Facturas truchas: allanaron un estudio contable

Después de indagar al titular de Cunumí­ por el caso Skanska, se allanaron también dos sociedades dudosas. La Justicia aceptó como prueba las grabaciones
Por iProfesional
LEGALES - 21 de Julio, 2007

El juez federal Guillermo Montenegro allanó el jueves a última hora las oficinas de un estudio contable y de dos sociedades dudosas que habrí­an colaborado con la provisión de facturas para que la multinacional Skanska simulara gastos y con el cobro de los cheques correspondientes.Estos allanamientos fueron realizados en el estudio del contador Enrique Rubinsztain y en las firmas Conalbe SA y Comunications & Business, según informaron fuentes judiciales. El juez secuestró documentación, computadoras y discos rí­gidos. Los tres nombres habí­an sido señalados ante Montenegro por Raúl Orsini y serí­an importantes en la reconstrucción de la ruta de las coimas. Orsini es titular de Cunumí­, una de las empresas que figura en el expediente junto con otras 22 que le aportaron facturas truchas a Skanska para disimular pagos irregulares por unos $17 M en las obras de dos gasoductos.Por su parte, Orsini admitió que dio comprobantes a Skanska por servicios que no prestó, aunque aseguró que lo hizo de buena fue y terminó engañado y reconoció que en alguna oportunidad cambió los cheques de la compañí­a sueca por dinero en efectivo, una de las razones de su citación como imputado, tal como informa hoy el diario Página 12.El resto de los cheques, dijo, tení­an como supuestos destinatarios a Conalbe y Comunications & Business, y sostuvo que Cunumí­ no es un "sello de goma" sino una contratista con trayectoria.Según su relato, a mediados de 2005 fue contactado por Rubinsztain como representante de Conalbe SA y Comunications & Business. Estas dos sociedades, le habrí­a dicho ese contador, habí­an acordado trabajos con Skanska, pero no calificaban con el nivel exigido. La propuesta era –según Orsini– que Cunumí­ figurara formalmente como contratada porque tení­a capacidad técnica y financiera suficiente, pero los trabajos en teorí­a los realizaban las otras dos. Les daban, puntualizó, una comisión del 10 por ciento y la chance de quedar como proveedora de Skanska, publica el matutino porteño.El arreglo era que Cunumí­ facturaba el 100%, retiraba los pagos en cheques de la Banca Nazionale del Lavoro y luego depositaba el pago (90%) para Conalbe y Comunications. Lo que él mismo cambió por "cash", o parte, habrí­a vuelto a Skanska.Aquí­ es donde, en esta indagatoria, entra en escena otro intermediario: el contador Alfredo Greco, que ya estuvo preso en la investigación del caso en el fuero penal tributario. El juez Javier López Biscayart lo señaló como nexo entre Skanska y la sociedad fantasma Infiniti Group, una de las proveedoras de facturas truchas. Orsini aseguró que Greco era quien le avisaba en nombre de Skanska cuando tení­an un pago. Así­, Montenegro estarí­a juntando elementos para sumar otros imputados y llamados indagatoria. Parece que tendrá trabajo para las vacaciones de invierno.Validan las grabacionesLas grabaciones en las que dos gerentes de Skanska reconocen el pago de sobornos al Enargas y a Nación Fideicomisos son válidas, según lo manifestó Montenegro en una resolución que dictó la semana pasada y se divulgó ayer. La nulidad de esta prueba habí­a sido planteada por varios de los imputados, que apelarán ante la Cámara Federal.La Sala I de este tribunal respaldó a Montenegro en otra cuestión delicada. Los abogados del ex titular del Enargas, Fulvio Madaro, se quejaron porque el juez no los dejó ver las testimoniales, como establece el Código Procesal. La Sala I de la Cámara recordó que en la etapa sumarial -antes del juicio- los defensores solo podrán asistir a las declaraciones testimoniales de quienes "por su enfermedad u otro impedimento sea presumible que no podrán concurrir al debate", según informó la agencia Telam.El tribunal justificó además la negativa de Montenegro con "los ostensibles antecedentes actuariales que dan cuenta de una investigación compleja y con gran cantidad de partes".En tanto, los camaristas Eduardo Freiler, Gabriel Cavallo y Eduardo Farah consideraron que la determinación del juez "permite interpretar que ha querido evitar una morosidad que siempre es un riesgo en un proceso de estas caracterí­sticas".

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