uno; aunque el tema principal es la exposición al asbesto".

En los últimos meses, hubo paros y demoras en el subte casi todas las semanas.

Sostuvo que "en principio, la idea es bajar el tiempo de exposición para enfermarnos menos, pero también pretendemos mejorar la situación laboral, donde falta personal y la empresa se niega incorporar trabajadoras y trabajadores"

El asbesto o amianto es la combinación de un grupo de minerales que no tiene olor. Sus fibras se esparcen por el aire y provocan cáncer a quienes están en contacto con este material, por lo cual su uso está prohibido por el Ministerio de Salud de la Nación desde 2003.