La "euromanía" lleva a la moneda comunitaria a los máximos de 15 meses
La batalla que día a día disputan la divisa europea y el dólar es cada vez más encarnizada, pero según los últimos partes de guerra muestra cierta supremacía de la moneda comunitaria. Las cifras son contundentes, ya que en lo que va del año avanzó casi un 20% frente al dólar.
A nivel global esta discusión se traduce en cotizaciones que volvieron a quebrar el techo de los u$s1,50 por unidad, frente a los 1,4843 de la rueda anterior. Con este precio se ubican en el máximo nivel de los últimos quince meses.
Al trasladar esa cotización al plano local, ello se refleja en una cotización de $5,66 para la compra y $5,76 para la venta, lo cual implica valores récord. Ante esta situación, la demanda local, en especial la minorista, muestra cierta reacción que se traduce en un traspaso de monedas ante un dólar planchado.
Carlos Risso, de Notibancos.com, confirmó esta apreciación pues afirmó que "en general los mostradores de las casas de cambio muestran cierto aumento de afluencia de público interesado por el euro"
Una moneda fuerte no siempre es buena alternativaLa fortaleza del euro no es una buena noticia para Europa. En medio de la recesión que viven varios países de este continente, una moneda tan fuerte no ayuda a que la economía despegue, básicamente por el efecto de encarecimiento de los productos que se exportan al resto del mundo. Ayer, BusinessEurope, la federación de empleadores europeos, dijo que el euro ha llegado a un "umbral de dolor para la industria" en los 16 países que usan la moneda. "Estoy profundamente preocupado por los recientes acontecimientos en el tipo de cambio", señaló ayer Juergen Thumann, jefe de un grupo con sede en Bruselas. "Esta no es una buena noticia para el crecimiento en Europa", enfatizó.Como si fuera poco, las perspectivas no son alentadoras. La apreciación del lunes se dio después de que el Grupo de los 20 se comprometiera a mantener los estímulos económicos hasta que la recuperación esté asegurada.
La declaración reforzó la convicción de que EE.UU. y otros países mantendrán sus tasas de interés bajas por un período prolongado, haciendo que los inversores desecharan el dólar para comprar activos con mejores retornos como las acciones.
El presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, dijo que un dólar fuerte es "extremadamente importante" y Henri Guaino, asesor del presidente francés Nicolas Sarkozy, señaló que el euro a u$s1,50 era un "desastre", un día antes de que la moneda llegara a ese nivel por primera vez en 14 meses.El futuro de la divisa comunitaria"El euro seguirá sacandole varios cuerpos al dólar". Así lo explica UBS en un informe en el que recuerda como el billete verde pierde posiciones debido a las previsiones de elevados déficits fiscales.
El euro sigue sorprendiendo por su fortaleza después de que ayer estuviera a punto de marcar un nuevo máximo. Los expertos creen que la divisa europea seguirá haciendo gala de su firmeza. UBS asegura que "el euro disfruta actualmente de los fundamentales más fuertes y, por tanto, de más probabilidades de apreciarse. Por supuesto, las economías de la zona euro afrontan sus propias dificultades en las postrimerías de la crisis financiera", explica el escrito. El banco suizo recuerda como el dólar estadounidense "ha sido vapuleado últimamente estructuralmente.
"Creemos que el desalentador balance de América, especialmente el crecimiento de sus ya elevados niveles de endeudamiento público y su enorme déficit por cuenta corriente será un lastre para el dólar estadounidense en un futuro previsible", advirtió el informe.Además, UBS añade que esperan que EE.UU. presente una mayor inflación que otros países, otra carga más para el dólar. El hecho de que el dólar no levante cabeza no implica que vaya a tener un sustituto como moneda de referencia.
En ese sentido, el informe aclara que "no hay disponible un sustituto para el dólar en el comercio mundial y como divisa de reserva internacional. Como muchos países tienen sus ahorros en la moneda estadounidense, habría una resistencia universal a un colapso del dólar".
La firma considera que sólo una gran "convulsión geopolítica o económica" podría destronar al dólar estadounidense como divisa de reserva internacional.