Crédito fintech: el BCRA autorizará la vuelta del débito directo de cuotas
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) se prepara para dar un paso relevante en la reactivación del crédito digital. Según anunció Pedro Inchauspe, director del organismo, en el marco del Argentina Fintech Forum 2025, el ente monetario rehabilitará el débito directo -una herramienta clave para el cobro automatizado de préstamos- que había sido prohibida en 2020 durante el gobierno de Alberto Fernández.
"Si todo va bien, dentro del próximo mes vamos a permitir nuevamente el débito directo que el Banco Central cerró en 2020. Lo primero que haremos será cambiarle el nombre y actualizar su regulación", señaló Inchauspe durante su presentación en el Centro de Exposiciones porteño, donde se congregaron cientos de empresas del ecosistema financiero y tecnológico.
El funcionario explicó que la medida busca ampliar el acceso al crédito, impulsar la inclusión financiera y acompañar el desarrollo del Open Finance, el sistema de finanzas abiertas que el BCRA comenzó a implementar este año.
Del DEBIN al nuevo sistema de cobro digital
La reapertura del débito directo implicará no solo un cambio de nombre -dejando atrás la denominación DEBIN (Débito Inmediato)-, sino también modificaciones operativas. Así lo confirmó Juan Curutchet, superintendente de Entidades Financieras del BCRA, quien advirtió que el nuevo sistema "tendrá condiciones de control y supervisión específicas".
El DEBIN había sido suspendido en febrero de 2020, cuando el gobierno anterior decidió prohibir su uso para el cobro de préstamos, limitándolo exclusivamente a pagos de servicios públicos e impuestos. En aquel momento, la medida buscó proteger a los beneficiarios de planes sociales, ya que muchos vieron sus acreditaciones absorbidas automáticamente por cobros de cuotas pendientes de créditos.
Sin embargo, la prohibición tuvo un efecto colateral negativo: redujo el acceso al crédito fintech, especialmente para los segmentos de mayor riesgo, que suelen ser los más alejados de la banca tradicional.
Una herramienta esperada por el sector fintech
El débito directo había sido una herramienta fundamental para las fintech y entidades no bancarias, al ofrecerles una certeza de cobro que facilitaba la concesión de préstamos de consumo. Su eliminación forzó a muchas empresas a buscar métodos alternativos de cobranza, aumentando la morosidad y los costos operativos.
Con el regreso de esta herramienta, el BCRA busca revitalizar el crédito digital, una pieza central en su estrategia de inclusión financiera y modernización del sistema. "La recuperación del crédito es fundamental", enfatizó Inchauspe, y añadió: "Estas medidas se basan en el esquema de Open Finance y en los incentivos que queremos dar para ampliar el acceso al financiamiento".
El nuevo Debin Programado: pagos en cuotas y mayor transparencia
En febrero, el Banco Central oficializó la llegada del Debin Programado y la posibilidad de pagar en cuotas en dólares con tarjeta de débito y que los comercios reciban pagos en esa moneda. Reemplazó al antiguo Debin Recurrente.
El BCRA precisó que cada plan de pagos deberá contar con una adhesión individual y expresa del cliente, quien deberá autorizar la operación antes de procesar la primera cuota. Además, los pagos serán fijos y preestablecidos, lo que garantizará previsibilidad tanto para el usuario como para la entidad financiera.
Una vez completadas todas las cuotas, no será necesario solicitar la baja del plan, aunque tanto el cliente como el proveedor podrán cancelarlo en cualquier momento. En los resúmenes bancarios, cada movimiento figurará con el detalle:
"DEBIN programado – nombre del cliente ordenante – importe – cuota X/de XX".
El sistema vigente excluye a las billeteras virtuales fintech, como Mercado Pago, que operan con tarjetas prepagas sin CBU. Esta exclusión ya había generado reclamos de la industria durante 2024, que pidió "nivelar la cancha" frente a los bancos.
Asimismo, el BCRA aclaró que el Debin Programado no podrá utilizarse para actividades relacionadas con loterías, casinos u otros juegos de azar.
Esta decisión de rehabilitar el débito directo se enmarca en una agenda más amplia de reformas y desregulación financiera. En su documento "Objetivos y planes respecto del desarrollo de las políticas monetaria, cambiaria, financiera y crediticia para el año 2025", publicado a fines de 2024, el organismo anticipó que buscará avanzar en la eliminación de los controles cambiarios y de capitales aún vigentes.