Las otras "cuevas": crece negocio de showroom en departamentos y ventas por Facebook

La necesidad de encontrar vías alternativas de ingresos, sumado a los altos costos que implica abrir un local a la calle ha hecho que esta modalidad
Por Patricio Eleisegui
NEGOCIOS - 01 de Noviembre, 2013

El ingenio popular vuelve a decir presente. Esta vez, para enfrentar un escenario económico que se presenta difícil para muchos argentinos, que los induce a buscar formas alternativas para generar ingresos.

Aquellos que tienen comercios se encuentran con que deben sortear un contexto signado por menores ventas y una incesante suba de costos. Quienes estaban alquilando y han tenido que cerrar, se topan con un gran stock de mercadería que no pudieron colocar. Así, mientras la inflación no decae y el consumo sigue "caliente" sólo en algunos rubros -como autos o turismo- no faltan los "emprendedores" que han apelado a diferentes estrategias para encontrar canales de venta asociados con gastos más acotados.Es así que, en este último tiempo -y como respuesta directa al incremento de los alquileres comerciales- una nueva "moda" ha venido creciendo con fuerza: los "showrooms" en casas y departamentos.Se trata de espacios propios o en algunos casos alquilados para la ocasión, en los que se instalan auténticas "tiendas privadas" a las que accede un número cada vez mayor de personas interesadas en comprar más barato.

Estos ámbitos comerciales sin vidrieras -que buscan quitarle algo de clientela a los puntos de venta tradicionales- se caracterizan por una nada despreciable variedad de artículos, que incluye ropa, zapatos, artículos de cuero, joyas y accesorios.

En otros casos, productos de bazar, electrónica y artículos del hogar.El principal canal de difusión es el boca en boca. Pero la misma ha venido ganando mayor vuelo por el uso de redes sociales como Facebook. Conocidos y "amigos de amigos" son fuentes retro-alimentadoras del negocio.El crecimiento de esta modalidad de venta "puertas adentro" ha despertado incluso el recelo de los comerciantes "a la calle" y hasta de actores del sector inmobiliario, que ven cómo se multiplican las propuestas de "showroom" a la par de que se expanden los locales vacíos.Fenómeno en expansión Desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) su secretario, Vicente Lourenzo, sostuvo a iProfesional que "es un fenómeno que viene creciendo y se está haciendo cada vez más fuerte"."Lo que está ocurriendo con los showrooms privados es un síntoma de cómo es la relación actual entre comerciantes y los dueños de locales. Los propietarios buscan aumentar los alquileres, pero chocan con la imposibilidad de muchos particulares que ya no pueden soportar los gastos de estructura. Y este cruce de posiciones termina dando como resultado un nuevo local vacío", comentó.En el sector "tradicional" no faltan voces que tildan a esta modalidad como de "competencia desleal". "Alquilar un local en un barrio de buen movimiento comercial puede costar hasta $30.000 mensuales, mientras que un espacio privado puede llegar a valer diez veces menos en la misma zona", aseguró a iProfesional un vocero de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA)."Al principio no le prestábamos mucha atención a este fenómeno, pero tenemos que reconocer que cada vez son más los encargados de negocios a la calle que nos plantean su inquietud y se quejan de este tema", agregó.Servicio personalizado "La ventaja es que podés vender más barato, ganás bien -sin que para ello tengas que colocar grandes volúmenes- y tenés menos riesgos, porque manejás costos más acotados", destacó una de las "propietarias" de un showroom que se maneja en la zona de Belgrano."Si la mercadería que ofrecés es buena, el boca a boca es rápido", agregó, al tiempo que sostuvo que en estos lugares se pueden encontrar productos que se ven en las vidrieras de los shopping pero a un 30% o 40% menos.

La fuente consultada señaló que en muchos casos la mercadería es similar a la que los mismos fabricantes que les confeccionan en sus talleres a las marcas reconocidas.Además de los precios más bajos, otros beneficios que mencionan estos cultores de los "showroom privados" son la atención más personalizada y la sensación entre los compradores de que están llevando productos en un lugar diferencial, al que sólo accede un grupo de personas.Otra fuente consultada dio cuenta de las ventajas que le brinda a modo personal esta modalidad: "Te permite estar más relajada y manejar tus tiempos, podés administrar tus horarios".En su caso, que no es el único, hasta ofrece la facilidad de acercarle los productos a sus clientes: "Si les gusta algo que ofrezco por Facebook yo se los puedo llevar para que se lo prueben, si no pueden venir a verlo a donde yo estoy o buscarme en las ferias en las que participo".

Con respecto a la forma de pago, aclaró que por ahora sólo recibe efectivo.

Existen muchos "entrepreneurs" que ofrecen el producto por Facebook, concretan la venta por mensaje privado y luego las partes acuerdan el envío a través de mensajería privada (a cargo del comprador) que cancela contra entrega.

No obstante, para los casos en los que los showroom casi se convierten en "pequeños comercios" (aunque sigan ofreciendo su mercadería dentro de un domicilio), las posibilidades de pagar con tarjeta de crédito resultan cada vez más frecuentes.Entre las opciones más conocidas dentro de esta tendencia hay que mencionar a Mia Paix, Boheme Deco, Cloetas Handbagss, Pago Chico, o Sole Dotti, entre tantas otras.

Otro ejemplo de estas nuevas alternativas de compra que se pueden encontrar en las redes sociales:

Uno de los casos de venta de prendas de vestir es el siguiente:

Por supuesto, este tipo de alternativas no son exclusivas de Capital Federal, ya es común ubicar estos puntos de venta a puertas cerradas en ciudades del interior como Rosario, Córdoba o Mendoza.Mientras, cierran locales Todo este fenómeno ocurre a la par de que se profundiza el cierre de locales a la calle, producto de la fuerte suba de costos laborales, de mantenimiento y la elevada presión impositiva.En la actualidad, en barrios e importantes avenidas comerciales se observa más de un comercio cerrado por cuadra."Este año hay más negocios cerrados en relación con el año pasado", confirmó Vicente Lourenzo, de CAME.

"Se vende menos y no cualquiera aguanta la carga que implica el pago de empleados, impuestos, mantenimiento y alquiler", afirmó.La entidad realizó un trabajo en el que se detalla la cantidad de locales vacíos en los distintos centros comerciales a cielo abierto. En algunas zonas, como por ejemplo Once, el total de persianas bajas se triplicó en estos últimos doce meses.Una proporción similar se observó en los comercios que están sobre la Avenida Santa Fe, desde Plaza San Martín hasta Pueyrredón. A lo largo de esta última avenida, desde Once hasta Avenida Las Heras, hay casi unos 50 cerrados.A los bolsillos más ajustados, por salarios que ahora crecen a la par o por debajo de la inflación, se suma la menor llegada de extranjeros, lo que complica la situación de los comerciantes. Así, en 10 cuadras de la calle Florida, sobre un total de 290 locales, existen no menos de 20 vacíos, según CAME, cifra impensada años atrás para esta zona. Y, en ese mismo tramo -incluidas las galerías- la cantidad sube a 70.En Palermo, donde proliferaron importantes centros comerciales -tanto de ropa como gastronómicos- la superficie sin ocupar ya forma parte del paisaje y esto, a su vez, desanima a cualquier potencial interesado en aventurarse a abrir un negocio.

Para Lourenzo, la expansión de los showroom guarda relación directa con los altos precios de los alquileres comerciales.

Según el representante de CAME, "al freno de la venta y el consumo, que ya es notorio, hay que sumarle que los propietarios parecen vivir en una realidad que no es la actual"."Los dueños apuntan a cerrar los alquileres teniendo como parámetro de venta los números de 2010 y no entienden que el país es otro. Exigen montos y condiciones a las que los inquilinos no pueden hacer frente y por eso el vacío hoy se ve en cualquier avenida", aseguró a iProfesional."En 2012, según nuestros registros, el consumo bajó al menos un 3% respecto de 2011, y este año también cerrará con una caída similar en comparación con período previo. Es decir, en dos años hubo una merma de al menos 6 puntos. Sin embargo, al vencimiento del contrato de alquiler, el dueño parecería iniciar la renegociación pensando que se vende como antes", dijo."Los locales están sobrevaluados. Hasta tanto no se revean algunas cotizaciones no se revertirá los cierres y seguirán proliferando estas nuevas formas de comercializar por fuera del modo tradicional".El análisis de Lourenzo se condice con otras mediciones, además de la concretada por la misma CAME. En ese sentido, según la consultora inmobiliaria Colliers International, en 2013 se está ofreciendo un 21% más de metros cuadrados de alquiler para comercios que el año pasado.

Este último relevamiento incluso consideró lo que sucede en las principales calles comerciales como Santa Fe, Callao, Florida, Cabildo y Rivadavia.

Te puede interesar

Secciones