El campo exigió la inmediata derogación de la resolución 125

Luego de la euforia tras la votación en el Congreso, en la que se rechazó el proyecto oficial de retenciones móviles, los cuatro titulares de las entidades rurales se reunieron en Palermo para analizar los próximos pasos a seguir. El primero en tomar la palabra fue el presidente de la Sociedad Rural (SRA), Luciano Miguens, quien sostuvo que "pensábamos que iba a ser muy dificil que se lograra el rechazo. En diputados perdimos por cinco o seis votos y pensábamos que en el Senado iba a ser más complicado porque el bloque oficialista era fuerte. Pero tuvimos un éxito inesperado al lograr un empate, cuando estimábamos que no í­bamos a tener posibilidades". "El campo tiene que tener presencia en el Parlamento. La lucha sigue, seguiremos con la instancia judicial, esperamos que el Poder Ejecutivo derogue esta resolución y nos podamos sentar muy pronto a encontrar una resolución de consenso", sostuvo el titular de SRA, quien luego agregó que "le costó a (Julio) Cobos su decisión, pero votó con su corazón, a pesar de que sabí­a que estaba en contra de la presidencia".Pedido firmeActo seguido, los ruralistas leyeron un comunicado en el cual destacaron que, "basándonos en la palabras del ex presidente de que se acatarí­a al Congreso, esta comisión reclama que se derogue de manera inmediata la resolución 125", agregaron. Sobre este punto, el presidente de la Federación Agraria (FAA), Eduardo Buzzi, recalcó que "lo que esperamos del Gobierno es que se haga cargo de lo que dijo el ex Presidente de que iban a acatar lo que dijera el Congreso. Por eso esperamos la derogación de algo que trajo tantos problemas y una discusión en materia de derechos de exportación.Después, envió un mensaje a todos los ruralistas del paí­s: "Hoy, el que vende granos lo hace bajo la resolución 125, por eso les decimos a los productores que vendan lo mí­nimo posible porque no está claro en qué condiciones estamos vendiendo los granos", sostuvo Buzzi. En este contexto, al ser consultado sobre si las entidades están abiertas a retomar las negociaciones, Buzzi aseguró que "si nos invitan al diálogo, absolutamente sí­ irí­amos". Al respecto, sostuvo que "lo lógico serí­a ponernos de acuerdo, modificar esa resolución, pero mientras tanto sigue vigente. Es altamente probable que pasemos a la judicialización del tema". PropuestasLuego del pedido, Mario Llambí­as, titular de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), aseguró que "pedirán la constitución de un consejo federal ampliado, donde estén las provincias y la Comisión de Enlace". El dirigente sostuvo que también pretenden crear una mesa agropecuaria nacional, que tiene por objetivo solucionar los problemas del sector de la carne, lecherí­a, trigo, maí­z, economí­as regionales. También, abogó por una ley de emergencia agropecuaria que permita mantener la economí­a del interior. PerspectivasDe acuerdo al presidente de Federación Agraria, "en el Senado y Diputados hay proyectos que se acercan bastante a esta mesa de enlace. Para nosotros es importante es que haya una fuerte segmentación y no una polí­tica de reintegros". Al respecto, destacó el proyecto de Carlos Reutemann, que "se ocupa de la segmentación". También dio el visto bueno a "otros proyectos de distintos legisladores mejoran el del Gobierno, por eso lo bueno serí­a poder formar uno solo de eso. Nadie niega que haya que pagar retenciones, pero pedimos que sea soportable". TemorHay expectativas del sector agropecuario ante posibles medidas del Gobierno que perjudiquen la venta al exterior de productos nacionales.Aunque se mostraron mesurados, los representantes del campo no descartaron la posibilidad de que esto ocurra. Fuentes del sector cerealero dijeron que si el Gobierno se pone más estricto o dificulta la exportación de productos agrí­colas, el negocio desaparece. "Es lo único que le faltarí­a, más difí­cil es imposible", señalaron."Es bastante complicado que se pueda ser más estricto. El próximo paso serí­a cerrar la exportación. Si se pone más duros, el comercio al exterior de cereales y oleaginosas deja de existir", explicaron a infobaeprofesional. com.Las mismas fuentes dijeron que "el negocio exportador, como tal, está prácticamente destruido, paralizado, sólo se cumplen compromisos antiguos, no hay operaciones nuevas. No se puede hacer un contrato si no sabes si lo van a autorizar".Sin embargo, esperan que esto no suceda, ya que esta situación terminarí­a no solo dejando al paí­s fuera de los mercados internacionales demandantes de materias primas, sino que perjudicarí­a el consumo interno de productos agroindustriales.Omar Barcheta, secretario gremial de Federación Agraria, señaló a infobaeprofesional.com que ante una represalia contra el campo por el apoyo a la no aprobación de la resolución 125 "el sector podrí­a volver a reaccionar".Sin embargo, el dirigente estimo que no habrá represalias del gobierno hacia el agro."Entendemos que no tendrí­a que hacerlo. Espero que no se tomen medidas sin ser consultadas. Veremos cómo seguimos", dijo Barcheta.Miguel Saredi (presidente del Grupo Pampa Sur) tampoco fue contundente en sus declaraciones no cerró la puerta a posibles represalias.Saredi señaló que esperaba que el Gobierno no trabe las exportaciones.El presidente de Pampa Sur dijo que las ventas al exterior deben ser vistas como un beneficio y que "la Argentina tiene muchas posibilidades de convertirse en una potencia exportadora"."Lo importante es tener una buena polí­tica para el sector agroindustrial. Si se logra esto, la Argentina no tiene techo. Porque la demanda de materias primas, sobre todo de Asia, va seguir creciendo por muchos años", explicó Saredi.En cuanto al incremento de requisitos para exportar, Barcheta agregó que "al insistir con estas cuestionas al Gobierno le fue muy mal. Espero que apuesten al diálogo. Tienen que encontrar una forma distinta de gestionar la polí­tica ahora que no le fue bien".El dirigente agregó que "esto es una prueba de que si el Gobierno dialogaba, no hubiese pagado el costó polí­tico que pagó".El analista polí­tico, Rosendo Fraga, explicó que "si no hay una actitud distinta del gobierno para el campo, seguramente van a seguir reclamando. Pero tienen que organizarse para saber de qué forma hacerla. Van a tener que seguir con sus peticiones, pero sin cortes de ruta".Para el especialista, "el desafí­o para el sector es seguir la protesta sin que esta se desborde".