Qué se necesita saber para tramitar y cobrar la pensión por incapacidad a través de ANSES

Las personas con discapacidad que atraviesan situaciones de vulnerabilidad económica tienen la posibilidad de acceder a la Pensión No Contributiva (PNC) por Invalidez, otorgada por la ANSES en conjunto con la Agencia Nacional de Discapacidad. Este beneficio está destinado a quienes no logran insertarse en el mercado laboral debido a una limitación física, sensorial, intelectual o mental.

Qué es la pensión no contributiva por invalidez

La PNC por invalidez es una prestación mensual para personas con discapacidad severa que no realizaron aportes previsionales y que se encuentran en condición de vulnerabilidad social. Se trata de un apoyo económico del Estado, no derivado de un empleo registrado, que busca garantizar un ingreso a quienes no pueden generar recursos propios por su estado de salud.

A diferencia de otros beneficios, no existe un listado cerrado de enfermedades que habiliten automáticamente a esta pensión. Cada solicitud es evaluada de manera particular por un Tribunal Médico, que analiza el grado de afectación funcional y la capacidad laboral del solicitante.

Quién puede solicitar la pensión por incapacidad según ANSES?

La pensión no contributiva por invalidez laboral está destinada a personas que acrediten una incapacidad del 66% o más y que no puedan sostener su subsistencia por medios propios. Pero ese no es el único requisito. ANSES establece criterios muy estrictos que deben cumplirse al momento de iniciar el trámite:

• No cobrar jubilación, pensión ni retiro de ningún tipo;
• No estar trabajando en relación de dependencia ni inscripto como autónomo o monotributista, salvo quienes estén incluidos en monotributo social;
• No contar con ingresos propios suficientes ni recibir sostén económico de familiares obligados legalmente;
• Ser argentino nativo o naturalizado con residencia en el país, o extranjero con mínimo diez años de residencia continua (para menores, se exigen tres años de residencia de padres o tutores);
• No encontrarse detenido ni a disposición de la justicia.

La exigencia principal es el Certificado Médico Oficial (CMO), el documento clave que acredita la incapacidad permanente.

Además, se requiere:

• DNI del titular (y documentación de padres o tutores en caso de menores);
• Informes médicos que respalden el diagnóstico;
• Formulario P.S. 6.4 en caso de apoderados;
• Copias del DNI y demás documentación complementaria.

Pensión, incapacidad y ANSES: ¿cómo se inicia el trámite paso a paso?

El proceso es estrictamente personal y gratuito, y solo se realiza de manera directa con ANSES. No intervienen gestores ni intermediarios.

• Obtener el CMO digital

Debe emitirse en un hospital público o centro de salud habilitado. Este documento es esencial y funciona como respaldo médico oficial.

• Acceder a Mi ANSES

Se ingresa con la Clave de la Seguridad Social. En caso de no tenerla, puede crearse en línea de forma inmediata.

• Verificar los datos personales

En la sección "Solicitud de prestaciones", ANSES exige que la información del titular y las relaciones familiares estén correctamente actualizadas.

• Presentar la solicitud

Seleccionar la opción "Pensión no Contributiva por Invalidez" y completar todos los pasos que indica la plataforma.

Una vez presentada la solicitud, durante el proceso se puede seguir cobrando la AUH y la Asignación por Embarazo. Si la pensión es aprobada, el beneficiario pasa automáticamente a recibir la Asignación Familiar por Hijo, la ayuda escolar anual y otros beneficios complementarios.

Enfermedades que pueden habilitar una pensión por incapacidad

Aunque no existe un listado oficial de patologías que generen automáticamente el derecho, distintos estudios identifican enfermedades que suelen derivar en la concesión de una pensión de incapacidad permanente. Algunas de las más frecuentes son:

• Alzheimer

• Esclerosis múltiple

• Parkinson

• Cáncer y sus secuelas

• Epilepsia refractaria

• Artrosis y artritis reumatoide

• Hipertensión pulmonar

• Glaucoma severo o pérdida de visión

• Demencia senil

• Insuficiencia renal crónica

• Trasplante de órganos

La decisión final depende siempre del Tribunal Médico, que evalúa no solo el diagnóstico, sino también la evolución de la enfermedad, los tratamientos aplicados y la posibilidad de desempeñar una actividad laboral.