El resultado de las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) cayó como un baldazo de agua fría tanto en el Gobierno como en el sector empresario y entre especialistas y consultores, que no previeron semejante cambio en el escenario y su consiguiente impacto en la economía.

En este marco de renovada incertidumbre y de cara a las elecciones de octubre, en la Usina del Arte del barrio de La Boca se está llevando a cabo esta semana un evento de la organización IDEA, que reúne no solo a referentes del arco político sino también a empresarios y especialistas, que en distintos paneles analizan el estado actual y perspectivas a futuro a nivel económico, social, tributario, legal, etc.

Titulado "La Semana del Management", el evento de IDEA reunía una nutrida agenda de funcionarios de Cambiemos. Podría haber habido una ola de cancelaciones, pero pese a la derrota electoral, el alza incontenible del dólar y del riesgo país, no faltaron a esta cita. Fue el caso de Dante Sica, ministro de Producción y Trabajo de la Nación, y del titular de la AFIP, Leandro Cuccioli, quienes disertaron durante la primera fecha.

En la segunda jornada, una de las charlas principales abordaba otro tema "caliente" en medio de la recesión económica: "desafíos para la generación de empleo". Allí, un panel conformado por referentes del sector público, privado y sindical, se proponían analizar las herramientas para incentivar el crecimiento del trabajo formal en una Argentina que no genera nuevos puestos genuinos desde hace años.

Incluso los datos oficiales muestran este panorama "en rojo". En el informe del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) de mayo –últimos datos disponibles- comprobó que hay 217.100 empleados registrados menos que en el mismo mes de 2018 (una baja de 1,8% en un año). En el sector privado exclusivamente, hubo 184.100 trabajadores registrados menos.

Al ir un poco más atrás en la línea de tiempo, se comprueba que el desempleo se agravó rotundamente en la "era Macri". Un reciente informe de la consultora Radar muestra, por ejemplo, que el empleo industrial perdió 200.000 puestos de trabajo registrados en casi cuatro años.

En ese contexto se sentaron a debatir en el escenario de la Usina del Arte Marcelo Rosenblatt, Director Provincial de Promoción del Empleo en Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, Argentino Geneiro, Secretario de Capacitación y Formación Profesional de UTHGRA, y Javier Goñi, Gerente General de Ledesma.

La moderadora, María Ángeles Stelzer (Directora de Asuntos Corporativos de Volkswagen Argentina) arrancó el debate recordando que "el 40% de los trabajos que se realizan en Argentina no agregan valor y se encuentran en la formalidad".

Ante este escenario, Geneiro opinó que las pequeñas y medianas empresas (Pymes) "están ahogadas por la carga tributaria, y no pueden afrontar los gastos que tienen. Hoy una persona que trabaja aporta casi el 50% de lo que gana a un Estado que no le devuelve nada en prestaciones. Hay que repensar eso también para que las Pymes, que son las que más empleo generan, tengan la posibilidad de poder sostenerse".

El gremialista también recordó que los sindicatos se encuentran trabajando activamente en distintas iniciativas en torno a la educación para el trabajo, para reconfigurar los saberes y capacidades de sus afiliados ante cambios tecnológicos cada vez más acelerados. "En esto el capital y el trabajo tienen que ir juntos. Sin dudas el valor más importante que tiene las empresas es el capital humano", insistió el representante de los gremios, y mencionó como ejemplos la escuela de capacitación dirigencial que desarrolla la UTHGRA.

Geneiro mencionó además que los sindicatos trabajaron junto a autoridades del gobierno nacional otra iniciativa que implicaba la creación de un instituto de capacitación laboral a nivel nacional, un ente autárquico que tuviera cuatro directores de cámaras empresarias y otros cuatro del movimiento obrero, para adaptar al talento disponible a las necesidades de la empresa y la industria. "Sería para ir buscando la mejor salida para el cambio en el mundo del trabajo. Se frenó porque estaba dentro del paquete de la reforma laboral, pero está el proyecto listo, trabajado con los técnicos, y creo que es muy interesante", recomendó.

También Rosenblatt indicó que había quedado muy conforme con el trabajo que se realizó en torno a esa iniciativa hoy frenada, y consideró que la recalificación de las personas para el trabajo del futuro es algo necesario. Pero hizo un foco especial en el desempleo juvenil.

"Es una problemática a nivel mundial, en todos lados a los jóvenes les cuesta conseguir el primer empleo. En Argentina tenemos 23 o 24 por ciento de jóvenes sin empleo. Y a esto se suma que hay una revolución que se aproxima y en la cual las tareas que se están automatizando son las que hacían los jóvenes", describió el funcionario bonaerense.

Relató además que, en base a este diagnóstico, en el gobierno provincial se comenzó a trabajar en la renovación de la oferta de talento mediante 300 centros de formación. "Hoy tenemos 70.000 jóvenes en estos cursos", declaró.

Sin embargo, remarcó que otro vértice del trabajo no es con las personas sino con las empresas, para que incorporen a ese talento disponible: "El sector empresario también hace búsquedas con perfiles muy ambiciosos, y por eso dejan afuera a gente que está capacitada pero que se siente que ni puede participar en esas búsquedas. Creo que tenemos que trabajar ambas partes en ser más eficientes en este tema".

En el panel de la Semana del Management, el sector empresarial estaba representado por Javier Goñi, quien fue aún más tajante en su diagnóstico: "En Argentina no logramos crear empleo en forma sustentable y de calidad en los últimos 10 años, así que estamos haciendo algo mal".

"Tenemos que hacer un mea culpa todos los que vivimos en la Argentina y también ser parte de la solución", sentenció, al tiempo que pidió "sacarse la careta" para debatir aquello que vuelve más competitiva a la economía y las empresas argentinas.

Para el titular de Ledesma, "la tecnología es un componente adicional" en ese escenario de por si crítico, ya que "va a eliminar algunas tareas y a crear otras". En su opinión, en el tan mentado trabajo del futuro habrá una complementariedad entre el trabajo humano y el automatizado, con puestos que son los mismos pero que se reconfiguran y que por lo tanto precisan otros perfiles.

"Tiene que haber un diálogo sincero, dejando de lado los prejuicios del pasado de ambas partes porque atrasan. Lo queremos es tener una Argentina que crezca, que genere empleo, y hasta ahora no hemos sido muy exitosos", prosiguió el empresario. "Pongamos ese objetivo común y partiendo del mismo diagnóstico, más allá de la transformación tecnológica y de la educación para el trabajo del futuro", insistió.