La Justicia tramita un amparo colectivo contra la empresa de micros Chevallier por posible discriminación

La Justicia laboral tramita un amparo colectivo contra la empresa La Nueva Chevallier debido a que un grupo de mujeres que aspiran a trabajar como conductoras de transporte público de pasajeros aseguran que aprueban todas las evaluaciones, pero luego son discriminadas por "razones de género".

La demanda la inició María Dolores Guldris, de 38 años, quien vive en Rosario. La chofer pidió que "se ordene el cese de las prácticas" que discriminan a las mujeres en general y a ella en particular en la contratación de personal.

También solicitó la adopción de medidas de acción positiva para remediar los efectos discriminatorios. La causa se inició en abril y en septiembre la jueza laboral Stella Maris Vulcano ordenó inscribir la acción en el Registro Público de Procesos Colectivos. Hace unos días, dispuso que la Defensoría General de la Nación, que representa a Guldris, difunda el caso para ver si hay otros similares.

Nueva Chevallier S.A. fue demandada "por incurrir en la práctica discriminatoria de no contratar mujeres como conductoras de transporte público de pasajeros", ya que además del caso de María Dolores se sumaron al menos otras tres.

¿Solo varones al volante?

"¿Por qué cuando tomamos colectivos u ómnibus solemos ver sólo varones al volante, pese a la vocación de muchas mujeres por trabajar en el rubro?, se preguntó la damnificada, que es conductora profesional y está habilitada para manejar vehículos de pasajeros y de cargas, urbanos e interjurisdiccionales. Dolores comenzó a trabajar en el rubro del transporte en 2019 y desde entonces condujo taxis, colectivos urbanos y camiones.

Luego de desvincularse de su empleo como transportista de cargas peligrosas en 2023, buscó trabajo activamente en el rubro del transporte de colectivos, en especial en el de larga distancia (porque brinda mejores mediciones laborales) pero como les ocurre a otras mujeres, no logró insertarse en ese mercado laboral y actualmente solo consigue hacer alguna suplencia.

En los últimos años, realizó cursos dictados por la Municipalidad de Rosario (avalados por la Universidad nacional de esa ciudad) y uno muy específico de 220 horas, que fue promovido por la fabricante de camiones Scania. Además, desde ese mismo año está inscripta en el Registro de Mujeres Aspirantes a Choferes de Colectivo (REMACC), dependiente de la Secretaría de Transporte y creado en 2019 tras otra demanda similar a esta.

En 2023, Nueva Chevallier, empresa que entre múltiples destinos del país conecta Buenos Aires con Rosario, advirtió que Guldris solicitaba trabajo a través de una publicación en la red Linkedin y la contactó.

Desde Recursos Humanos le pidieron que fuera a la sede de la firma en el barrio porteño de Barracas para una evaluación psicológica y superada esa instancia, viajó nuevamente desde Rosario y rindió la prueba de manejo con éxito.

En la misma ocasión, participaron del proceso de selección al menos otras tres mujeres.

Dolores presenció la prueba de manejo de todas y observó que pudieron completar el circuito sin que se produjera ningún choque, roce ni falla alguna. Pero pese a que tuvo la percepción de que tanto su evaluación como la de sus compañeras fueron exitosas, ninguna de ellas fue contratada como chofer y la totalidad de los puestos vacantes en ese momento fueron cubiertos íntegramente por varones.

Este dato surge de un informe de Ia AFIP sobre altas y bajas del año 2023 que los abogados acompañaron con la demanda: Nueva Chevallier S.A contrató bajo la categoría "conductores de corta, media y larga distancia" a un total de 70 hombres y a ninguna mujer.

Un amparo que incluye a mujeres de todo el país

"Todas estas situaciones me llevan a sospechar que la decisión que adopta la empresa para contratar a choferes está sesgada en razones de género, pues ante candidatos que acreditaron idoneidad, solo incorpora a varones y descarta a las mujeres", remarcó la chofer en la presentación.

Dolores también citó el caso de otras cuatro colegas que enviaron su CV a Nueva Chevallier, pero nunca fueron llamadas.

El defensor público de la conductora, Sebastián Tedeschi, contó que en el amparo colectivo "están incluidas todas las mujeres del país que hayan pasado por una situación similar" y que "el juzgado está comunicando su existencia a distintas organizaciones por si quieren sumarse a la acción".

"El amparo es una vía rápida, pero en el caso de los amparos colectivos implican tramitaciones como esta", explicó el abogado, que destacó que el objetivo final es que la empresa contrate a un 30% de mujeres como choferes, ya que la firma forma parte de un mercado que se "resiste mucho" a incorporar personal femenino.

En ese sentido, precisó que en este tipo de casos "se invierte la carga de la prueba y son ellos quienes deben probar que no discriminan".

Son más de 600 las mujeres que quieren conducir colectivos

De la demanda iniciada por Guldris surgen datos relevantes: en noviembre de 2024, se encontraban inscriptas como aspirantes a chofer de colectivo 272 mujeres residentes en el AMBA y 373 del resto del país. Además, una cantidad importante cuenta con la licencia de conducir habilitante para la tarea, a pesar de que son altamente excluidas del sector.

En efecto, el transporte está entre los sectores más "masculinizados" de la economía nacional. Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) correspondientes a 2022, mientras que en el total de la economía nacional las mujeres ocupaban el 43,4% de los puestos de trabajo, en el sector "Transporte, almacenamiento y comunicaciones" su participación era solo del 15,8%. Más en detalle, en el sector de "Transporte ferroviario y automotor y por tuberías" las mujeres ocupaban sólo el 7% de los puestos de trabajo (22.678 de 323.086), de acuerdo con lo informado por la Secretaría de Trabajo.

Esa distribución se acentúa todavía más cuando se trata del transporte de pasajeros. La proporción de mujeres empleadas bajo la categoría "conductores de corta, media y larga distancia" en las empresas de transporte público de colectivos es ínfima: un 0,25% del total. De las 29.444 personas empleadas, había solo 73 mujeres. Y en el caso de la empresa demandada se determinó que contrató solo a una mujer como chofer y lo hizo después de iniciado este amparo.