La Unión Europea fomentó la creación de una vasta red de centros de negocios con el fin de facilitar el comercio entre empresas europeas y argentinas. Se trata de los "Eurocentros": en pocos años esta dinámica permitió que miles de firmas locales realizaran contactos con sus pares del viejo continente.

Angelos Pagkratis, jefe de la Delegación de la Comisión Europea, describe cómo funciona el programa de cooperación lanzado por las autoridades europeas y explica de qué manera pueden verse favorecidas las empresas argentinas para ingresar a un mercado que exige, ante todo, que sus productos se adapten a sus normas.  

-¿Cuál es el principal aspecto que las empresas argentinas deben cuidar a la hora de exportar a la Unión Europea?

-Un aspecto fundamental a la hora de pensar en realizar una operación es todo aquello referente a las reglas en el comercio. Es un gran desafí­o para ahora y para el futuro. De hecho, aunque parezca técnico es central, porque hay una evolución en el comercio mundial hacia tener más y más reglas. Reglas de calidad + de producto, de protección del consumidor, sobre los organismos genéticamente modificados, reglas fitosanitarias, veterinarias.

Este es un punto clave, teniendo en cuenta el futuro de las negociaciones multilaterales y también teniendo en cuenta las relación bilateral entre la UE y la Argentina. -¿Pero este camino hacia más reglas no traba al comercio exterior?-Es importante ver todas estas reglas de manera positiva y constructivas, no negativas. De hecho, todas estas reglas tienen como consecuencia mejorar la calidad y el valor añadido del producto a exportar. Tiene que ser visto como una oportunidad y no como un obstáculo. Eso es en el caso, por ejemplo, de lo referido a las reglas veterinarias. Es una manera para agregar valor al producto.

Desde la UE hay una voluntad de facilitación del comercio, de ninguna manera las reglas apuntan a trabar el comercio internacional, es por eso que estas reglas deben estar explicadas.-¿En dónde residen las oportunidades para las empresas argentinas?

-Las oportunidades tienen diferentes dimensiones, ya que las posibilidades existentes son diferentes en función de los sectores o de los tamaños de las empresas. Cuando nos referimos a los sectores donde las empresas argentinas tienen posibilidades estamos presentando los desafí­os del futuro. Sabemos que el desafí­o de la Argentina es el de desarrollo industrial y tecnológico que permita agregar valor a las exportaciones.

En el caso de las Pyme, hay otra problemática; se necesita una facilitación de la interacción entre ambos lados, de la cooperación internacional indispensable para el desarrollo del sector Pyme, para que las Pyme puedan tener acceso a la inversión, a la tecnologí­a y al desarrollo.-¿Cómo se logra que las Pyme obtengan ese acceso? Las Pyme tienen su lógica propia de funcionamiento. Es un desafí­o propio que tiene que ver con su tamaño. Nuestra acción es la de facilitar el acceso a contrapartes posibles, ya sea de comercio o de inversión.-¿Qué programas tienen para eso?  -Tenemos un programa especí­fico de cooperación que se llama Programa Al-Invest, que tiene 8 Eurocentros en la Argentina que trabajan sobre la base de una red que une América latina con la Unión Europea, denominadas Coopecos, que son alrededor de 300 cámaras de comercio de la Unión Europea que crean una red permanente que organizan eventos, encuentros industriales, rondas de negocios.

Asimismo, existe una red de comunicación permanente. Es decir, que cada empresa que tiene necesidad de algún contacto o posibles contrapartes en Europa puede usar esta red para obtener esta información y obtener una facilitación a la hora de exportar.-¿Dónde se obtiene esta información?

-En los 8 Eurocentros que hay en la Argentina. Esta es una acción de cooperación descentralizada. Asimismo, tienen que dirigirse al que le corresponda por territorio, porque tienen competencia geográfica.

Este serí­a un buen punto de partida para la búsqueda. Por ejemplo, desde 1994 al 2004, ya se organizaron 76 encuentros y más de 7.000 empresas argentinas participaron de estos y otros encuentros en América latina y Europa.

Lo más interesante de esta experiencia es que la Argentina tiene una dinámica de uso de esta red de comunicación muy buena, quizás la mejor de América latina. Otro punto relevante de la experiencia en esta red es que las Pymes europeas tienen un importante interés para interactuar con contrapartes argentinas. Este interés nunca disminuyó, incluyendo en los años difí­ciles de la Argentina.

A fines de 2004 se realizó, a través de esta red, y con la Cámara Argentina de Comercio, un evento llamado Al - Partenariat en el que participaron más de 1.000 empresas locales y más de 200 empresas europeas. Fue la ronda de negocios más grande que se organizó en el paí­s entre las Pyme.

-¿Lo evaluaron?

-La evaluación toma más o menos un año. Normalmente, los encuentros son para lograr futuros negocios. Pero el clima general fue muy bueno. La proximidad cultural con los argentinos ayudó. No es algo abstracto a la hora de hacer negocios.  La comunicación es fácil, la gente se entiende, la exploración de las oportunidades se hacen de manera muy buena y muy eficaz, hay una comprensión mutua muy importante y en general, esto es muy bueno, porque se logran negocios a largo plazo, que es lo que nosotros buscamos: relaciones en el tiempo.¿Que utilidad tiene el Helpdesk para los exportadores? El Helpdesk es una base de datos que creo la UE para dar a los exportadores de terceros paí­ses toda la información que necesitan para entrar el mercado de la Unión. Es información técnica sobre estándares, reglas, etc. ¿Es utilizado por los exportadores argentinas?

Efectivamente, nuevamente vemos como los exportadores locales son los más proactivos. Tenemos más de 15.000 contactos por mes de parte de los exportadores argentinos. Este es el uso más grande de parte de una paí­s que no sea miembro de la UE.¿Existen otros aspectos en los que la UE colabore con las exportaciones argentinas? Tenemos un programa con el INTI para mejorar la calidad de algunos productos que exporta la Argentina, como por ejemplo miel o madera. Para crear laboratorios que puedan certificar la calidad de la exportación, que estén al nivel que se necesita para garantizar el acceso al mercado.

Esperamos tener una cooperación sobre las reglas veterinarias, que es un nuevo desafí­o de la relación con la lógica de la facilitación del comercio.La ampliación de la UE sumó paí­ses que tienen como oferta productos similares a los que ofrece la Argentina, ¿esto afectó la relación comercial con la Argentina?

La inquietud es legí­tima, pero no corresponde a la realidad. Los lados positivos de esta nueva integración de paí­ses son más importantes que los negativos. Hay alrededor de 65 millones de consumidores nuevos en la UE, y las exportaciones argentinas tienen acceso directo a esos mercados.

La ampliación se hizo sin un aumento en las ayudas a la agricultura. Aumentó en un 40% los agricultores y se redujo la ayuda por agricultor, porque el presupuesto agrí­cola quedó igual.

Además, todos los expertos reconocen que, aunque estos paí­ses tengan potencial agrí­cola, su productividad es muy baja, y no tienen una producción competitiva con las grandes exportaciones argentinas. Los beneficios de la ampliación de la UE son más importantes que una competencia posible entre las dos producciones agrí­colas.

David Cayón

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