¿Lo arreglo o lo tiro?: por la falta de repuestos importados, se potencia la compra de artículos del hogar usados
Los efectos de las trabas a los productos, repuestos, accesorios e insumos importados siguen haciéndose sentir con fuerza en el plano local.
Y ya se prevé que estas restricciones se mantendrán e incluso se profundizarán, tras los problemas que tiene el Gobierno para hacerse de dólares.Los electrodomésticos y las piezas que lo componen -claves a la hora de una reparación- no escapan a esta problemática. En muchos casos, el inconveniente se intensifica al no haber reemplazo local.
Este escenario hace que los tiempos para los arreglos se dilaten. Al respecto, desde distintos services aseguraron a iProfesional que las demoras para reparar un lavarropas, una heladera o un equipo de DVD -por citar algunos ejemplos- pueden ser de más de tres meses.
En algunos casos, hasta directamente recomiendan olvidarse del viejo y comprar un electrodoméstico nuevo.
Esta situación resulta compleja también para los comercializadores. Prueba de ello es la cantidad de denuncias y quejas que llegan a diario a Defensa del Consumidor, a raíz de las demoras en los arreglos e inconvenientes con las garantías.De hecho, en el sitio de ese organismo se suman reclamos por los tiempos tan prolongados en las reparaciones para marcas como LG, Candy, Whirlpool, Philips o Samsung."No tenemos repuestos. Está complicado todo tipo de arreglos, desde una afeitadora, una cafetera hasta aparatos más grandes. Lamentablemente, sólo podemos conseguir la mitad de las piezas que necesitamos", aseguró a este medio Enrique S., un comerciante con locales en Boedo, Flores y Belgrano.En igual sentido se expresó el encargado de un service de Caballito: "La reparación de algunas marcas ya directamente pasó a ser un tema a negociar con el cliente".
Y agregó: "Pasa con lavarropas, cocinas o heladeras. Ahora el cuadro de faltantes se extendió a los equipos de aire frío-calor. A nosotros nos está costando más de dos meses hacernos de una pieza, si es que la conseguimos".Según pudo relevar iProfesional a partir de más de una docena de consultas a casas de service, la ausencia de repuestos complica las reparaciones de:•Microondas.•Cafeteras.•Aspiradoras.•Licuadoras.•Lavarropas.•Heladeras.•Lavavajillas.•Televisores.•Celulares.•Equipos de Audio y DVD."Hoy por hoy casi no hay plaquetas electrónicas ni botoneras para artefactos del hogar como los microondas. Además, no se consiguen mangueras ni bolsas para aspiradoras y tampoco vasos para cafeteras o, por ejemplo, licuadoras. Faltan algunas partes de procesadoras y correas dentadas para ciertas máquinas", indicó Mauro L. desde un local de Boedo.Una fuente de la firma "RapiserviceYa" detalló que "todo lo que son piezas de electrónica -como es el caso de las de los lavarropas- están entre las más complicadas de conseguir". "Nosotros les advertimos a quienes se acercan que las demoras puede llegar a ser de hasta tres meses, porque después no queremos quejas. A veces hasta le decimos que no les conviene reparar el equipo y que vayan en busca de uno nuevo. Va en contra de nuestro negocio, pero magia no podemos hacer si no tenemos las piezas", se sinceró un técnico a iProfesional.¿Lo Arreglo o busco uno nuevo en cuotas? Al faltante hay que adicionarle el encarecimiento de los repuestos que, en el último año, pasaron a valer el doble en algunos casos. "Para los LCD, hay piezas, plaquetas o mismo la pantalla, que no se consiguen. En esos casos, conviene comprar uno nuevo y evitarse la espera y dolores de cabeza", afirmó a este medio un Marcos S., que trabaja en una casa de reparaciones en Palermo. "Los repuestos pueden llegar a conseguirse a través de un service oficial. El arreglo con mano de obra puede costar un poco menos que un equipo nuevo, pero a veces entre pagar la reparación, el cliente opta por hacerse de otro equipo en cuotas", agregó.A modo de ejemplo, sostuvo que cambiar la placa madre de un televisor smart Samsung de 32 pulgadas puede llegar a tener un costo de $2.500 (en caso de optar por reparar esa misma pieza, el precio disminuye)."El tema es que no se consigue lo que se necesita para el arreglo", remarcó.En las principales cadenas de electrodomésticos, los LED de 32 pulgadas están en un rango de precios que va desde los $4.000 hasta los $6.500, dependiendo de la marca y aplicaciones que incluya."Nos ha pasado muchas veces que nos enteramos que los contenedores con piezas quedan varados en Aduana. Tratamos de arreglarnos con lo que tenemos, pero a veces no se puede", expuso el encargado de un comercio de Urquiza."En caso de que se rompa un reproductor de DVD, el particular debe pensar que -mano de obra incluida- tendrá que desembolsar unos $600. Pero hoy en Mercado Libre se consiguen a $500 y por eso mucha gente no los arregla", añadió la fuente consultada.Las cámaras fotográficas lejos están de ser la excepción. De las consultas efectuadas se desprende que sólo se consigue un 50% de los accesorios y piezas requeridas en las reparaciones.El técnico de Urquiza señaló que hay cámaras familiares que ingresan a los service por problemas en la lente. En esas circunstancias, sí se puede reparar. Pero cuando se trata de inconvenientes electrónicos, "algunas cosas se consiguen y otras no". La mayoría de la gente directamente se vuelca a la compra de una cámara nueva.En el caso de las notebook, cambiar una placa madre para un dispositivo, por ejemplo marca HP, puede rondar los $3.000, mano de obra incluida. "Lo más factible es que puedas conseguir una placa usada, es difícil hallar una sin uso", aseveró Daniel L., titular de una casa de computación en Caballito.Recalcó que las marcas nacionales son más fáciles de conseguir y expresó: "En el caso de un aparato Sony o HP, te conviene comprar un equipo nuevo".En la actualidad, el mercado ofrece dispositivos portátiles que arrancan en los $4.000. En esas circunstancias es común que los usuarios evalúen los beneficios de un producto sin uso.Las diferentes situaciones expuestas se viven a diario en varios rubros en los que hay involucradas marcas extranjeras. Esto, debido a la poca oferta en comercios dedicados a la importación, tanto en Buenos Aires como en el interior.La tendencia del usadoDe la mano de estas complicaciones, desde las casas de reparaciones destacan la consolidación de tendencias que son producto del cerrojo importador. Entre ellas, la del incremento en la venta de electrodomésticos usados."Para algunos equipos nuevos nacionales casi no hay variedad. Apenas se ofrecen dos alternativas de modelos y muchos de ellos son de dudosa calidad. Por eso en algunos casos la gente se vuelca a un equipo usado importado de marca reconocida", afirmaron desde la agencia de Palermo.Consultados respecto de la demanda de artículos que ya tienen uso, desde AulaMaula.com indicaron a iProfesional que la oferta de heladeras, cafeteras o planchas aumentó considerablemente en el último mes. Además, aseguraron desde el portal que la categoría "compraventa" de electrónica se incrementó hasta rozar los 700.000 avisos y, de ese total, el 85% corresponde a productos usados.Faltantes A la par de las complicaciones para arreglar artículos electrónicos, los clientes también enfrentan el problema de los faltantes de tecnología nueva y variedad de marcas.En ese sentido, productos como planchas o aspiradoras suelen demorarse hasta 60 días para su ingreso al país por las trabas a las importaciones. La consecuencia: un desabastecimiento notorio, que las cadenas de retail disimulan como pueden con la mercadería disponible. En el caso de los distribuidores, una de las principales causas de esta retención de productos se vincula con la fuerte suba del dólar en la que avanzó el Gobierno a principios de año. Buena parte de la mercadería iba a ser llevada a Tierra del Fuego para su ensamble. Sin embargo, desde cámaras de importadores informaron que "se retiene el producto hasta saber el verdadero costo de reposición". Para complicar aun más el panorama, desde el sector afirmaron que "el problema no viene dado sólo por los faltantes de mercaderías, sino por la especulación de parte de algunas empresas o cadenas que saben que, con el paso de los días, ese stock podrá venderlo más caro".