Aunque el pescado tiene sus fanáticos, el consumo per cápita en Argentina es aún bajo. Mientras que en promedio en el mundo se consumen por año unos 20 kilos, en el país el consumo ronda los 7,5 kilos. Sin embargo, lejos de ser un dato desalentador, los socios de Artesanos del Mar trabajan desde hace más de 10 años para imponer el pescado en la dieta de los argentinos con un producto de calidad premium. Para llegar a cada vez más mesas, ingresaron en 2020 al sistema de franquicias, logrando llegar a la actualidad con 8 locales franquiciados, 7 propios y además de llegar a las góndolas de las principales cadenas de supermercados del país.

La marca Artesanos del Mar surgió en el 2001, cuando Lucio Gamero, durante unas vacaciones en Puerto Madryn, notó cómo un grupo de pescadores pescaban descendiendo a las profundidades del mar con compresores de bicicleta. La frase con la que Lucio describió la escena fue que eran "Artesanos del mar", y como buen abogado, decidió registrar el nombre como marca.

"Sin embargo, hasta el 2010, la marca no tuvo un uso significativo. La empresa empezó a desarrollarse cuando mi hermano Francisco Gamero, actual CEO, le propuso desarrollar un servicio de delivery de pescados y mariscos envasados de calidad que generara confianza en el consumidor", relata Gonzalo Gamero, actual gerente comercial de Artesanos del Mar.

Con el servicio de delivery, llegaron a tener más de 30 pedidos diarios que repartían en tres camionetas por toda la ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires. Sin embargo, el negocio dio un vuelco cuando en 2014 abrieron un depósito con local a la calle en Beccar, de donde es la familia Gamero.

"Poner el local no fue parte del plan original, pero en el proceso de acondicionar el inmueble para depósito, los vecinos nos tocaban la puerta para saber qué iba a funcionar allí. Cuando les decíamos que era el depósito de la marca, se lamentaban de que no iban a poder comprar físicamente, porque muchos eran clientes nuestros de delivery. Así que finalmente destinamos una parte del depósito como local a la calle", recuerda Gamero.

Las primeras franquicias de Artesanos del Mar

Con un 60% de las ventas, el local de Beccar demostró ser más eficiente que el delivery, por lo que los socios decidieron concentrar sus esfuerzos en mantener la calidad de los productos e ir desarrollando la cadena Artesanos del Mar, primero con locales propios y después con franquicias. Hoy tienen 7 locales propios, 8 franquicias y para el 2024 esperan sumar al menos 3 franquicias más en la Ciudad de Buenos Aires.

Arrancaron haciendo solo delivery y ahora tienen 15 locales a la calle y están en las principales cadenas de supermercados

El diferencial de Artesanos del Mar, explica Gonzalo, es que venden todo fraccionado y envasado con código de barras, tanto en lo que refiere a productos frescos como congelados. Además, remarca, tienen comidas listas, prefritos y rebozados.

Los pescados, todos de mar, se seleccionan, fraccionan y envasan en una planta propia habilitada por SENASA de unos 500 metros cuadrados en Martínez. Desde allí abastecen a los 15 locales Artesanos del Mar y a las 6 cadenas de supermercados, y aún, cuenta Gamero, tiene capacidad ociosa para seguir expandiéndose tranquilos por unos años más sin necesidad de sumar más metros cuadrados.

"Por eso buscamos desarrollarnos más, tanto con franquicias como con retailers", remarca Gamero, quien ya ganó como clientes a las cadenas Jumbo, Disco, Chango más, Libertad, Carrefour y El Abastecedor.

Los locales de Artesanos del Mar, que pueden ser atendidos por una única persona, son de entre 40 a 50 m2 con un diseño que busca transmitir frescura, higiene y calidez. El mobiliario es sencillo y está dispuesto de manera que le dé amplitud y comodidad al local.

Para abrir una franquicia Artesanos del Mar hay que invertir desde u$s28.000

Para la puesta en marcha de cada franquicia, detalla Gamero, Artesanos del Mar ofrece asistencia permanente y capacitación en todos los aspectos del negocio, por lo que la experiencia en el rubro no es excluyente. "Para nosotros es clave un franquiciado con ganas, que esté detrás del negocio motivando la venta y entendiendo las necesidades del cliente. Somos muy selectivos con el perfil; preferimos abrir pocas franquicias, pero con las personas adecuadas para dar pasos firmes".

Para ser parte de la cadena Artesanos del Mar, es necesario abonar un canon de ingreso de u$s5.000 y se requiere una inversión inicial de alrededor de u$s23.000 para la obra, mobiliario, cámaras de frío y cartelería. 

Para el 2024 planean exportar a la región y no descartan abrir franquicias en el exterior

"El retorno de la inversión está estimado en un período de entre 18 a 24 meses y la rentabilidad neta es del 12 % de la venta. La clave está en estar presente, no necesariamente detrás del mostrador, pero sí detrás del negocio", detalla.

Para el próximo año, dice el empresario, continuarán con su plan de expansión por la Ciudad de Buenos Aires y darán los primeros pasos hacia la internacionalización de la marca, primero haciendo exportaciones y luego, si el producto tiene la aceptación deseada, otorgando franquicias.