Dólares debajo del colchón: ventajas y desventajas de las alternativas que maneja el Gobierno
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En un contexto de crisis económica persistente, caracterizado por la escasez de divisas, alta inflación y restricciones al acceso de financiamiento internacional, el Gobierno argentino, ha diseñado una serie de estrategias ambiciosas para captar los denominados "dólares debajo del colchón".
Estos ahorros, que los ciudadanos mantienen fuera del sistema financiero formal, representan una reserva potencial de cientos de miles de millones de dólares, según estimaciones económicas. La meta principal es clara: incrementar las reservas del Banco Central, estabilizar el tipo de cambio y sentar las bases para una recuperación económica sostenible en 2025.
Este "neo blanqueo" se presenta como una evolución de las amnistías fiscales tradicionales, buscando no solo regularizar fondos, sino también integrarlos de manera duradera al circuito económico.
El Gobierno ha delineado múltiples opciones para captar los dólares del colchón. A continuación, desde el Estudio Teresa Gomez - Carlos Quian & Asociados se detallan las opciones y se enumeran las ventajas y desventajas:
1. Amnistía fiscal y regulatoria
Una de las cinco opciones principales es un blanqueo con condiciones favorables, como un límite exento de impuestos (por ejemplo, USD 100.000 o USD 150.000) y tasas reducidas para montos mayores (potencialmente entre 5% y 15%). Esto permitiría a los ciudadanos declarar fondos sin enfrentar penalidades severas ni cuestionamientos sobre su origen.
Ventajas: Reduce las barreras para la regularización, especialmente para pequeños y medianos ahorristas. Podría generar una entrada rápida de divisas, estimada en decenas de miles de millones en los primeros meses, según proyecciones optimistas.
Desafíos: La ausencia de controles estrictos podría facilitar el lavado de dinero, un riesgo que el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) observa de cerca. Además, tasas demasiado bajas podrían no compensar la pérdida de recaudación fiscal, mientras que tasas altas desincentivarían la participación.
Ejemplo: Si un individuo declara USD 150.000 con un exento de USD 100.000 y una alícuota del 10% sobre el excedente, pagaría USD 5.000, un costo razonable que podría atraer a muchos.
2. Incentivos para el sector agropecuario
También se dio a conocer que se planea incluir al sector agropecuario, ofreciendo beneficios como exenciones fiscales o la posibilidad de usar dólares blanqueados para comprar maquinaria sin restricciones cambiarias.
Ventajas: El campo, uno de los pilares de la economía argentina, posee una capacidad significativa para aportar divisas (solo en 2023, las exportaciones agropecuarias superaron los USD 35.000 millones). Incentivar a los productores podría generar un flujo sostenido de dólares.
Desafíos: La implementación requiere coordinación con provincias y entidades agrícolas, además de garantías contra futuros cambios normativos. La desconfianza histórica del sector hacia el gobierno podría limitar el impacto.
3. Flexibilización del uso de dólares
Se menciona la simplificación de regulaciones para permitir que los dólares ingresados se usen libremente en transacciones locales, eliminando trabas burocráticas.
Ventajas: Fomentaría la circulación de divisas en la economía formal, reduciendo la dependencia del mercado paralelo. Podría impulsar sectores como el inmobiliario, históricamente dolarizado.
Desafíos: Sin un control adecuado, esta medida podría disparar la demanda de dólares, depreciando aún más el peso y alimentando la inflación. Además, requiere una reforma profunda del cepo cambiario, un paso políticamente sensible.
Si se liberan USD 20.000 millones y el 50% se destina a consumo, la presión sobre el tipo de cambio podría aumentar un 20% en el corto plazo, según cálculos basados en modelos económicos estándar.
4. Instrumentos Financieros en Dólares
Se reporta la creación de bonos o fondos de inversión en dólares con rendimientos atractivos (por ejemplo, tasas del 4%-6% anual), disponibles para quienes depositen sus divisas en bancos.
Ventajas: Ofrece una alternativa rentable y segura para los ahorristas, incentivando la bancarización. Podría canalizar fondos hacia proyectos de infraestructura o energía, sectores con alta demanda de inversión.
Desafíos: La credibilidad de estos instrumentos depende de la solvencia del Estado y los bancos, ambos cuestionados tras décadas de crisis. Una tasa insuficiente frente a la inflación en dólares (globalmente baja, pero relevante) podría ser poco competitiva.
En 2016, los bonos en dólares del blanqueo ofrecieron tasas del 1%- 2%, pero el contexto actual exige rendimientos más altos para competir con opciones extranjeras.
5. Campañas de concientización
Se sugiere que el Gobierno podría lanzar campañas para promover la banca formal, resaltando la seguridad y los beneficios de depositar ahorros en el sistema.
Ventajas: Aborda la raíz cultural de la desconfianza, un factor clave para el éxito a largo plazo. Podría ser efectiva si se combina con garantías tangibles, como seguros de depósitos ampliados.
Desafíos: La historia de intervenciones estatales (ejemplo: confiscación de depósitos en 2001) dificulta el cambio de percepción. Sin resultados económicos visibles, estas campañas podrían ser vistas como propaganda.
Costo-Beneficio: Una campaña masiva podría costar USD 50 millones, pero su retorno dependerá de la confianza generada, difícil de cuantificar.
Para optimizar el "neo blanqueo", se proponen las siguientes medidas:
1. Fases de Implementación
Iniciar con un blanqueo para montos menores (hasta USD 50.000) con cero impuestos, seguido de una segunda fase para sumas mayores con alícuotas progresivas. Esto permite testear la respuesta y ajustar incentivos.
2. Garantías Legales robustas
Promulgar una ley que prohíba la confiscación o restricción de fondos blanqueados por al menos 10 años, respaldada por un seguro de depósitos ampliado a USD 250.000 por cuenta.
3. Cumplimiento internacional
Diseñar el blanqueo en consulta con el FMI y el GAFI, incorporando auditorías bancarias y trazabilidad de fondos para evitar riesgos legales.
4. Incentivos a largo plazo
Ofrecer tasas preferenciales (ejemplo: 5% anual en dólares) a quienes mantengan sus fondos en el sistema por más de dos años, combinadas con deducciones fiscales para inversiones productivas.
5. Monitoreo y transparencia
Crear un tablero público que informe en tiempo real la entrada de dólares, su destino y su impacto en las reservas, generando confianza mediante datos verificables.