Autos: las automotrices dan marcha atrás con aumentos de precios de hasta 15 por ciento
La gestión del Gobierno para evitar que el efecto de la salida del cepo se traslade fuertemente al precio de los autos dio sus resultados. Las marcas que habían enviado a su red de concesionarias, después de la devaluación, una lista corregida con nuevos valores de los 0 km acomodándolos a un dólar no de $9,80 sino más cercano a $13,20, decidieron dar marcha atrás y mantener el esquema de los primeros días de diciembre.
Ford y Volkswagen fueron, especialmente, las que debieron frenar los aumentos establecidos para su gama de productos que se ubicaban entre un 10% y un 15%. El impacto de una devaluación es muy grande en el sector automotor ya que la mitad de los autos que se venden son importados y los de producción nacional tienen un contenido de piezas del exterior de más del 70 por ciento.
Desde el Ministerio de Producción que conduce Francisco Cabrera seguían de cerca los movimientos de las terminales respecto de precios y, en cuanto vieron las modificaciones de los valores que hicieron algunas compañías, no dudaron en moverse con rapidez. Fue el propio ministro que llamó a ADEFA, la asociación que las agrupa, para pedirles colaboración. Desde la entidad que preside el titular de Ford, Enrique Alemañy (en la foto), se comunicaron con cada empresa para hacerles conocer el pedido oficial.
Fue por eso que estas dos compañías decidieron dejar sin efecto los aumentos establecidos y postergar la decisión para enero. En otras terminales, que habían anticipado a su red que para enero próximo iban a manejar una pauta de incrementos de entre el 5% y el 10% ( en parte para que sus concesionarios pudieran ir cerrando operaciones), aseguraron a Ámbito Financiero que "la medida está en análisis".
Esto abre un interrogante sobre la política de precios que tendrán el mes próximo. Los empresarios aseguran que no pueden evitar, por mucho tiempo, trasladar a precios el impacto de la devaluación pero entienden la solicitud oficial. Por eso, a partir de enero, deberán sentarse a negociar. Tampoco desde las terminales quieren irritar al Gobierno no aceptando el pedido cuando se está decidiendo cuál será la suerte de los Impuestos Internos que golpea a buena parte de los productos que hay en el mercado y que el ministro Alfonso Prat Gay adelantó que será corregido. "En un momento en que estamos esperando una solución al problema de los impuestos, no podemos tensar la relación con una suba de precios que puede ser postergada" explicó un directivo de una automotriz.
El actual esquema de Impuestos Internos vence el 31 de diciembre y se espera que antes de esa fecha el Gobierno disponga una corrección.