Sorpresa en la pulseada entre bonos en dólares vs. en pesos: cuáles ganarán en diciembre
Los bonos argentinos arrojan buenas ganancias en el acumulado de noviembre y contrastan con las pérdidas de las acciones. Las variaciones positivas se dan en toda la renta fija soberana, pero hay que destacar que esta vez los bonos en pesos se imponen sobre los denominados en moneda extranjera y en el mercado estiman que hacia adelante podría seguir liderando la interna del segmento de títulos deuda.
El equipo de research de PPI calcula que los bonos en dólares se encaminan a cerrar noviembre con ganancias "magras", de aproximadamente 0,9% en el promedio de los Globales y 0,5% en el de los Bonares. En tanto, en el acumulado del mes los títulos en pesos exhiben ganancias en dólares de alrededor de 9% en el promedio de los instrumentos CER, casi 9% en los duales y 7% en los de tasa fija.
En la curva CER, la más beneficiada del mes en la renta fija en pesos, las ganancias medidas en dólares ascienden entre 8% y 14%. En los bonos duales, entre 8% y 9%. En los de tasa fija, entre 7% y 7,5%. En cambio, entre los títulos en dólares, los Globales que más avanzan lo hacen con 2% y los Bonares con 1%. En el segmento de acciones, en cambio, el índice Merval acumula un retroceso de más de 6% en dólares al tipo de cambio CCL.
Efecto del dólar y tasas de interés
PPI sostiene que la relativa estabilidad con la que opera el tipo de cambio este mes impulsa los rendimientos de las estrategias en pesos medidas en moneda estadounidense. No obstante, detalla, no es sólo cuestión de efecto cambiario, sino también de la compresión de las tasas de interés, lo que en las últimas semanas le dio un impulso a las cotizaciones de los títulos de deuda en pesos.
"La liquidez abundante y mejores expectativas derrumbaron las tasas de interés en las últimas semanas, pero este proceso está cerca de agotarse porque ya no quedan más stocks de pesos para remonetizar. Incluso, la demanda estacional de pesos de diciembre podría poner presión alcista sobre las tasas de interés", agrega.
De acuerdo con el bróker de bolsa, las tasas implícitas de inflación en los bonos en pesos continúan en niveles relativamente bajos, por lo que sostiene que el segmento CER (que sigue la evolución del índice de precios de la economía) seguirá siendo el más beneficiado dentro de la renta fija en pesos y superaría las ganancias del segmento de tasa fija para estrategias de corto plazo.
Bonos en dólares vs. bonos en pesos
Félix Marenco, asesor financiero de Cocos Gold, se inclina por los bonos en pesos, a los que les asigna altas probabilidades de ganancias en dólares, pero a mediano o largo plazo (finales de 2026), en un contexto de mejoras en la macroeconomía argentina. En cambio, si bien hay potenciales ganancias en los títulos de deuda soberana en dólares, considera que con los rendimientos actuales hay menor atractivo para asumir el riesgo.
"El próximo año será muy bueno a nivel de inflación y actividad económica. Se van a volver a demandar pesos y el Gobierno apunta a remonetizar la economía. Hoy luce atractivo tener un bono en pesos que venza a fines de 2026, con una tasa nominal de poco más de 30% anual, mientras la inflación va camino a correr por debajo del 1,5% mensual e incluso puede caer más durante el año", afirma Marenco ante iProfesional.
Marenco sostiene que si un inversor cree en el proyecto económico del Gobierno y que el esquema cambiario mantendrá la actualización de bandas similar a la actual o apenas un poco por encima, probablemente encontrará atractivo en posicionarse en bonos en pesos que caduquen a fines del próximo año. Resalta que con tasas muy por encima de la inflación proyectada y el tipo de cambio cerca del techo de la banda, "hay poca probabilidad de que estos bonos no generen ganancias en dólares".
"Recordemos que diciembre es un mes con aumento estacional en la demanda de pesos, lo que genera apreciación de la moneda. Esta apreciación juega a favor y hacer tasas durante ese mes será una buena estrategia. Si creemos que el escenario macro de Argentina será positivo el próximo año, sería bueno entrar a un bono en pesos que dure hasta el cierre de 2026, con este tipo de cambio cerca de $1.500 y estas tasas aún altas frente a una inflación que seguiría cayendo", destaca.
A la vez, pone en duda que los títulos de deuda en dólares, que rinden en torno al 10%, justifiquen la tendencia en cartera teniendo en cuenta la relación riesgo-retorno. Si bien afirma que el contexto argentino ahora es positivo, aún quedan varios desafíos por delante, como la acumulación genuina de reservas que reclaman los inversores y la operación de recompra de títulos cortos que se anunció y aún no aparece nada concreto al respecto.
Por su parte, los analistas de Clave Bursátil se muestran optimistas tanto con la renta fija en dólares como en pesos. En el segmento dólares, proyectan ganancias de hasta 13% en los títulos del tramo medio, pero se concretarían cuando Argentina logre bajar suficientemente el riesgo país, a la zona de 420 puntos básicos, lo que habilitaría el regreso al mercado internacional de deuda para refinanciar los vencimientos en moneda extranjera.
En el segmento pesos, al que también consideran atractivo con miras a ganancias medidas en dólares, sugieren cautela a corto plazo debido a una posible volatilidad en el tipo de cambio que "se coma" las ganancias proyectadas. Por lo tanto, prefieren apostar por títulos en pesos de mediano y largo plazo, como los que vencen en el segundo semestre de 2026 o primer trimestre de 2027, ya que contienen tasas implícitas que pueden absorber eventuales presiones cambiarias y aún así arrojar ganancias en dólares.