El presidente electo Javier Milei delinea los detalles finales para la ley ómnibus que enviará al Congreso para avanzar en las reformas y la desregulación del Estado, a la vez que Luis "Toto" Caputo y Santiago Bausili, futuros ministros de Economía y presidente del Banco Central (BCRA), respectivamente, hacen lo propio acerca de lo que será el nuevo programa tendiente a estabilizar la economía.

Así, los equipos de técnicos jurídicos de Milei comenzaron a mirar lo que será el día después de la asunción del domingo 10 de diciembre.

La estabilización de la economía se daría en medio de una liberación de precios -que venían retrasados y se descongelaron de manera abrupta en las últimas semanas desde el balotaje a esta parte- que dejarán una inflación en niveles muy elevados para los primeros meses de 2023 y un nuevo tipo de cambio que permita sumar reservas en el BCRA.

Luego de la estabilización y en un esquema con tipo de cambio libre (aún es un misterio a qué nivel flotará el peso contra el dólar), se está analizando apelar a una de las anclas inflacionarias de los 90: generalizar la prohibición total de indexar los contratos.

Se trataría de reeditar el esquema aplicado en el gobierno de Carlos Menem tras la hiperinflación de 1990. En medio del nacimiento de la Convertibilidad, se prohibió por ley cualquier ajuste de precios por inflación. La idea fue que, sobre la base de que una economía en paridad uno a uno (un peso igual a un dólar), ya no era necesario un mecanismo de actualización de los precios de los distintos factores de la economía.

El gobierno de Milei analiza apelar a una de las anclas inflacionarias de los 90: generalizar la prohibición total de indexar los contratos.

¿Qué prohibió la ley 23.928?

La ley 23.928 prohibió en 1991 "la indexación por precios, actualización monetaria, variación de costos o cualquier otra forma de repotenciación de las deudas, impuestos, precios o tarifas de los bienes, obras o servicios" en el marco de la convertibilidad.

El esquema estuvo rígido hasta 2002, tras la salida de la crisis que terminó con el gobierno de Fernando de la Rúa, pero luego hubo flexibilizaciones a medida que la inflación se aceleró y los contratos quedaban absolutamente desfasados.

Los alquileres, por ejemplo, están regulados por un índice que elabora el BCRA y las cuotas de los créditos hipotecarios del Procrear también tienen una fórmula de actualización. Incluso, la Justicia resolvió indexaciones en los balances de las empresas, entre otros.

El proyecto con el que Milei inauguraría su gobierno incluiría no sólo la "ley de Ministerios" que reduciría de 18 a ocho las carteras, sino también una serie de reformas de impacto como la simplificación del sistema impositivo, la desregulación de leyes económicas y laborales. 

¿Qué es la ley ómnibus?

Milei, revela las primeras medidas que presentará al poder legislativo y surge la pregunta acerca de ¿qué implica la "ley ómnibus" y cuáles son sus puntos esenciales para la reforma del Estado?

Javier Milei analiza enviar al Congreso la "ley ómnibus"

En una reciente reunión de Gabinete, Milei incorporó a Armando Guibert, ex funcionario menemista y destacado participante en las reformas estatales de la década del '90. Según un comunicado de prensa de la Oficina del Presidente Electo, Guibert, "ex Subsecretario de Reforma y Modernización, quien estuvo a cargo de la reforma de Estado del gobierno de Carlos Menem", aportará su experiencia al equipo de Milei.

La "ley ómnibus" se define como un conjunto de iniciativas centradas en cambios estructurales votadas en conjunto y presentadas, generalmente, en un nuevo mandato. A través de este mecanismo, el presidente Milei busca agilizar la discusión legislativa y destrabar el tratamiento de posibles normativas, en su mayoría enfocadas en la problemática económica.

Dentro de las reformas propuestas se contempla la modernización del Estado mediante la reducción de ministerios y estructuras del Gobierno nacional. Además, se especula con cambios en el régimen legal económico, destacando la apertura comercial, y se impulsaría una reforma en materia política y, posiblemente, electoral.

Este enfoque de reformas estatales tiene sus raíces en el menemismo y fue retomado por Javier Milei, con tres ejes claros: desregulación de la economía, flexibilización en las leyes laborales y privatización de las empresas estatales.