Qué dijo el fundador de Bluesmart sobre la caída del negocio de las valijas inteligentes
Hasta el año pasado, la empresa creadora de las valijas inteligentes, Bluesmart, era la estrella entre las startups tecnológicas en la Argentina.
Fue apoyada en principio por pequeños inversores a través de crowdfunding, hasta que luego recibió desembolsos por parte de importantes aceleradoras internacionales.
Hasta que en diciembre del año pasado, las compañías norteamericanas -American Airlines, Delta y Alaska Airlines- anunciaron como medida de seguridad que ya no permitirían despachar valijas que tuvieran una batería de litio incorporada.
Las aerolíneas también informaron que el equipaje de mano que se lleve en la cabina y que tenga esta tecnología deberá ser apagado al subir al avión.
Fue el golpe de gracia para la compañía fundada por los argentinos Tomás Pierucci, Diego Saez-Gil, Martín Diz y Alejo Verlini, que recientemente anunció que fue vendida a la estadounidense Travelpro. Llevaba vendidas unas 70.000 valijas, pero debió interrumpir sus ventas.
"Nosotros habíamos diseñado un producto en base a las regulaciones vigentes y en medio del juego nos cambiaron las reglas", contó Pierucci, expresidente de Bluesmart a La Nación.
"Dejamos de tener ingresos y, al mismo tiempo, la gente empezó a pedir reembolsos. Intentamos pivotear pero, al tratarse de un producto físico, los cambios toman 18 meses, eso requiere dinero y esta regulación mató nuestro acceso al capital", remarcó.
El empresario argentino reconoció en diálogo con Comunidad de Negocios que la veda para este tipo de valijas fue "un baldazo de agua fría", y quiso resaltar el apoyo recibido por emprendedores de todo el mundo.
"Hay que poner la cara y salir adelante. Podríamos haber tirado una bomba y desaparecer y, sin embargo, estuvimos hasta el último momento para ver cómo resolver el problema", sentenció.
Por último, no dejó de elogiar a Travelpro: "Encontramos una de las mejores compañías del mundo en equipaje, con mucho prestigio y más de 50 años en Estados Unidos. Se interesó en la empresa desde el primer día ,y por suerte, pudimos hacer esta venta que fue buena para una parte de los inversores, los empleados y los clientes, porque se van a hacer cargo de las cosas que pasen de acá en adelante".