La sensación de sorpresa total recorrió ayer los despachos de gerentes y directores de empresas de primera línea y bancos líderes. El triunfo de Sergio Massa no estaba en los cálculos de nadie. Se sabe: la candidata preferida en esas oficinas era Patricia Bullrich, y el director de uno de los bancos extranjeros no disimula su "desazón" por el resultado de las elecciones del domingo.

Así y todo, en el sector de la producción y en el sistema financiero no escondían la sensación de alivio por el tropiezo del plan de dolarización que hasta acá encabeza Javier Milei.

Ese plan, totalmente disruptivo, implicaría un cambio completo de las reglas de juego en el sistema financiero. Los financistas creen que, tras la salida de Bullrich de la posibilidad del balotaje, ahora llegó el momento de conocer más en detalle el plan de Massa para los bancos.

Los banqueros, que hace un par de semanas se vieron en la obligación de salir al cruce de Milei, cuando el libertario recomendó a los ahorristas a rescatar los plazos fijos en pesos, creen en su mayoría que "con Massa se puede negociar lo que viene".

A esta altura, en la City piensan que el ministro-candidato va a proponer una especie de continuidad de lo ya establecido. Eso se entiende: sin dólares en el Banco Central y caminando por una cornisa, Massa no alterará demasiado ninguna variable para disminuir los riesgos.

El anuncio de un nuevo dólar diferencial para las exportaciones, sostienen desde los bancos, podría ayudar a la llegada de divisas al BCRA, pero se advierte que también presionará sobre los precios.

La dolarización de Milei puso en alerta a los bancos.

Nuevo plan de Massa: las 3 claves de los próximos 27 días

Los financistas consultados por iProfesional dan cuenta de las principales claves que va a sostener Massa para las semanas que vienen hasta la segunda vuelta. Una especie de "plan continuidad":

• Intervención en el mercado cambiario, con el objetivo de que no se dispare la brecha cambiaria. En Economía temen que esa disparada recaliente a la inflación, y la ubique todavía en un escalón más elevado. La estrategia -claramente de cortísimo plazo- es similar a la que existió en la previa a la primera vuelta: una restricción de las operaciones que evite la disparada del dólar.
• Inflación estabilizada en los dos dígitos mensuales. Para octubre, en los bancos consultados esperan un IPC de entre 10% y 11%. Otra vez, una dinámica similar a la de los últimos meses. El objetivo, acá, es que la suba de los precios no escale.
• Tasas de interés sin cambios. En ese contexto tampoco prevé un retoque a las tasas de interés, que fueron ajustadas el mes pasado, tras la devaluación post PASO.

"El plan siga-siga está en marcha", sostienen desde una entidad financiera. Al menos, esa es la expectativa de algunos operadores.

Precios: pulseada con fabricantes

Las principales fábricas de la alimentación están a la expectativa, también, de los próximos pasos de Massa. Se aguardan las primeras señales.

Los empresarios ya dejaron trascender que no pueden cumplir con el programa de "Precios Justos", que vence a fin de este mes. Los incrementos del 5% mensual, en medio de una suba promedio del 10% a 12% del resto de los productos de la canasta básica, lucen incumplibles para los ejecutivos.

De eso quieren hablar en las compañías. Desde el Palacio de Hacienda no descartan una inminente convocatoria. Massa no quiere escuchar que ese plan de precios regulados llegue a su fin.

¿Se puede sostener Precios Justos?: sigue la pulseada entre las empresas y el Gobierno.

Colaboradores del ministro dejaron trascender que habría una convocatoria en los próximos días a las empresas formadoras de precios, y también a las grandes cadenas de supermercados.

Los ejecutivos, en tanto, dan cuenta de los graves faltantes de materia prima para producir y de los aumentos en los costos. Desde las compañías, la falta de divisas para las importaciones encabeza el ranking de las preocupaciones. Hay alarma por lo que vaya a suceder para las próximas semanas, en la previa a la segunda ronda.

La cobertura seguirá mandando

Hubo un dato que resume la incertidumbre para lo que viene. Volvió a verse un fuerte incremento de las ventas de las grandes cadenas de supermercados durante el fin de semana.

No sorprende: un dato dado a conocer por la consultora Scentia -que dirige Osvaldo del Río- dio cuenta de la cobertura que toman los consumidores, a pocas horas de las elecciones.

Tal como sucedió después de la devaluación de agosto, cuando la gente corrió hacia las góndolas para ganarle al traspaso a los precios del salto del dólar, en las últimas semanas se percibió un fenómeno similar.

Los datos de Scentia dan cuenta de una suba del 8,5% en el consumo masivo (alimentos y bebidas) en septiembre contra el mismo mes del año pasado. Con un pico del 12,5% en el caso de las cadenas de supermercados.

Lejos de percibirse como una buena noticia, esta ola de compras se vincula con el temor a lo que pueda venir tras el balotaje. Cobertura total. Así le dicen.