Buscan inversores europeos para el mercado inmobiliario local

El mercado inmobiliario argentino ofrece atractivas oportunidades de negocios al inversor internacional, afirmó este sábado Issel Kiperszmid, presidente del grupo DYPSA, único representante del paí­s en el Barcelona Meeting Point, una de las ferias del sector más importantes de Europa. En medio de claras señales de desaceleración del mercado inmobiliario español, afectado por la caí­da de la demanda, la sobrevaloración del suelo y la restricción del crédito -como consecuencia de la crisis de las hipotecas subprime en Estados Unidos-, Europa del Este y América Latina aparecen como las ofertas más atractivas para el inversor. En este contexto, el presidente de la desarrolladora inmobiliaria DYPSA, uno de los grupos más importantes del paí­s -con proyectos en Puerto Madero, Olivos, y Tigre-, fue el encargado de defender la potencialidad del mercado inmobiliario argentino ante los profesionales del sector, reunidos en el Barcelona Meeting Point. Kiperszmid afirmó que "la crisis del sector inmobiliario es claramente global, hay mercados que están más o menos afectados, como Estados Unidos y España, pero también otros que no se ven afectados, como es el caso de Argentina". "El problema es serio en Estados Unidos, seguido en magnitud por España, donde hubo una fuerte especulación inmobiliaria, motivada por un sistema financiero que no fue lo suficientemente cauto a la hora de entregar créditos a deudores potenciales", explicó el empresario argentino. Sin embargo, "en Argentina no existe este problema, porque no hay operaciones de compra-venta financiadas con créditos", añadió Kiperszmid. No obstante, "el mayor atractivo de Argentina para el inversor internacional es la diferencia de valores. El metro cuadrado en España es de unos 3.000 euros, y en Buenos Aires podemos ofrecer las unidades de alto nivel desde 900 euros el metro cuadrado", afirmó el empresario. "En Buenos Aires, y particularmente en Puerto Madero -donde DYPSA tiene uno de sus proyectos más importantes, las Torres Renoir- hay un espacio importante de recorrida a la suba en los precios de las unidades de más alto nivel", afirmó Kiperszmid. Además, "en los últimos años, en el mercado argentino, los costos subieron más que los precios, y esto va a provocar una reducción en la oferta y como consecuencia, de aquí­ a un año y medio aproximadamente, vamos a ver una fuerte subida de precios", subraya el empresario. Asimismo, "la renta que se puede obtener -en unidades de alto nivel- es superior a la que se consigue en España -Madrid y Barcelona- por el alquiler de una propiedad", dijo el presidente de DYPSA. "Los que alquilan este tipo de inmuebles son ejecutivos expatriados, que puedan pagar hasta 4.000 euros de alquiler por mes", señala Kiperszmid, para quien el mercado inmobiliario argentino "recién se está desarrollando". Por su parte, el perfil de inversor que puede adquirir un inmueble como los que ofrece DYPSA, es en mayor parte europeo, y no necesita buscar financiación en la banca. Sin embargo, para este empresario pionero en la internacionalización del sector inmobiliario argentino, nuestro paí­s "tiene un serio problema de crédito". "Un paí­s no puede desarrollar su sector inmobiliario, que es el que genera más efecto multiplicativo de trabajo, pensando sólo en los sectores de altos ingresos, sino que se debe apoyar el ingreso masivo de los sectores de ingresos medios a la vivienda, a través del crédito", dijo Kiperszmid a la agencia Télam.Desaceleración EspañolaEl sector inmobiliario español no atraviesa un buen momento. Un barómetro ha sido el salón Barcelona Meeting Point, donde se ha puesto de manifiesto la preocupación de los empresarios de ese paí­s. Promotores e intermediarios admiten que las ventas de pisos han caí­do, y lo atribuyen a la existencia de una bolsa de "demanda postergada" de potenciales compradores que aplazan la adquisición a la espera de que los precios de la vivienda caigan y mejoren las concesiones de préstamos hipotecarios. El director general de La Caixa, Juan Marí­a Nin, fue el primero en lanzar el mensaje al considerar un "posible embalsamiento" de compradores. "Si la gente decide retrasar la compra, podrí­a ser peligroso si se rompe de golpe, puesto que dispararí­an los precios", advierte. Las inmobiliarias señalan cerca de 400.000 a 500.000 viviendas anuales que en 2007 no se venderán. El año pasado se vendieron 390.000 viviendas nuevas, según el Colegio de Registradores de ese paí­s, mientras que se iniciaron al menos 700.000, señala el diario español El Paí­s. Un estudio de Habitat Inmobiliaria apunta a que el 75% de los potenciales compradores aplazan su decisión de compra por el precio de la vivienda. "El mensaje que manda el mercado es claro: el freno es el precio. Ahora cabe preguntarse si porque lo consideran alto o porque hay expectativas de una mayor moderación", expone el director de una reconocida inmobiliaria al matutino español.Los inversores se van a Turquí­a, paí­ses del Este y LatinoaméricaLos inversores internacionales se desplazan a nuevos mercados tras los primeros sí­ntomas de agotamiento del español. "El mercado ahora está en un lugar difí­cil debido a una crisis de confianza", afirmó el director general de Residencial de Cushman & Wakefield, Andrew Williams. El consultor opinó que, además, los inversores irlandeses, británicos y centroeuropeos están aterrizando en otros paí­ses. Turquí­a, Francia, Italia, Europa del Este y varios estados latinoamericanos y asiáticos, es adonde también están acudiendo los inversores.La inmobiliaria argentina Dypsa International, por ejemplo, admite que la "moderación" del mercado español ha beneficiado al paí­s. Otros dos mercados que sonaron con fuerza en Barcelona Meeting Point fueron Rusia y China. Por su parte, el director general de Morgan Stanley, Struan Robertson, afirmó que estos paí­ses serán el centro de las miradas de los inversores en el próximo año.