Se agudiza la crisis en la confitería Boston, un clásico de Mar del Plata: está al borde del cierre
La histórica confitería Boston, un clásico de Mar del Plata, está al borde del cierre.
Comprada hace apenas un año y medio por nuevos dueños, que habían prometido una importante expansión, la confitería entró en una crisis de la que parece no tener salida.
Así, las famosas medialunas de "la Boston" podrían dejar de fabricarse.
Hasta la noche de este jueves, publicó Clarín, 28 de los 80 empelados "”que no cobran sus sueldos desde abril"” habían recibido telegramas de despido, y los locales permanecen tomados por los trabajadores.
El gremio gastronómico se manifestó sobre el conflicto: "Aquellos anuncios de grandeza, de ampliación de marca a todo el país, de exportaciones de medialunas al exterior, rápidamente se convirtieron solo en una foto para los medios que poco tenía que ver con la realidad. Que nada tiene que ver con esta realidad. Si el 2017 no había terminado nada bien y ya dejaba en claro que el futuro de la Confitería era inexacto, el 2018 y su comienzo difícil lo confirmaron para los trabajadores y para UTHGRA. Las demoras en los pagos se hicieron insostenibles, así como la desidia empresaria", dijo la secretaria adjunta, Nancy Todoroff.
Y continuó: "Hay telegramas de despido, pedido de desalojo y denuncias que no tienen asidero alguno, pretenden convertir a las víctimas en victimarios, por momentos con la triste anuencia de la Justicia, a la que sin embargo seguiremos recurriendo hasta agotar todas las instancias posibles para defender y acompañar a todas estas familias".
El 9 de noviembre de 2016, tras meses de sigilosas negociaciones y por medio de una operación millonaria, los hermanos Pablo y Juan Manuel Lotero (dueño de la panadería y confitería Xocolata) y Carl Schí¶nfeldt, a cargo de un fondo de inversión con terminales en Chile y Austria, se hicieron cargo de la firma.
"Contamos con financiamiento para pasar de diez a cien locales", anunció Pablo Lotero. Nada de eso sucedió.
Los locales de Varese y el de la calle Buenos Aires, en el centro, frente al Casino Central, están tomados hace 35 días.
Según los trabajdores, desde que llegaron los nuevos dueños "comenzaron a vaciar la empresa: las medialunas, las roscas que aquí se vendían a $300, se las llevaban a Xocolata para venderlas a $75, total era 100 % de ganancia", denuncian.