Las investigaciones relacionadas a los distintos tipos de cáncer han sido el foco de la comunidad científica durante mucho tiempo. Y todavía lo son. Se trata de un campo muy amplio en el que se estudian desde curas hasta tratamientos, y en el camino se trata de prevenir y detectar más precozmente las patologías oncológicas que pueden afectar a los hombres y mujeres del mundo. 

En este sentido, una investigación reciente llevada adelante por el Karolinska Institutet en Suecia ha hecho otro pequeño avance en relación al tratamiento del cáncer. A través de una publicación en la revista Nature, el desarrollo de nuevos inhibidores dedicados a atacar parte de las funciones mitocondriales podría ser un nuevo salto en el tratamiento del cáncer. Esto debido a que su propuesta permitiría atacar directamente a las células cancerosas sin causar daño a las circundantes que estén sanas.

¿Qué tiene que ver el cáncer con las mitocondrias?

Según explican los autores del estudio, las mitocondrias son la fuente de energía principal de las células. Con ellas se produce una transformación de la energía de lo que las personas ingieren en la que necesita todo el organismo. En consecuencia, se tratan de partes vitales para nuestro funcionamiento. 

Los expertos creen que trabajar con inhibidores podría ser un tratamiento efectivo contra el cáncer

Sin embargo, hay un aspecto negativo de este dato. Las células cancerosas también se valen del poder de las mitocondrias para acelerar su crecimiento y propagación por el organismo. Es por esto que en general, estas se encuentren estrechamente relacionadas con los análisis del crecimiento y desarrollo de procesos tumorales.

Debido a esto, en ocasiones anteriores ya se han desarrollado alternativas que atacan a las mitocondrias para mermar la proliferación de las células cancerosas. El problema acá es que estas también son vitales para las otras células. Por esto, elegir trabajar inhibidores para las mitocondrias como un todo a forma de tratamiento no solo termina por frenar al cáncer, sino por causar daños a los tejidos sanos que lo rodean.

Así sería el nuevo tratamiento

Según explicó el sitio Tek Crispy, la idea de los equipos suizos del Karolinska Institutet y de la Universidad de Gotemburgo, junto a los expertos alemanes de la Sociedad Max Planck y el Lead Discovery Center GmbH, fue trabajar con un nuevo tratamiento para el cáncer que usara inhibidores específicos para partes de las mitocondrias.

Puntualmente, esos inhibidores se dirigen a la composición genética del cáncer y atacan el ADNmt. El rol que juega este gen está relacionado con la formación de nuevas mitocondrias. Si se lograra inhibirlo, las células cancerosas perderían apoyo y, como consecuencia, dejarían de dispersarse y multiplicarse.

Los inhibidores trabajarían sobre ciertos genes del cáncer

De acuerdo a los resultados del trabajo realizado en ratones de laboratorio, los investigadores lograron frenar los procesos de multiplicación celular del cáncer. Pero eso no fue el único descubrimiento. También lograron una disminución en el tamaño de los tumores que estos habían desarrollado. De esta manera, observaron una respuesta favorable al uso de los inhibidores específicos.

Hasta ahora, solo en animales

Es importante tener en cuenta que, de acuerdo a las conclusiones del estudio, se ha podido comprobar que es posible la creación de un tratamiento con inhibidores que ralentice el desarrollo del cáncer. Sin embargo, hasta el momento este tipo de técnica solo se ha probado en animales, por lo que falta el siguiente paso, que es averiguar si el modelo se puede repetir en el organismo humano.