El dato de inflación de junio arrojó una suba del 6%, es decir por debajo de las estimaciones del sector privado, por lo que se aleja de lo que se preveía inicialmente, cuando se lo ubicaba incluso por encima del 7 por ciento.

Cabe recordar que la Dirección de Estadística y Censo de la Ciudad de Buenos Aires reveló que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró un aumento del 7,1%. Esta suba representa una leve desaceleración por segundo mes consecutivo, siguiendo el 7,5% registrado en mayo y el 7,8% en abril. 

De esta manera, los precios han aumentado en un 51,2% durante la primera mitad del año y un 118,6% en comparación con junio del año pasado. El sector con el mayor aumento de precios fue vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, con un incremento del 10,2%.

Por su parte, la inflación para los trabajadores se ubicó en el 7,4%, es decir 1,7 puntos porcentuales por debajo del registro de mayo, de acuerdo con un informe del Instituto de Estadística de los Trabajadores (IET) de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) y el Centro para la Concertación y el Desarrollo (CCD).

Según el análisis de los expertos del IET, "a inflación de junio estuvo motorizada nuevamente por Vivienda (+10,6%) debido a aumentos en costos de electricidad, expensas y alquileres. En segundo lugar se ubicó Recreación y cultura (+10%), seguido por Educación (+9,9%), Salud (+9,2%), Comunicaciones (+8,2%) y Equipamiento y mantenimiento del hogar (+7,9%).

Los precios aumentaron un 51,2% durante la primera mitad del año

La inflación de junio, según el INDEC

El guarismo publicado por INDEC se ubicó 1,8 puntos porcentuales por debajo del nivel alcanzado en mayo, pero 0,7 puntos porcentuales por encima del 5,3% de igual mes de 2022. Cabe agregar que si ese porcentaje se anualiza, la inflación acumulada se elevaría al 101.2 ciento.

Si se toma en cuenta el lapso comprendido en los últimos doce meses el acumulado es del 115.6%, pero si se desagrega el dato de inflación de acuerdo a los denominados "rubros", el que más sube es Restaurantes y hoteles, con el 134.7%, seguido por Equipamiento y funcionamiento del Hogar, con el 122.3% y Prendas de vestir y calzado, que trepó un 121.4%. Un escalón más se ubicaron Bienes y servicios varios, con el 119,2% y Alimentos y Bebidas no alcohólicas con el 116,9 por ciento.

En sentido inverso, los rubros que menos subieron fueron Comunicaciones, con el 106.2%, Salud (104.7%) y Transporte, con el 100.5 por ciento.

Si se desagrega este incremento del 115.6% por regiones, la más castigada es el Gran Buenos Aires, con el 117%, seguida por el Noroeste y el Noreste, con el 115,5% y la Pampeana, con el 115,2%. Les siguen en orden decreciente la Patagonia (111.6%) y Cuyo, en donde la variación llegó al 100,2 por ciento.

En lo que hace a los productos que conforman la canasta básica, un primer análisis arroja como resultado una notable dispersión entre los diferentes rubros que conforman el indicador. En tal sentido, dentro de dicha muestra las mayores subas fueron las siguientes: batatas, casi el 420%; azúcar, el 362%; naranjas, el 292%; la papa, el 262% y el tomate redondo, con otro 226 por ciento.

Freezer y alacena vs. Tasa y dólar

En un contexto como el actual, en el que el aumento anualizado de los precios parece haber fijado un piso en torno al 115%, suele surgir la duda de cuál es la mejor inversión para tratar de resguardar el patrimonio de la familia, cuando el dólar blue subió un 105% y el plazo fijo rindió un 90 por ciento.

En tal sentido, ante la falta de un plan efectivo de parte del gobierno, es evidente que la batalla que libra a diario el consumidor para resguardar su patrimonio frente al avance inexorable de los precios es cada vez más compleja, por lo que es interesante destacar cuáles fueron entre los que pueden ser almacenados, los que más subieron en los últimos doce meses.

Por el lado de los productos pasibles de ser freezados, una buena "inversión" pudo haber sido el yogur firme en pote de 195 gramos, que subió el 153%, seguido por las salchichas tipo Viena, con el 120%; la manteca y el filet de merluza, con el 116 por ciento.

Las carnes que más subieron fueron el cuadril y la paleta, con el 74%

En cuanto a los que se pueden "stockear" en la alacena, los mayores rendimientos fueron para estos: paquete de azúcar de un kilo, con el 362%; arroz blanco, con el 162%; arvejas secas remojadas, que suben un 160%; los fideos secos (152%), el dulce de leche, que junto con la gaseosa base cola que avanzan el 146%.

En tanto que quienes apostaron a la carne, en sus diferentes cortes, perdieron en su apuesta, ya que quedaron muy lejos del promedio general.

En tal sentido, los que más subieron fueron el cuadril y la paleta, con el 74%, seguidos por la carne picada, con el 71% y finalmente el asado, que se encareció un 68 por ciento. Claro está que estos porcentajes podrían estar distorsionados por la ponderación que tienen los productos cárnicos dentro del índice los supermercados.

Por su parte, en lo que hace a los productos de limpieza y tocador, los que más subieron fueron los paquetes de pañales descartables, con el 172%, seguidos por el Jabón en polvo y la lavandina, con el 127% y el el jabón en tocador, con el 123 por ciento.

Lo que viene, lo que viene…

Pese a que el índice de junio se ubicó por debajo de las expectativas del mercado, para el corriente mes se estima que volverá a posicionarse por encima del 7 por ciento. "En julio ya estamos viendo una inflación arriba del 7%, vamos a ver cómo evoluciona el mes porque todavía no pasó demasiado tiempo. Fue un pequeño respiro, pero no marca un cambio de tendencia, tal vez algún acomodamiento de algunos precios y desaceleración de alimentos después de varios meses de incrementos en algunos productos", afirma María Castiglioni, Directora de C&T Asesores Económicos

Por su parte, la consultora LCG publicó un informe que indica que, en la primera semana de julio, la suba de precios de los alimentos promedió 0,2%, acelerando 0,1 puntos porcentuales respecto a la cuarta semana de mayo. En la primera semana de junio, la inflación había cerrado en 0,57%. El índice de alimentos y bebidas presentó además una inflación mensual de 5,1% promedio en las últimas 4 semanas y 3,7% punta a punta en el mismo período.

En igual dirección, Martín Calveira, economista investigador del IAE Business School, afirmó que "se espera un nivel similar de variación de los precios en el segundo semestre del año. Las expectativas de mercado plantean como piso un nivel de 7%, aunque pueden generarse nuevos impulsos de ocurrir una mayor corrección del tipo de cambio tras las elecciones PASO"

Por su parte, según la encuesta que habitualmente elabora el Banco Central, denominada REM (Relevamiento de expectativas de mercado), para el mes actual se prevé una suba del 7.7%, en tanto que para agosto y septiembre se la estima en el 7,8% y 8%, respectivamente.

Tomando en cuenta estos porcentajes, el consenso de los analistas consultados por la autoridad monetaria ubica la inflación para todo el año por encima del 146%.