Tras perder 23,5 por ciento en un día, la petrolera OGX se despide del Bovespa
La petrolera brasileña OGX, del magnate Eike Batista, participó el jueves por última vez del índice Bovespa, el principal indicador de la Bolsa de Valores de San Pablo, en momentos en que depende de una resolución judicial para no decretar la bancarrota.
Los papeles de la compañía, que tramita en la Justicia un recurso de recuperación, se despidieron de la Bolsa paulista con su mínimo valor histórico de 0,13 de real, luego de una caída del 23,5%. Durante su pasaje por el Bovespa, la empresa fue la sexta con mayor peso entre las 73 que integran el índice, detrás de Petrobras, Vale, Itaú Unibanco, Bradesco y Banco do Brasil.
A instancias del proceso judicial de recuperación, la petrolera fue rebajada por las agencias de clasificación de riesgo Fitch -que la bajó de la categoría C a D- y Moody's, que la llevó de C a Ca. Las calificadoras consideran que la empresa tiene pocas perspectivas de recuperación.
OGX realizó el miércoles el pedido de recuperación a la Justicia, ante la imposibilidad de pagar sus deudas, que ascenderían a unos u$s 4.900 millones. La Justicia se expedirá al respecto en los próximos días.
Si el tribunal de quiebras acepta la solicitud, OGX, la principal empresa del grupo EBX, creado por Batista, tendrá un plazo de 60 días para presentar un plan de reestructuración, que deberá ser respaldado por al menos la mitad de sus acreedores.