Para abaratar costos en medio de su crisis financiera más importante, la firma Eastman Kodak anunció una drástica medida: dejará de producir cámaras de fotos digitales.

La dirección de la empresa informó que abandonará a lo largo del primer semestre del 2012 la producción de  dispositivos de captación de imágenes, lo único que producía en los últimos meses.

En su lugar, pretende reforzar el programa de licencias en esta categoría.

También dejará de fabricar cámaras de vídeo digitales y marcos electrónicos, en medio de un profundo proceso de reestructuración de su negocio por el que planea concentrarse sólo en los productos más rentables.

De acuerdo al comunicado emitido por la firma, la nueva división de consumo de Kodak se centraría en los servicios de impresión de fotografías y en las impresoras de mesa.

Sin embargo, la compañía aclaró que seguirá ofreciendo asistencia técnica para las cámaras y marcos que ya vendió y que cubrirá las respectivas garantías. 

Kodak se declaró el mes pasado en suspensión de pagos y sus acciones cayeron en la Bolsa de Comercio de Nueva York.

Para financiar su reestructuración, obtuvo a principios del 2012 un préstamo del CitiGroup por u$s650 millones.

Incluso pidió rescindir el contrato de esponsoreo del reconocido teatro de Hollywood que lleva su nombre y en donde se entregaban los premios Oscar. Este acuerdo le significaba un costo de u$s4 millones anuales.