El constante encarecimiento en el costo de los créditos ya tiene pleno impacto negativo en el consumo; en especial de aquellos rubros que suelen ser muy dependientes del financiamiento. Con cuotas mucho más caras, las ventas en los comercios caen.

El relanzamiento del programa "Ahora 12", cuyos costos va a la par, e incluso algunos puntos por debajo de la inflación, compensa en parte la caída en las ventas pero no llega a equilibrar el escenario negativo.

El último informe de la consultora PxQ sobre economía real apunta a una caída real del 23%, en el último año, en el volumen de los créditos bancarios para el consumo.

El retroceso en el financiamiento con tarjetas de crédito fue inferior -del 11% también en términos reales- en los últimos 12 meses. Muy posiblemente, esa caída fue menor porque los consumidores están utilizando menos los plásticos ante la falta de actualización de los topes de los clientes bancarios, durante los últimos tres o cuatro años.

Para tener en cuenta, el costo financiero total a la hora de comprar en un comercio va del 260% anual hasta el 500% anual.

Los créditos bancarios para el consumo tienen un costo superior al 300% anual, incluso para clientes que acrediten sus sueldos en esas mismas instituciones.

Los consumidores están utilizando menos los plásticos ante la falta de actualización de los topes de los clientes bancarios

Las ventas, para abajo

En este contexto, las ventas de electrodomésticos muestran una caída del 1,6% durante el primer semestre, con lo cual se da vuelta el signo positivo de los meses anteriores.

"Las contracciones de las ventas en Celulares (-4,9%), Televisores (-7,2%), Aires acondicionados (-6,9%) y de Dispositivos de calefacción (-45%) explican la merma del total. A pesar de la reversión de las cantidades vendidas en el rubro, sobresalieron los incrementos de Pequeños electrodomésticos (+17%), Ventiladores (+23%), Lavarropas (+5,7%) y Heladeras (+4,2%)", refiere el informe de PxQ.

La devaluación del 22% decretada el lunes post PASO redundó en una esperada disparada de los precios. La reacción fue automática. A diferencia de otros países, donde el "pass through" se demora en concretar, en la Argentina ese traspaso a precios es inmediato. Ocurre para los productos importados pero también para otros que no lo son, como por ejemplo los electrodomésticos, y también en los alimentos, las bebidas y los productos de higiene y limpieza.

En épocas de incertidumbre económica -y también política- como ahora sucede en la Argentina, incluso hay una sobrerreacción de parte de los empresarios y comerciantes. Hay un hilo común en la conducta: la búsqueda de una (lógica) cobertura. Nadie quiere perder no descapitalizarse en un contexto totalmente adverso y de incertidumbre total.

Una compilación realizada por la consultora Eco Go, en base a publicaciones en tiendas oficiales, detectó que los precios de las computadoras se incrementaron 31,1% en agosto. Unos puntos por encima de la suba del dólar oficial, que fue del 27% desde principios de mes. El segundo rubro que más se encareció fue el de los juguetes, con un alza del 28,3%.