Si bien manifestó algunas reservas respecto de las motivaciones de la causa y fue duro a la hora de referirse a la figura del arrepentido, el ex juez de la Corte Suprema de Justicia y hoy juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos Raúl Eugenio Zaffaroni aseguró que las fotocopias de los cuadernos de la corrupción K pueden ser indicios, sobre todo si logran comprobarse los hechos que allí se mencionan.

Zaffaroni dijo que trabajar con copias "no es ningún problema": "La fotocopia se puede tomar como un indicación de los datos que están consagrados en un documento y verificarlos".

Y es que si bien "la fotocopia es un medio perfectamente vulnerable, porque se puede falsificar tranquilamente" y "es difícil de peritar", se puede tomar como un indicio, dijo en Radio 10.

Así, el exjuez de la Corte Suprema ejemplificó: "Si en una fotocopia yo digo que el cadáver de una víctima se encuentra enterrado en tal lado, y van ese lado y encuentran el cadáver de la víctima, es un indicio".

En ese sentido, añadió que hallar el dinero sería una prueba importante: "Si alguien le da un millón de dólares a otro, en algún lugar lo tendrá guardado, lo tendrá depositado, lo habrá mandado a las Islas Caiman, no tengo la menor idea, pero bueno… De cualquier manera este tipo de maniobras que se traducen en dinero, el dinero tiene que estar en algún lado".

En los denominados cuadernos de la corrupción K, ocho anotadores escritos por el chofer del ex subsecretario de Coordinación y Control de Gestión del Ministerio de Planificación Federal Roberto Baratta, se relata con detalles de días, horas y lugares la entrega de bolsos y sobres con dinero de coimas relacionadas a la contratación de Obras Públicas.

Al momento, la causa tiene 36 imputados, 17 de los cuales están detenidos.