Julio "Chocolate" Rigau, el puntero peronista que fue capturado con 48 tarjetas de débito de empleados de la Legislatura bonaerense en su poder, se negó a declarar en los tribunales de La Plata. Rigau es investigado por presunto fraude y asociación ilícita y la causa es impulsada por la fiscal Betina Lacki.

Rigau estuvo 20 minutos en la fiscalía y se negó a declarar. La causa avanzó con la apertura de su teléfono celular que derivó en evidencias sobre los jefes políticos del puntero, a quien le entregaba la plata que sacaba y el verdadero rol de los dueños de las tarjetas de débito. Para la justicia no son empleados públicos que le daban el plástico para que Rigau les cobre el sueldo, sino "ñoquis" que no trabajan y aportan su sueldo a la política.

La causa está hace unos días en suspenso, mientras que se define un pedido de nulidad presentado por los abogados de Rigau. El recurso fue elevado a la Sala III de la Cámara de Apelaciones de La Plata, la misma que en su momento declaró la nulidad de manera irregular, pero dos de sus integrantes, Juan Alberto Benavides y Alejandro Villordo, se excusaron y recién ayer fueron reemplazados por Miriam Patricia Ermili y Ernesto Julián Ferreira.

Hasta que la Cámara no resuelva, no habrá definiciones sobre los pedidos de detención que hizo la fiscal la semana pasada. La fiscal Lacki también pidió la detención de los 48 dueños de las tarjetas que tenía Rigau cuando fue detenido.

Rigau, detenido el 13 de septiembre último con 1.270.000 pesos cuando sacaba dinero con 48 tarjetas de débito ajenas de un cajero automático del centro platense, había sido liberado por Benavides y Villordo, dos camaristas que el 21 de septiembre pasado anularon la causa porque argumentaron que la policía lo había metido preso sin causa, violando su intimidad. Pero ese fallo fue revocado y la justicia dispuso otra vez la captura del puntero, que está preso desde el 15 de octubre.

Al puntero del PJ lo detuvieron el 9 de septiembre en las máquinas expendedores de billetes del Banco Provincia

Pedido de detenciones

A fines de octubre, el juez de Garantías, Federico Atencio, rechazó el pedido de eximición de prisión de los 48 "empleados fantasmas" de la Legislatura bonaerense en la causa que tiene como principal involucrado al puntero del PJ, Julio "Chocolate" Rigau. De esta manera, quedaron cerca de un eventual arresto.

La presentación la había hecho la Defensoría oficial y abarcaba a los dueños de las tarjetas de débito a los que el puntero del PJ, actualmente detenido, les cobraba el sueldo.

El juez tomó la misma medida con el concejal de La Plata por el Frente Renovador, Facundo Albini, que fue Director de Control y Gestión de Secretaría Administrativa en la Cámara de Diputados bonaerense, y reportaba a Rigau.

De acuerdo con el testimonio del militante Emiliano Funes, Rigau y Albini mantenían contacto diario. Funes dijo que el puntero "iba todos los días a verlo a Facundo" y contó que él mismo lo había visto a Rigau entregándole plata al concejal platense.

Los supuestos trabajadores de la Cámara de diputados provincial le habían pedido a la Justicia seguir en libertad mientras dure la investigación pero Atencio les negó esa posibilidad, luego de que la fiscal, Betina Lacki, se opusiera a la medida planteada por la Defensoría.

Entre quienes declararon ante la Justicia hay una decena de testigos que figuran como empleados de la Legislatura provincial, que dijeron que conocen al puntero del PJ "desde hace muchos años", negaron saber cuál era la actividad de Rigau. A su vez afirmaron que "es electricista" y que el detenido tenía las tarjetas de débito en su poder porque "es de confianza".

Con el pedido de eximición de prisión de los 48 empleados fantasma de la Legislatura bonaerense, la Defensoría oficial había buscado anticiparse a una medida del juez Atencio de una imputación por "la posible comisión de un delito por el cual procedería su detención".