A pocas horas de conocido el nuevo salto que pegó la inflación en la Argentina, las petroleras no cambiaron su hoja de ruta y finalmente aplicaron un nuevo aumento en los surtidores. Shell y Axion implementaron una suba del 3,8 por ciento, según lo acordado con el Gobierno en el último tramo del año pasado, y se espera que la estatal YPF efectúe un movimiento similar en el transcurso de las próximas horas. La nueva suba establecida representa el tercer aumento del combustible en lo poco que va del año.

La primera en aplicar subas fue Raizen, licenciataria de la marca Shell en nuestro país, y las nuevas cotizaciones comenzaron a aplicarse poco después de conocido el salto inflacionario. La compañía estableció una cotización de 169,4 pesos para el litro de nafta súper, 214,5 para la misma unidad de producto premium, elevó a 190,9 el litro de gasoil común, y finalmente llevó a 256 la misma medida pero su diésel más potente.

En el interior del país, el litro de nafta súper de la misma compañía se cotiza a razón de 200 pesos, mientras que la opción de más octanaje supera los 254 pesos. "En el interior de la provincia de Buenos Aires, en promedio, el incremento es de 10 pesos por litro, aproximadamente", comentaron a iProfesional desde un centro de expendio ubicado en el oeste bonaerense.

Axion, en tanto, aplicó subas en el interior de la Argentina y el litro de su nafta súper ya se ubica en torno a los 196,5 pesos. Su producto Quantium subió a 254,6 pesos la unidad, mientras que sus alternativas en diésel se elevaron a 223,1 y 302,2 pesos el litro, respectivamente.

¿Qué ocurrirá con YPF? Se espera que, a partir de la suba abrochada con el Gobierno, el litro de súper escale en Capital Federal hasta los casi 170 pesos y la misma unidad pero de premium aumente a algo más de 213 pesos. Por su parte, el litro de diésel se iría a 181,7 pesos, y la opción premium superará los 254,7 pesos la unidad.

Al igual que los anteriores, el incremento actual forma parte del acuerdo establecido junto con el Gobierno Nacional. En noviembre del año pasado, las empresas petroleras junto al Ministerio de Economía acordaron un tope a las subas de la nafta por el plazo de cuatro meses.

Las subas del combustible se volvieron una constante en este 2023.

En diciembre se concretó el aumento del 4 por ciento y a mediados de enero y febrero se produjo una suba similar.

¿Habrá más subas en los próximos meses?

En diálogo reciente con este medio, Guillermo Lego, gerente general de CECHA, la entidad que integra a los empresarios del expendio, comentó que "es de esperar" que el Gobierno extienda el programa de subas pautadas –el acuerdo actual concluye este mes– al resto del año.

"Nuestra situación continúa desmejorando. Es de esperar que continúen los aumentos si la inflación sigue en el 6 por ciento. Los ingresos de las estaciones de servicio están atados a los precios del surtidor mientras que, por el contrario, los costos están basados en la inflación", explicó el directivo a iProfesional.

"Solicitamos que la confederación participe en la mesa de concertación que llevan adelante el Estado y las petroleras. Si bien las estaciones de servicio no formamos los precios y es un tema que no nos corresponde, lo cierto es que queremos que en esas negociaciones se ponga en evidencia que tenemos una caída cada vez mayor de la rentabilidad", añadió.

Inflación y naftas

Se estima que las naftas tienen un peso del 4,2 por ciento en el Índice de Precios al Consumidor (IPC).

Si bien ese porcentaje puede observarse como bajo, lo cierto es que cada "retoque" pega de lleno en los costos logísticos de las empresas. De ahí que ante cada nueva suba las compañías del transporte de mercadería automáticamente incrementan las cotizaciones de sus servicios.

Estacioneros anticipan que las subas continuas se extenderán a los meses venideros.

Durante 2022, las petroleras aplicaron un total de siete aumentos. En naftas quedaron por debajo de IPC anual, mientras que en gasoil estuvieron por arriba de ese indicador.

El año pasado, la nafta súper acumuló una suba del 67 por ciento, mientras que la alternativa premium aumentó 77. Por el lado del gasoil, los incrementos totales fueron del 91 por ciento y el diésel premium presentó un aumento también acumulado del 122 por ciento.