El dólar volvió a bajar a mínimos en un mes y la City debate si conviene que siga a este precio
La calma en el precio del dólar posterior a la definición electoral generó que, en todo noviembre, el billete estadounidense descienda 3% y que toque su nivel más bajo desde el 15 de octubre pasado. Por ende, en la City vuelve a surgir la discusión si, con una cotización actual cercana a los $1.400, se está, o no, experimentando un nuevo retraso cambiario y si retorna ser barato viajar, ahorrar en moneda dura y realizar importaciones.
Es que sobre la mesa vuelven a colocarse diversas variables, como el ingreso de divisas, balanza comercial, precios internacionales, salarios, impuestos y costos logísticos, entre otros tantos factores que inciden para determinar la competitividad del país.
Al respecto, el FMI acaba de advertir al Gobierno por la falta de acumulación de reservas que ha mostrado en los últimos meses, que era uno de los compromisos oficiales para generar mayor confianza y respaldo en el mercado.
Por lo pronto, el dólar minorista que se vende en Banco Nación al público se ubica en $1.430, y en todo el año avanza alrededor de 36%. Una cifra que supera a la inflación en el mismo período, que ronda el 26% desde enero hasta el presente.
En tanto, el billete mayorista se ubica en $1.411, una cifra que se ha alejado bastante de la banda máxima de flotación establecida por el Banco Central, de no intervención oficial con la venta de divisas, que hoy es de $1.502,5, y que se actualiza a razón de 1% mensual.
Dólar volvió a bajar, ¿conviene este precio?
En primera instancia, uno de los argumentos de la City es que, en la actualidad, el precio del dólar está flotando dentro de una banda, en la que no está interviniendo el Gobierno. Es decir, la cotización hoy la está marcando y convalidando el propio mercado dentro del parámetro establecido por el Banco Central, por oferta y demanda.
Asimismo, existen distintos parámetros para afirmar si conviene o no este precio del dólar, debido a que depende de la perspectiva de cada uno de los sectores de la economía, según su competencia y cuál es su nivel de tipo de cambio adecuado, en base a costos puntuales e incidencia de factores importados.
En el mercado de opciones y futuros del Matba-Rofex se negocia que el tipo de cambio mayorista llegará a fin de noviembre a $1420 y para la finalización de diciembre se cerraron transacciones a un valor de $1.457,5.
Y se prevé que supere los $1.500 para febrero que viene ($1.520) y que llegue a los $1.600 recién para fines de mayo.
Es decir, el mercado prevé un incremento moderado del billete estadounidense para los próximos meses.
Una referencia que indica que el tipo de cambio hoy se encuentra por encima de lo requerido es el de convertibilidad o equilibrio, que se aplicaba en pleno 1 a 1, y que hacía referencia al nivel de precio de dólar requerido para que todos los pesos emitidos puedan "comprar" (o cubrir) a todas las reservas internacionales.
"A precios de hoy, en la convertibilidad, el tipo de cambio era de 950 pesos por dólar. De hecho, en la actualidad, su valor mayorista está bastante más alto, en $1.400", resume Fernando Baer, economista de Quantum, a iProfesional.
Además, indica que el precio del dólar actual es "más sustentable" porque se tiene equilibrio fiscal, por lo que "las presiones son menores para la apreciación".
Aunque Baer también aclara que, lógicamente, "para algunos sectores puede ser un tipo de cambio menos conveniente, pero no diría que no es competitivo en general. Superado el enigma electoral, a este nivel la fuerte demanda de dolarización también debería revertirse y eso también resta presiones hacia la depreciación".
Por eso, considera que con el ingreso de capitales, la discusión sobre atraso, o no, del tipo de cambio, "pasa a un segundo plano. Y es lo que estamos viendo hoy: más actividad vía la cuenta financiera del balance de pagos", concluye Baer.
En ello coincide Sebastián Menescaldi, economista y director asociado de la consultora Eco Go, al opinar que "el tipo de cambio hoy está en relativo equilibrio, y hay factores estacionales y extraordinarios que impulsan a una mayor baja, al menos hasta enero o febrero. Esto se debe a una mayor oferta de divisas por aquellos que desarman sus coberturas, por colocaciones de deudas de empresas y otros ingresos de dólares".
Además, en diciembre comienza una mayor demanda de pesos para pagos de aguinaldo, vacaciones, gastos de las fiestas y otros compromisos financieros.
"Es cuestión de oferta y demanda, mientras tanto el tipo de cambio se encuentra dentro de la banda de flotación, sin intervención oficial", sentencia Menescaldi.
En la misma línea, Nahuel Bernues, CFA y fundador de la consultora Quaestus, considera que "hasta $1.350, el Gobierno se siente cómodo con el tipo de cambio. De todas formas, veremos si marca un nuevo piso con compras de divisas por parte del Tesoro. Creo que cuando comience a comprar en grandes cantidades, veremos ahí que es un nivel en el que el Gobierno no solo se siente cómodo, sino que también puede acumular reservas".
Para completar que la balanza comercial también determinará su valor de equilibrio.
"Si las exportaciones siguen batiendo récords y el superávit comercial se mantiene, no veo que vaya a haber tanta presión al tipo de cambio, sobre todo, sin ruidos políticos a la vista y con inversiones y la cuenta capital que va a empezar a presionar", finaliza Bernues a iProfesional.
La conclusión la aporta Darío Rossignolo, economista y profesor de Finanzas Públicas en la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA: "Por definición, el tipo de cambio de equilibrio es aquel en el que el Banco Central no gana, ni pierde, reservas. Algunos lo calculan en términos históricos, en ese caso, un nivel cercano al techo de la banda está cerca de ese valor. Si está más bajo, el Gobierno debería comprar y, en caso contrario, vender".
De todos modos, afirma que hay variables que operan "a favor" de que baje el precio actual, como el ingreso de exportaciones del agro y Vaca Muerta, reformas y superávit. Y otras cuestiones fuerzan a que suba, como es la acumulación de reservas y los pagos de la deuda.
"Las expectativas determinarán cuán sostenibles son estos valores", concluye Rossignolo.
Por lo pronto, en noviembre se ha "derrumbado" la compra de dólares de los ahorristas desde home banking.
¿Está barato el precio del dólar?
Más allá que algunas referencias, como el tipo de cambio de convertibilidad y lo negociado en el mercado, indican que el precio del dólar está equilibrado o por encima, hay otras referencias que indican que está "barato".
Entre ellos, se encuentra la gran demanda de dólares registrada por los ahorristas, ya que toman al billete estadounidense como instrumento de refugio, más allá de su valor, para protegerse de cuestiones económicas y políticas locales, tales como la tensión electoral. Y la incertidumbre respecto a esas variables a futuro.
"Es transitorio el retroceso en su precio. El dólar tiende a estar pegado al techo de la banda cambiaria, algo que señala que no es realista. Es difícil saber cuál es el tipo de cambio de equilibrio. Conceptualmente, es aquel que te lleva a un equilibrio de la balanza de pagos. Y hoy la balanza de pagos está desbalanceada por las compras que hacen los ahorristas argentinos y las familias, por la compra de dólares. Entonces, si a $1.500 hay semejante nivel de compras, y desde que se salió del cepo en abril hasta acá, se compraron casi u$s35.000 millones, es porque la gente considera que todavía el dólar puede seguir subiendo", reflexiona Jorge Colina, economista de Idesa, a iProfesional.
Otra referencia que indica que el dólar se encuentra "barato" es el comparativo del precio que tuvo el blue, la menos intervenida de todas las referencias, en los últimos 10 años y la actualización a su valor actual, en base a la inflación y devaluación acumuladas.
Allí sobresale que la cotización actual del dólar es una de las más bajas de la última década.
Por ejemplo, el precio del blue tocó su último precio nominal máximo histórico el 12 julio del año pasado, al alcanzar los $1.500, ese valor, ajustado por la inflación acumulada desde esa fecha al presente, equivale en la actualidad a unos $2.050.
Y si se comparan los valores más altos a los que tocó el blue en los últimos 10 años, el máximo alcanzado se registra en octubre de 2020, en plena crisis desatada por la pandemia, cuando tuvo un valor actualizado de $4.370. Casi 200% más que en la actualidad.
Finalmente, en otro de los períodos de crisis cambiaria de los últimos años, que fue en octubre de 2023, en pleno momento de incertidumbre política y económica durante la definición de las últimas elecciones presidenciales, el blue llegó a un precio, a cifras actuales, de $3.425.
Por ende, en base a estas últimas referencias de "crisis" puede catalogarse que el precio del dólar está "barato", pero si el volumen de divisas que ingresa al país es más elevado, sigue la tranquilidad cambiaria y la demanda disminuye, por cuestiones de mercado, puede seguir pareciendo "caro" a la cotización que alcance mañana. Todo depende de la coyuntura económica y política.-